Soy solicitado hasta llamado por la Señora Gosset, qué me ofreció su jet privado para viajar y aterrizar en la ciudad de Los Ángeles en el estado de California; mientras estoy en vuelo tranquilamente hago retroceso retrospectivamente de mí memoria y recuerdos fotográficos tras revisarme hacia delante como hacia atrás inclusive al revés llegando siempre la rotunda conclusión resultante quedándome con la mente instantáneamente en blanco que no sé de donde me puede conocer hoy día la distinguida y famosa millonaria Señora Gosset.

Aterrizamos en una pista de una aeropuerto privado de inmediato me está esperando a la salida del mismo jet ejecutivo privado una flamante limosina lujosa que me sube inmediatamente al marcharse, investigo por mi parte de buenas fuentes informativas y fidedignas la historia y antecedentes de la misma señora Gosset, es una diseñadora y empresaria de modelaje internacional de ropa de marca finísima y alto calado para ejecutivas de todas las ramas, propiedades multimillonarias diseminadas por toda la Unión Americana, adicionalmente presidenta CEO de grandes manufactureras de textiles y fabricantes de ropa de mujer ejecutiva como de asociaciones filantrópicas y de beneficencia que fue pobre en sus humildes inicios en fin vaya me deja impresionado el don humanitario y voluntario que tiene la misma señora Gosset.

Entramos a Beverly Hills el área de la alta sociedad californiana con casonas y mansiones gigantescas en que aspiraría toda la eternidad para codearme además vivir en estas pero tendría que trabajar continuamente sin descansar para aspirar y tenerla como adquirirla pero los costos están fuera de mis posibilidades exorbitantemente astronómicas me quito el sombrero a estos americanos que tienen para botar por fuera de la misma casa en fin.

Llegamos y me bajo de la limosina al entrar a la casa de la señora Gosset en que me dirigen y conducen el mayordomo de alcurnia a la terraza del jardín central de la misma propiedad que me pide espere unos segundos que hará aparición la señora Gosset al ofrecerme una bebida refrescante ya que vengo sumamente caluroso hasta con esta harta sed en fin me siento que veo  y escucho bajar un ascensor en todo el jardín central de la propiedad saliendo una distinguida señora de cabello rojo castaño elegancia y con un atuendo de saco grande verde plomo de cuero que hace juego espectacularmente con una falda lápiz corta en verde plomo muy entallada, ajustada, ceñida, amoldada, esculpida, entre mucho más al perfil como a la silueta escultórica de la misma Señora Gosset.

En lentes oscuros camina hacia a mí vaya las vuelta que da la propia vida después que han pasado 30 años, eres el mismo que iba y entraba hasta pagaba por tener sexo y fantasías eróticas con una chica colombiana que le compraste su conjunto de ropa interior tanto sostén e hilo dental cachetero con líneas tanto negras como naranjas oscura que además le compraste una falda negra de oficina que tuve que hacerle ajustes al quedarme grande y que te conté que fui a una fiesta de cumpleaños de niño y todos los hombres presente andaban coqueteándome y tirándome los meros perros al ponerme una camisa de manga corta negra con diseños de flores estampadas y tejidas con unas sobria botas negras de punta de tacones altos.

Se quita los lestes oscuros al reconocerla eres Rachel. Vaya como pasaste a ser la señora Gosset, toma asiento al hablarme y platicarme mientras era chica colombiana en el prostíbulo donde ibas una noche andaba un señor californiano que estaba buscando momentos placenteros y tiene tiempo que no andaba con una mujer de mi calibre, bueno pago y le di placer sensacional como sexo oye follaba endemoniadamente que me dejaba boquiabierta inclusive entre nosotros sediento de mucho sexo que me desbarataba a la larga varias veces de ir y pagarme nos enamoramos y me pago mi salida de la vida del prostíbulo a cambio nos casamos y vinimos a vivir aquí a California y forjamos y levantamos este mundo que conoces y tienes referencias, lastimosamente falleció hace quince años después no volví a casarme me dedique en cuerpo y alma con mi esfuerzo a sacar a delante y aumentando el capital de los negocios conyugales hasta el son del día de hoy que nos reunimos y vemos hasta encontrarnos por fin te perdí el rastro.

Me pulió con refinamiento y me volvió prácticamente una mujer de la alta sociedad  californiana y distinguida como mayormente educada más de lo que era hace 30 años atrás, al conservarme idéntica pero cambiada en aspecto y personalidad externa, quiero que dirijas y seas mi mano derecha en la parte de tecnología y servicio como atención al cliente al ser ingeniero informático igualmente en el mercadeo y ventas con especialidad en administración de empresas en mercadeo con una buena posición a salarial como ubicado en cualquier propiedad que deseas para vivir aquí en California y un vehículo propio de tu categoría de cualquiera marca que elijas y trabajes lo que tú quieras hasta donde quieras entender cuando quieras dejarlo en ti confió que te parece para cerrarlo con broche de oro tu contrato vamos a mi habitación para estar juntos y solo para recordar cómo vivir los viejos tiempos que ere tu ejecutiva universitaria, sonríe tengo todavía aquella camisa y falda negra con las botas igualmente el sostén e hilo dental cachetero de líneas naranjas oscuras con negras para ponérmelas ante tus propios ojos y mucho más al besarme la señora Gosset que es nada menos que mi chica colombiana Rachel vaya y recontra vaya abrazados y pegados ambos vamos por el ascensor a su habitación y mucho más en fin.