Era un martes por la tarde y ahí estaba yo con mi pololo, me miró directamente a los ojos me tomó por la cintura y me dio un beso muy candente, ese día cumpliamos dos semanas de pololeo y yo le tenía un regalo que nunca iba a olvidar. Al principio estaba un poco indecisa sobre si se lo daba o no, pero luego de ese beso tome mi decisión; lo tome de la mano y lo llevé a un lugar del colegio en donde nadie podría vernos además, era tarde y casi no habían personas en ese lugar.
Lo empecé a besar de la forma más sensual que podía y luego le dije que era solamente de él y que hiciera lo que quisiera conmigo. El me quedó mirando con una mirada muy sensual que a mi me produjo un leve escalofrío por la espalda.
Empezó a besarme el cuello logrando que me exitara al máximo puesto a que ese era mi punto g, luego empezó a bajarme el cierre del polerón que traía puesto y me desabrochó la camisa quedando mis pechos cubiertos po ese pequeño sostén, mis pechos eran pequeños pero muy exitantes; luego me desabroché el sostén y él me los empezó a besar y a chupar, estaba tan exitada que le bajé el cierre del pantalón y me encontré con su miembro totalmente erecto, se veía gigante y lo empezé a masturbar a su vez él igual a mi y luego yo le pedí que tuvieramos sexo, en ese mismo instante en el que me penetró tuve un increíble orgasmo y le pedí que no parara, estuvimos como 15 minutos hasta que cai agotada en sus brazos.
El todavía quería más así que me agaché y empecé a besar su enorme pene estuve como 5 minutos y eyaculó a mi al principio me dió asco tragarme esa sustancia pero luego la empecé a succionar hasta que no quedara nada, al instante me cogió de nuevo y esta vez tuve un segundo orgasmo mejor que el primero tras 20 minutos de sexo cai dormida en sus brazos y desperte una hora despues sola en la cama de mi casa. No sé como pasó pero luego de ese día nos empezamos a distanciar hasta que un día me conecté al messenger y ahí estaba él, habíamos terminado 3 días despues de esa maravillosa tarde; empezamos a hablar hasta que decidimos juntarnos de nuevo...
Ese día fue un día que no olvidaré facilmente porque sentí que tenía un amigo muy especial.