Yessenia abriendo la puerta de su casa recibe a un amigo que la visita a ella, le pide un permiso y un segundo para arreglarse un poco para atenderlo; metida en el cuarto se pone unas portaligas con unas botas hasta el tobillo con la falda azul oscura y un suewter muy pegado y muy ceñido de mangas corta que no lleva para nada brasier puesto y se penia el cabello al dejarselo caer como siempre atras en las espaldas y en los hombros maquillandose bastante.

Le trae de la cocina algo de beber para refrescarse de la temperatura calurosa que hace en el ambiente.

Sentadita conversando de todo un poco, ella se recuesta un poco al levantar la pierna derecha posandola en unos de los brazos del sillón, al correrse ampliamente la falda azul oscura mostrandole una mercancía de cortesia al amigo que la visita a ella.

Con una sonrisa maqueavelica, engatuzadora, engañadora, provocativa, traviesa, endemoniada, picara, coqueta, ofrecida, atrevida, divertida, juguetona, aventuradisima, fascinante, excitante, deleitosa, lujuriosa, livinosa, placentera, seductora, en fin todas las cosas que se le viene a la misma mente a Yessenia; con la mano derecha se toca y acaricia en vivo y a todo color los contornos de la piel con las portaligas puesta que se va a las mismas inglés hasta quedar tomando su micha que se la soba con locura y con una sensualidad nucna presenciada ni siquiera exhibida a la luz pública ni siquiera con su tierno y caro amante que tiene a la fecha Yessenia.

Mirandolo con unos ojos fijos, desconcertante, mudos, sorprendidos, incredulos, increíbles y desorbitantes por el amigo que la visita a ella; sudoroso notablemente de la frente bajando por todo el cuello, ocultandose por la ropa traspirando por los mismos poros de los antebrazos imaginandose que sucumbe ante todo esto monumental trofeo. Entrandole con una suma desesperación y desquiciamiento provocante por la forma en que esta vestida Yessenia, la toma a la fuerza al acostarla y bajarse el zipper del panatalon al sacarse el pené totalmente duro, erepto, eyaculante, gigantesco, caliente, parado como nunca lo habia visto hasta presenciado finalmente firme al cogersela dandole unas masturbadas que tanto merece por castigarla por la falta de respeto al pudor, a la honra, la decencia como a la dignidad del amigo que la visita a ella; al venirse gloriosa y atesorada como mayorista por doquier de hay le sube el suewter a Yessenia para quedarse agarradito con la mano izquierda del seno izquierdo de Yessenia para lamerle y besarle hasta comerse superficial como suavemente del pezón divino, bello y más parado que nunca y que decir rojo que esta por la erepción que es evidente en el cuerpo de Yessenia desbordante de puro sexo que le ha entregada recientemente el amigo que la visita a ella.

Sentados fumando unos cigarrillo recostada su cabeza en el hombro del amigo que la visita a ella, con una cara de cansado pero satisfecho y reafirmante en su hombria cabrona y machista con una verga cabrona muy buenisima el amigo que la visita a ella.