Un restaurante cálido
Una música envolvente
Una vela chispeando sobre la mesa vestida de un mantel rojo, servieta verde sobre un plato azul turquesa
Una copa llena de vino
Un pitillo cuyo humo me envuelve
Y recorro con la vista este lugar que tanto añoraba.....Aie Barcelona, dos días tu yo yo solos
Mis ojos se paran en los tuyos
Y ahí se quedan, ni tan siquiera se sorprenden
Como si tus ojos fueran el nido de los míos, al que deseaba volver
Tu mirada de un azul tan intenso como mi plato
Tan cálida como la luz de la vela que se reflejaba en tu cara
Tu mirada se pasea por la mía, lentamente, esbozando una sonrisa llena de misterioso sentir
Miro tu pelo rubio y al llegar a tu linda boca noto como se va asomando el deseo en los dos
Sonreímos, levantas tu copa haciendo un gesto hacia mí
Alcanzo la mía y te devuelvo el brindis, bebiendo ese dulce veneno que augmenta el deseo y el sentir
Me examinas poquito a poquito
Paseas la mirada por mi cara
Parándote en el lobulo del que cuelga un largo pendiente de bolitas de cristal
Del tono de ese vino que bebemos los dos
Noto el roce de tus ojos por mi cuello, bajando por mis hombros, acercándose a mi pecho
Deteniéndose un instante ahí, para luego volver a tenerte clavado en mis ojos
Viendo tu deseo ya a flor de piel
Sonrío de nuevo y recorro tu cara tan despacito como lo hiciste tú, tus hombros, tus manos
Que ya deseo sobre mi piel
Y tú lo sientes, lo sabes y miras las mías que sientes ya sobre tí
Nuestros ojos se vuelven a mirar, haciéndose el amor
Lentamente nos envuelve una magia sensual
El deseo se escapa, recorre mi entrepierna, la humedece
Y por primera vez, la sorpresa se asoma por el balcón de mis ojos
Tú la atrapas y soríes otra vez .... lo sabes
Te traen un plato y le dices algo a la camarera mientras apartas la servieta
Coges tu copa, te levantas y lentamente vienes hacia mí
Tus ojos en los míos.... el deseo en los dos
Sin tomar asiento, brindamos de nuevo y te sientas en frente de mí
No hay nada que decir
No queremos romper un silencio que no nos incomoda, si no que agranda el deseo de este misterioso sentir
Alargas una mano y rozas mi pendiente, haciéndolo bailar, sonríendo de nuevo
Cuando acerco mi mano a la tuya y la guio a mi boca dejando un suave beso
Pensando por 1ª vez "Esto no puede ser", se asoma a tus ojos un brillo de grata sorpresa
Separamos nuestras manos cuando nos traen los platos, verduras los dos
Sonreímos de nuevo por la coincidencia y entonces oigo tu voz
"¡ Vaya, que noche tan especial!"
Voz cálida que se adentra en mí
Cenamos sin prisas hablando riéndo, disfrutando contandonos nuestras vidas
Tus ojos en los míos.... el deseo en los dos
no puedo frenar el deseo de rozar con mi pie tu pierna despacito, de abajo a arriba
Subiendo lentamente, evitando tu sexo que sé desea que llegue ese roce al fin
Me paro en la entrepierna apoyando el ié en la silla mientras me acercas una gamba con tus dedos
Hasta mi boca, que abro cerrando los ojos, saboreándola mientras mi pié alcanza tu pene erecto
Y culmina el sabor de mi paladar........ el sabor de tu erección
Abro los ojos para encontrarte extasiado, sonriente, feliz
Y sigo paseándome por tu ingle, tu muslo, tu rodilla hasta sentir tu mano en mi tobillo
Caricia que sube que baja que me derrite por dentro y aflora en mi sexo que ya me procura tanto sentir
Y llegamos al postre cuando nos ofrecen la carta
Los dos la dejamos sobre la mes
Tus ojos en los míos.... el deseo en los dos
¿Postre? te pregunto
"Si..... tu sexo de postre me atrevo a pedir" susurra sensualmente
"Mmmmmmm, atrevéte a pedir"
Llegamos a su casa paseando por calles estrechas, antiguas, mágicas
Tu brazo en mi hombro, el mío en tu cintura
Parandonos de vez en cuando adictos nuestros ojos por encontrarse de nuevo
Y nuestras bocas amarse otra vez
Con besos que hablan del reino que nos espera, envueltos en sensual deseo, avisando lo que vamos a vivir
Tu casa cálida, relajane, sencilla
Encendiste unas velas y pensé "parece la mía, tan llena de paz"
Tomamos una copa escuchando música
Desnudando nuestros cuerpos lentamente
Sintiéndo mi pecho erguirse al paso de tus dedos desabrochando un botón
Tus besos en mi cuello, tu voz en mi oído
"Te deseo tanto que quiero disfrutar despacito, muy despacito de tí"
Tus ojos en los míos.... el deseo en los dos
Y tu boca sigue las huellas de tus manos en mis hombros entre mis pechos
Mis manos recorren tu espalda, tus caderas buscándo liberarte de tu pantalón
Sintiéndo como sacas de su prisión mis pechos, los atrapas con tu boca, tu lengua acaricia mi pezón
Mis manos se hunden en tu entrepierna
Y alcanzan tu sexo, henchido, erecto, lleno de pasión
Tu boca va bajando, recorriendo mi vientre
tus manos levantando mi falda, subiendo entre mis muslos y alcanzar mi sexo empapado pr tanto deseo de tí... Y cuando tus dedos lo alcanzan, tus ojos en los ´míos, se lenan de admiración
Tu boca atraída pro este manjar
Sigue el mapa de mi cuerpo hasta llegar tu lengua que me recorre
Los dedos se adentran, mis muslos se abren, mis manos en tu pelo
Y empieza la lujuriosa pasión
Y cuando siento que en mi vientre acude ya el orgasmo
Muevo tu cabeza para que me mires, y te digo "Ven"
Y mirándome a los ojos lleno de deseo y con una sonrisa pícara, me dices
"Todavía no, deseo emborracharme de tu sexo........ mi postre"
Y atrapas de nuevo mi sexo, mi clitoris revienta entre tu boca y ya no puedo resistirme más
Me abandono a tu lengua, a tu sentir y me arrancas un orgasmo largo, lento, violento, intenso, arrollador
Mi cuerpo arqueado ofreciendóte ese río que te morías por beber
Y en pleno extásis, siento tu cuerpo contra el mío
Tu sexo entrando en ese volcán cuya lava lo recibe, lo envuelve, lo empapa, lo aprieta, lo suelta
Lo hace enlo quecer
Y llega tu orgasmo, mi orgasmo también
Tus ojos en los miós.... el deseo en los dos
Siguieron caricias, besos, palabras, risas, copas, música, mucho sentir cada gozo que vino después
Te dormiste entrada la mañana
Y yo me fuí.... me esperaba mi tren
Te dejé en la almohada una nota con mi telefóno, que decía así
"Nunca tomes el postre sin mí"
Aie... Divina Barcelona, nunca dejarás de sorprenderme y hacerme vibrar
Subí al tren, cerré los ojos y ví
Tus ojos en los míos.... el deseo en los dos
ARACNE
Añadiéndole una "a" arácnea resultó; ¿será un ácaros o una araña? Lo que es..., no lo ocultó. (El sexo... de postre", de Aracne)