UNA AMIGA MUY FIEL.

Cuando el muchacho llegó a casa con su amigo, la madre de éste, una mujer madura pero muy conservada y de esbelta figura salió a recibirlos, inmediatamente entre el joven y la madura señora surgió cierta atracción; después de ese día el joven no dejó de frecuentar a la familia y entre ellos se creó un vínculo de amistad muy estrecho como para contarse sus intimidades. Así se enteró ella de que el joven era tan tímido que nunca había tenido un encuentro sexual con nadie, la mujer se las arregló para tener un encuentro con su joven amigo sin advertirle nada y ayudarlo así a superar su timidez.
En un viaje de varios días su hijo se ausentó de casa, la mujer citó al joven con cualquier pretexto y cuando se encontraron comenzó sus avances sabiendo lo que su cercanía inspiraba al mozuelo. Lo recibió con un transparente modelito de casa que dejaba traslucir su espigada figura. El muchacho al verla comenzó a sudar pero ella se acercó a él y empezó a besarlo mientras por encima del pantalón acariciaba su pene, ella lo fue desnudando lentamente y al llegar a sus pantalones noto que el joven estaba muy bien proporcionado, tomo el miembro entre ambas manos sobándolo entre ellas con destreza, luego corriendo la piel lo masturbo por unos segundos llevándolo luego a su boca, succionando profundo; estaba logrando que el muchacho se desinhibiera, él acariciaba los cabellos de la mujer mientras sus caderas comenzaban a balancearse por el placer. La mujer continuaba succionando el pene que introducía completamente en su boca para luego deslizarlo hacia atrás con la misma parcimonia. El pene estaba muy duro y grande y ya su dueño comenzaba a tomar iniciativas, levantando a la mujer la despojó de su ropa arrastrándola al interior de la habitación donde había un cama amplia, pero antes de llegar allí el muchacho la recostó de la pared y comenzó a besar y lamer los pezones arrastrando su rostro por la piel de la mujer fue bajando lentamente besando y lamiendo, al llegar a la vulva abrió sus piernas y sumergió su cara en ella. La lengua del muchacho recorrió el clítoris internándose en el hoyo vaginal lamiendo con avidez, ella sollozaba y gemía de placer, el joven se puso de pie y la volteo de cara a la pared para tomarla por las caderas, seguidamente comenzó a penetrar la vagina saliendo y entrando de ella con ímpetu, ambos gemían de goce. La mujer comenzó a sentir sensación de desmayo dejando caer la parte superior del cuerpo, el muchacho la guió a la cama donde ella dejó reposar su dorso mientras el continuaba con la penetración, allí la mujer quedo completamente expuesta el joven se trepó encima de ella cabalgándola fuertemente, momentos después ambos estaban frente a frente el volvió a penetrarla con la misma fuerza, sus cuerpos se movían a un mismo ritmo logrando entre gemidos alcanzar el orgasmo a la vez.
Al terminar, la mujer estaba decepcionada
_oye, ¿tú y que nunca habías hecho el sexo?- preguntó
-no, es verdad, pero lo imaginé tanto contigo que ya me parecía que lo habíamos hecho antes.