En el automovil de la directora de mercadeo y publicidad de las clínicas odontologícas junto con el compañero de registro, van a un lugar estacionandose. Le pregunta algo seria que hacemos aquí, le pregunta al compañero de registro; la mira algo apasionado y le dice que dige una pequeña mentira para que estuvieramos solos es que no puede callar más tengo que ocnfesarte que siento algo por tí más que compañerismo, le pone la mano en su cachete la directora de mercadeo y publicidad de las clínicas odontologícas me lo imaginaba por las formas en que te comportas y actuas conmigo cuando nos topamos.
Vestida con faldas ajustadas azul oscura con medias se deja mostrar ciertas atributos por parte del compañero de registro, como una caricia en su piernas subiendo por su vientre al desabotonarle la blusa al bajarle el brazier al besarselo con toda la dulzura y libremente al mamarselos muy cariñosamente los bombones y bellos como extraordinarios.
De ahí, no termina al subirle la falda a la altura de la cintura al bajarle las medias con el panti al conocerle y explorarle con sus caricias y tocadas la zona prohibida de su vagina al meterle como sacarle el dedo indice continuamente al tenerla completamente excitada, apasionada, desbordante de pasión como locura, caliente, gimiendo por tantas delicias que le recibe por las manos del compañero de registro a solas en el automovil estacionado en un lugar planeado como una pequeña mentira creida.
Desde ese día, la directora de mercadeo y publicidad de las clínicas odontologícas se relaciona y comparte un afecto nunca sentido como descubierto por el compañero de registro que es un amor de hombre que se convierte en su gran amigo y amante en todos los sentidos de la misma palabra.