Dedicada a Raúl en Irlanda, espero que te animes a entregarme eso que tanto deseo de ti.
Una tarde de mucho calor iba yo en el autobús, a la hora en que todos regresan a la casa… iba de pie y empecé a mirar a los alrededores.
Un poco mas atrás iba parado un hombre, de aspecto rudo, el pelo negro rizado, la piel curtida por el sol, manos enromes y callosas… llevaba puesto una camiseta sin mangas y unos jeans sucios y rotos que estaban descoloridos exactamente sobre el paquete enorme que llevaba entre las piernas.
El hombre miraba descaradamente a las mujeres que subían y bajaban…
Conociendo yo que el que mas macho parece es el mas fácil de llevar a la cama, me fui acercando poco a poco… y en un momento en que se montaron varias personas al autobús me coloqué exactamente delante de él.
Con el bamboléo de vehículo comencé a pegarle mis nalgas a su polla disimuladamente… cada vez mas frecuente… y no estaba equivocado… de ponto sentí que él se pegaba a mi por atrás… y que su aparato estaba cada vez mas grande.
De pronto sentí su mano en mi cintura y yo me pegué y le apreté el culo sobre su órgano… me dijo al oído.
- Bájate en la próxima
Y así fue…me baje después que él y lo seguí, él entró en un baño público y yo fui tras él… cuando entré me agarró por el pelo.
- Me la paraste y ahora me la tienes que comer mariquita.
Entramos a uno de los retretes privados, se bajó los pantalones y la polla saltó como un resorte… era larga, torcida hacia un lado, y la cabeza morada la tenia empapada de líquido.
Se sentó en el retrete y me dijo.
- Cómetela.
Yo me arrodillé frente a él y me metí aquello en la boca… que delicia… sabia a gloria.
Le comencé a pasar la lengua por el tronco por los huevos, por la cabezota, le di la vuelta a la cabeza y me metí aquel aparato divino dentro de la boca hasta la garganta… y se lo succionaba mientras que es decía.
- Así, ahh que rico.
Pero yo no había caminado hasta allí para eso solamente, así que me paré y me bajé los pantalones, mientras él me miraba interrogante.
- ¿Tú quieres gozar? Entonces cógeme el culo papito.
Y me senté sobre el pollón aquel metiéndomela de un golpe… arriba, abajo.
- Ahhhh ¿qué tienes en ese culo que me pone a gozar así?
Yo le apretaba el culo cada vez que bajaba y se lo soltaba cada vez que subía.
Era tanto lo que estaba gozando que no pudo mas y se paró, ensartado en mi culo, y comenzó a bombearme mientras yo me aguantaba a la puerta.
Me bombeaba como un loco y de pronto pasó su brazo por delante de mi y dijo.
- Dame acá esa polla que te la quiero hacer gozar como tú me estas haciendo gozar a mi.
Y me empezó a masajear violentamente con esas manotas callosas que me hacían ver las estrellas.
- Te la voy a dar dentro del culo.
Y me soltó un chorro grandísimo que me bañó todos los intestinos.. pero ahí mismo la sacó y me dijo.
- Sácame el resto con la boca.
Yo me arrodillé y le comí la pollota que soltó tres chorros mas… me tragué todo mientras que con mi mano me sacaba mi propia leche.
El se sentó de nuevo en el retrete mientras yo me ponía los pantalones, y salí… en los lavabos habían algunos hombres que habían llegado allí… me vieron salir y detrás de mi al tipo, uno de ellos dijo.
- Oye maricones!!
Mientras yo salía del lugar escuché cuando el tipo, lavándose las manos decía.
- No soy maricón, pero ese me ha hecho gozar mas que cualquier puta.
Caminé despacio por la calle y me compré un periódico, me senté en el banco para esperar el autobús y cubriéndome con el papel, metí las manos entre las piernas me la saqué de nuevo mojándome todos los pantalones.
delicioso mmmmmmmmmmmm