~~El viernes por la mañana se levanto con agujetas, menos mal que tenía sesión de masaje. A la masajista la volvió a poner al día de sus nuevas aventuras, y a la vez le planteó la posibilidad de realizar una nueva fantasía, hacerlo con una pareja, la masajista le prometió ayudarla.
A media mañana le llamo la masajista, había llamado a una pareja amiga suya que vivían en una población cercana y que una vez le habían planteado la fantasía de realizar un trío con una chica, tenían alrededor de 30 años, habían aceptado, a primera hora de la tarde se podían ver en el bar del balneario.
A la hora indicada bajo al salón, en un sofá había una pareja joven, estaban tomando café, eran muy guapos y se les notaba nerviosos. Después de presentarse, hablaron un rato, eran novatos y mi amiga tuvo que hacer de estimuladora, la chica no lo tenía muy claro, había tenido relaciones con otras chicas, pero no veía claro de cómo reaccionaría al ver a su marido con otra. Al final decidieron probarlo pero con el acuerdo de parar, cuando surgiese algún problema.
Los llevó a su habitación, se desnudaron los tres, ella que era la más decidida se fue con la chica a la cama, mientras él se sentaba en el sofá. La estiró y se puso encima y empezaron un 69, al poco rato tenía a la altura de los ojos el miembro del chico que pedía guerra, hizo un cambio y se lo introdujo en la boca, mientras la chica continuaba con su trabajo, luego se sentó sobre la boca de la chica, para permitir que su marido la penetrase. Se intercambiaron en la postura las señoras y entonces el chico penetró a mi amiga, era el momento clave, la esposa reaccionó bien, tuvo un orgasmo.
Después de dos horas de intensa actividad se quedaron exhaustos sobre la cama, la esposa se quería ir, consideraba que ya estaba satisfecha, era otro de los momentos claves, si el deseo es muy fuerte es relativamente fácil tener una relación, si este baja y no hay confianza ni otro tipo de vinculo, la reacción más común es marchar. Mi amiga tenía que retenerla, a la mañana siguiente marchaba y deseaba quedarse bien satisfecha, sobre todo cuando tenía la posibilidad de disfrutar de dos personas hermosas, empezó a darles confianza explicándole su vida, preguntándole por la suya, etc.
No tardaron en entrar otra vez a ponerse en marcha, esta vez lógicamente empezó la pareja, mi amiga se sentó en el sofá a disfrutar del espectáculo. Comenzaron con un 69, luego ella se puso encima de él, y se introdujo el miembro al estilo chino, o sea, proporcionándole la visión de su culo, mi amiga se puso de pie sobre la cama y colocó su entrepierna sobre la boca de la esposa, que le proporcionó un trabajo excepcional, le chupo el clítoris y le introdujo la lengua en forma de taladro en el interior de la vagina, a continuación se sentó encima del esposo que le hizo lo mismo. En ese instante se produjo el orgasmo más fuerte de la semana, y toda la cara del esposo que encharcada de sus jugos, mientras su esposa hizo lo mismo sobre su entrepierna.
Naturalmente después de mojar todas las sabanas, se intercambiaron los teléfonos, antes de despedirse.
Al día siguiente marcharía del balneario y ya tenía las ideas muy claras.