Había quedado con Amparo, mi ex-cuñada y con la que tengo muy buena relación, cada vez que podemos nos juntamos un grupo de amigas entre las que se incluye ella y quedamos para salir, en esta ocasión, quedamos el grupo de amigas para cenar, al terminar de cenar, le dije a Amparo que se viniera a mi casa, así que se vino. Para la cena todas íbamos bastante bien vestidas, Amparo llevaba una falda negra con una camiseta de tirantes a juego mientras que yo llevaba un vestido rojo de tirantes bastante llamativo y unos leguins negros con la zona del coño al descubierto, así que no me puse bragas debajo ni nada. Nada mas llegar a casa, Amparo se quitó los tacones y fue hasta el dormitorio descalza, al llegar al dormitorio, Amparo se quitó toda la ropa quedándose desnuda ante mí, mientras que yo observaba como se quitaba la ropa, una vez que se quedó desnuda se sentó en la cama diciéndome que me durmiese con ella así que me metí en la cama y me arropé con el edredón. Un par de horas mas tarde, me desperté y me destapé viendo a Amparo desnuda a mí lado, me empecé a poner cachonda así que me chupé los dedos y me los pasé por el coño, sacándome las tetas del vestido cada vez estaba más cachonda mientras me pasaba la mano por las tetas cuando de repente Amparo abrió los ojos lentamente quedándose completamente desconcertada por lo que estaba viendo, al verla me sorprendí y enseguida me bajé el vestido algo avergonzada por la situación y me incorporé apoyándome sobre el cabecero de la cama, ninguna de las dos podíamos dormir así que a Amparo me propuso que como estaba cachonda porque no nos complacíamos mutuamente, así que me incorporé para quitarme el vestido rojo, y acto seguido Amparo puso su pierna derecha sobre mi pierna izquierda y se metió los dedos en la boca para mojárselos y pasármelos por el coño mientras yo acercaba su mano para tocarle su rasurado clítoris, poco a poco la excitación subía, mientras Amparo me susurraba que se estaba poniendo cada vez más cachonda, echándonos las dos a reír, empecé a acariciarle la teta izquierda mientras que Amparo se salivaba los dedos para pasármelos por el coño, enseguida, puse mi pierna derecha sobre la suya poniéndome pegadita a ella para besarle, tras besarla, le di unos lengüetazos a su clítoris y empecé a darle besos desde la tripa subiendo por las tetas hasta volver a fundirnos en un beso, continué besándola por el cuello, excitándola aún mas y a continuación volví a degustar de nuevo sus deliciosos pezones mientras que Amparo suspiraba del placer que le estaba dando, lentamente fui desplazándome hacia abajo para degustar el clítoris de mi ex cuñada, empecé chupando lentamente, Amparo suspiraba y entre jadeos me decía "hmm, me encanta mi amor" acariciándome el pelo, le metí un dedo por el coño mientras se lo chupaba hasta que poco después, me lo metí en la boca mientras me tumbaba, Amparo se puso encima, y me empezó a lamer los pezones, enseguida empecé a gemir, estaba bastante cachonda mientras me chupaba por encima de las tetas hasta llegar a los labios para besarme, poco después, Amparo me cabalgó poniendo el clítoris sobre mi boca para que le hiciera una mamada, empecé a darle pequeñas lamidas deleitándome con rasurado coño de mi cuñada mientras ella gemía de placer. Unos minutos mas tarde, Amparo se apartó poniéndose encima, regalándome uno de sus dulces besos cogiéndole las tetas y apretándoselas ligeramente como si de una esponja se tratara para después relamer sus pezones. A continuación, Amparo quería que levantase las piernas dejándolas abiertas y las sujetara con las manos mientras me hacía una mamada vaginal, no podía parar de gemir, los dedos de los pies se me enroscaban y no hacía mas que tocarme los pezones mientras decía entre fuertes gemidos "ajjj mi amor, no pares..." "sigue así" abrí los labios vaginales para que Amparo me metiera la lengua aún más como yo le hago, le pedí que me lamiese el ano ya que nunca antes me lo habían hecho y quería saber que se sentía, así que Amparo accedió y me dijo "claro mi amor" empezó a darme pequeños lametones, y no tardé en soltar algún que otro gemido mientras me tocaba el coño, Amparo no dejaba de lamerme el ano y eso hacía que gimiera cada vez mas fuerte y sin parar mientras me metía los dedos en el coño mientras lo hacía me salivó el coño y prosiguió lamiéndome el ano. Poco después, al ver que no dejaba de hacerme siguió lamiéndome el coño un poquito mas hasta que le dije con una sonrisa lo mucho que la quería, me incorporé de nuevo y nos dimos un beso apasionado, sentada con las piernas medio estiradas en la cama, le empecé a tocar las tetas a Amparo hasta que se puso de rodillas en la cama, para comerle las tetas, pasado un rato, me puse de rodillas en la cama y le cogí de las piernas a Amparo tirando de ella hacia mí, me puse encima de ella apoyada sobre la pierna izquierda espatarrada en la cama, deleitándome con una placentera mamada vaginal mientras le lamía el coño lentamente, hasta que me empezó a frotar el chocho haciendo que gimiera muy fuerte con las manos puestas sobre el culo de Amparo. Finalmente nos dimos un beso muy apasionado y la esperanza de seguir.