Yo soy un tio, y me gusta follar, supongo que como a todos. Pero me siento diferente, necesito el sexo como una droga, puedo controlar mi ansiedad, pero no a mi cuerpo y me suelo masturbar muy a menudo.
Ademas de follar con mi poya, me gusta follar con mi boca, con mis dedos, con mi mano.
Antes de todo me gusta acariciar y sentir la piel de esa mujer, tocandola puedo memorizar su cuerpo y tenerlo para siempre en mis recuerdos.
Y besando, y arrancando suaves pellizcos con mi boca, con mis labios, dejando rastros de saliva por alla por donde paso.
Y me gusta llegar hasta el centro del deseo, del calor y del amor, primero con mis dedos, acariciando los muslos y llegando a las ingles poco a poco, suspiro a suspiro, despues con mi boca, aguantando el deseo de llevarme conmigo un trozo de su carne, oliendo el aroma a sexo, deseando comer una fruta deliciosa y siempre caliente.
Y le abro las piernas, y me ahogo en ella. Empiezo lamiendo, despues explorando con mi lengua, jugando con mis dedos, amagando con las yemas, con mi lengua, hasta que consigo ahogarme, ya no puedo respirar porque mi nariz tambien esta tapada con todos sus grandes labios. E introduzco la lengua y veo que no llego a mas y entonces continuo con mis dedos, con uno, notando las rugosidades de su interior, con dos, intentando profundizar... y me encanta, me encanta manejar mis manos mientras puedo mirar con cierta distancia los gestos de placer y deseo.
Es el momento en que ella necesita mas y nos unimos como solo dos enamorados se pueden unir y sentirse completamente.
Te quiero