Hola, soy Golosa, voy a relataros una de mis muchas maneras de satisfacer mis calenturas.

Anoche buscando en la red, encontré varios temas que me fueron calentando hasta tal punto, que intenté probar algo nuevo. Cogí un globo de esos largos, con los que se hace globoflexia y lo puse bien durito.

Cuando ya estaba preparada, busque a mi perra y me unté mi clítoris con mermelada y me abri de piernas para que lamiera, me gusta cuando me da esos lenguetazos, tanto tanto que a veces me corro antes de tiempo. Entonces me unté tambien mi culo, para que siguiera y yo intente meterme el globo, lo doblé en dos para que fuese mas ancho y con mucho cuidado lo introduje.

No llegue al orgasmo, pero me produjo placer ademas de probar algo nuevo. Necesitaba algo más duro, como un calabacín bien grande que tenia en la nevera. Lo calenté bajo el chorro de agua caliente. Volví a untar más mermelada en mi chocho y volví a poner a la perra.

Mientras iba pellizcando mis pezones y lamiendolos, de vez en cuando me untaba un poquito de mermelada en ellos para que mi perrilla me los pusiera mas duros. Ahhhh, me estoy poniendo otra vez caliente. Cuando ya estaba otra vez a punto introduje el calabacín y me senté en el sillón para que no se escapara y esperé unos segundos.

Lubriqué mi culo con aceite y metí una zanahoria bien gorda y me volví a sentar y la perra seguia lamiendo mis pezones. Empecé a mover las caderas, metiendo y sacando el calabacín con una mano y con la otra la zanahoria y cuando estaba a punto de explotar, llego mi marido, que cuando vio en el plan que estaba me ayudo diciendome no se como puedes tu sola con las manos, espera que te ayudo. Me sacó el calabacín y metió su polla, que ya la traia preparada. Que gozada, sentir su pollon bien caliente. Mientras el iba haciendo su trabajo, yo me afanaba para que la zanahoria no saliera del boquete.

La perrilla nos miraba como diciendo que la habiamos dejado fuera, ven bonita, ven, que la zanahoria ahora es para ti. Así que saqué la zanahoria de mi culo calentito y se la introduje. Me corrooooo, ahhhhhh, y mientras llegamos al climax la perra tambien. Cuando terminamos, ella se dedicó a limpiarnos y terminamos con una buena ducha.