Querido Diario:
Te acordás que te conté que quería ir al cine, a ver esa película romántica, y que nadie me quería acompañar??? Bueno, fui a verla, pero lo menos que hice fue prestarle atención a la pantalla…
Resulta que en ese cine no había demasiada gente, y como no me gusta ir sola, me senté por el fondo. De pronto, llegó un hombre (alto, fornido, canchero) y me preguntó si había alguien en el asiento de al lado mío. Cuando le dije que no, me sonrió, pidió permiso y se sentó a mi lado.
No te imaginás el perfume que tenía ese hombre!!! Ni bien se sentó, volvió a sonreir y entablamos una charla típica de dos desconocidos, hasta el momento de empezar la película.
Cuando las luces se apagaron, la historia fue otra, disimuladamente, comenzó a acercarse más a mí, y con su pierna rozó la mía, haciéndome sonrojar. De pronto, y sin decir nada más, puso su mano en mi rodilla; yo entré en pánico!!! Pero en vez de sacarlo o decir algo, puse mi saco para que nadie vea lo que estábamos haciendo. El me miró y volvió a sonreír, y comenzó a subir su mano por mi pierna mientras me miraba de reojo.
Después de ver que me estaba gustando más de lo debido lo que estaba haciendo, se acercó más a mí, y con su otra mano, se desabrochó el pantalón. Me volvió a mirar a los ojos y tomó mi mano para que acariciara su miembro…
Mi Dios!!! En ese momento no podía creer lo que estaba haciendo, estaba tocando a un desconocido, y lo peor es que, me gustaba hacerlo!!! No te imaginás lo que era eso!!! Comencé a acariciarlo y vi como cambiaba su cara mientras lo hacía, ya que al parecer, a él también le gustaba…
Cuando creí que yo había tomado la situación en mis manos, me volvió a descolocar, ya que subió la mano que estaba en mi entrepierna, y comenzó a rozar el borde de mi ropa interior. Al darse cuenta que eso me inquietó, sonrió y fue por más, y de a poco comenzó a meter sus dedos dentro de mi ropa interior, rozándome muy despacio, con delicadeza, mientras mi respiración comenzaba a agitarse más y más a cada momento.
Lo que hubiera dado por eternizar ese momento!!! Mientras él rozaba mis partes más íntimas, yo metí mi mano dentro de su ropa interior, y sentí como su miembro latía y crecía dentro de mi mano, a medida que los movimientos de nuestras manos comenzaban a ser más rápidos, y con pasión.
En ese momento, siento un ruido detrás de nosotros, al parecer, no estábamos tan solos ni apartados como creíamos, ya que había un hombre que se estaba masturbando mientras nos veía.
Cuando nos dimos cuenta de eso, ninguno de los dos pudimos acallar un gemido de placer, y dejamos todos los cuidados de lado. De pronto, mientras que con una mano recorría mi cuerpo debajo de la blusa, con los dedos de su otra mano comenzó a explorar el interior de mi vagina, volviéndome totalmente loca, logrando que tenga un orgasmo como hacía mucho que no tenía…
Al recuperar la respiración, me tomé la revancha: sin dejar de mirarlo a los ojos, para disfrutar de su propio placer, me arrodillé delante de él, y sin darle tiempo a que dijera nada, acerqué su miembro a mi boca. Primero lo recorrí en toda su extensión (a estas alturas, era mucho) con mi lengua, despacio, tratando de controlar la situación. Después, puse todo su miembro dentro de mi boca, y sentí que él también gemía y tenía palpitaciones, como las seguía teniendo yo.
Cuando parecía que ya no aguantaba más, me volvió a sorprender: Me levantó de golpe, me hizo sentar sobre él y, sin previo aviso, me penetró sin más cuidados de que nos vieran o nos escucharan.
Me tomó de las caderas, y comenzó a hacerme subir y bajar, llegando cada vez más dentro mío, y sintiéndolo cada vez más a punto de explotar…
Y sí, lo que tenía que pasar, pasó. Nuestros movimientos comenzaron a ser cada vez más rápidos, y teníamos que contener nuestros gemidos para que nadie se diera cuenta, hasta que por fin, llegamos los dos al clímax y de a poco, pudimos volver a respirar con normalidad.
Cuando volvió la normalidad, la película estaba terminando, y ninguno de los dos se preocupó por saber siquiera de que se trataba…
Terminó la película, y no sabía que tenía que hacer en ese momento. Al levantarse, me levantó de la mano, y mientras me besaba, dejaba una tarjeta en mi mano.
Ahora tengo su tarjeta, y no sé si llamarlo o no, quizás, sólo tenga que volver a un cine perdido, con poca gente, a ver una película romántica…
La película? No tengo idea de que se trataba, quizás, tenga que volver a verla…
esto que es una fantacia que te gustaria realisar? o algo k has echo de verda? xk si es asi dejame decirte amiga que: "ESTAS ECHA TODA UNA GUARRITA"