Sirviendo unos vasos de jugo natural frío y unas galletas en la misma cocina a la vez, en el enamorado se le acerca por detrás al peñizcarle una nalga y abrazarla pegado la besa, entonces Brooke le da esté empujón qué lo mira fijamente comportate acuerdate por amor a Dios qué tenemos la visita de la señora qué está precisamente sentada ahora en nuestra sala comedor, no puede despacharla ni hacerme esa grocería debemos ser corteses hasta educados, cuándo termine su visita al poco tiempo qué se vaya te atendere todo lo qué quieras adicionalmente se te ofrezca incluso te dare tus fantasias sexuales de ejecutiva universitaria, le habla bajo al oído estoy plenamente desnuda debajo del atuendo qué visto ahorita ponte lujurioso y morboso hasta erótico y ten la pinga erecta cómo enorme hasta gigantesca igualmente dura sobre todo bien parada firme para mí. Vayamos a la sala comedor para qué no sospeche ni hagamos esperar largamente a la Señora qué nos hizo la gentileza de visitarnos en la tarde de hoy en neustro hogar al besarlo y sonriendole en persona cómo en vivo y a todo color la mismisima y queridisima hasta emocionadisima y espectacularisima Brooke a su enamorado.

Efectivamente, se reunen al ofrecerle e invitarle un buen jugo de naranja fría y unas galletas a la Señora, qué les habla seriamente a los dos qué los atienden hasta se quedan escuchandola fijamente lo qué les está conversando detenidamente acerca de los menesterosos de la misma parroquía a donde acuden todos los domingos a misa Brooke cómo su enamorado, ya estrechandoles las manos ambos me dió mucho gusto y agrado encontrarlos en está tarde de sábado en su hogar para ponerles al dia de las novedades de nuestra parroquía, agradecída se despide la Señora al besarle la mejilla a Brooke y a su enamorado, le acompaña afuera para qué aborde el taxi qué le pidio por telefono hace unos segundos le dice adios con las manos elevadas hasta qué se pierde en la distancia y en la lejanía de la barriada la Señora de la iglesia. Recogiendo en la sala comedor el enamorado al dejar todo en la cocina, los vasos y el plato de las galletas al fregarlos y dejarlos en el mismo escurridor, se le acerca Brooke abrazandolo al besarlo en su cuello le habla ya me deshice de la presencia de la Señora de la iglesia ahora estamos solos y estoy disponible cómo libre vayamos apurados y corriendo al cuarto para hacerte y protagonizarte hasta acostarnos para la fantasía de ejecutiva unviersitaria qué tengo preparada y montada para tí en está tarde de sábado sonriendole, salen corriendo cómo chiquillos adolescentes al cerrar la puerta de la recamara de Brooke escuchandose muchas risas, gemidos y emociones hasta sexo qué tienen los dos justamente en la cama esa tarde de sábado qué recibieron la visita de la Señora de la parroquía adonde acostumbran ir a misa los domingos tanto Brooke y su enamorado qué los pone al día de las novedades de la misma iglesia.