No puedo evitarlo, me encanta la verga, me vuelve loca y mas cuando es una nueva, me llamo Ximena y soy casada, tengo 24 años y aunque trate con todas mis fuerzas de ser fiel y no arriesgar mi matrimonio, no he podido. Antes de casarme fui muy noviera, comencé a tener relaciones a los 14 y no recuerdo un solo día desde entonces que no tuviera un novio, claro que no todos los días podía coger pero siempre tenia con quien y cuando se podía lo hacia porque siempre tengo ganas, a veces tuve dos novios al mismo tiempo sin que supieran y la verdad una que otra vez me fui con algún chico guapo sin conocerlo, pero nada mas, el caso es que me enamore de Rafa mi marido y poco a poco deje de salir con otros para ser fiel a Rafa, pasamos 2 años de novios y solo los primeros meses le fui infiel, después aunque algún chico me gustara mucho evite ser infiel, casi a los dos años de novios nos casamos porque salí embarazada pero también porque nos amamos pero mis deseos de volver a disfrutar de los besos, los brazos y la verga de otro hombre cada vez fueron mayores y creo que el hecho de que comencé a entrar a paginas porno a escondidas de mi esposo cuando estaba en su trabajo me hicieron entrar en una desesperación insoportable por volver a sentir el placer con otro hombre, tanto que tenia que masturbarme (algo que nunca había hecho) para calmarme un poco, pero no era suficiente. En los departamentos donde vivimos hay muchos chavos y señores que me gustan, pero no podría atreverme a algo con ellos porque no quisiera arriesgar mi matrimonio con Rafa solo para bajarme la calentura, pero un día encontré un vídeo donde una pareja entra aun cine porno y la señora les chupa la verga a unos desconocidos, para terminar cogiendo con todos frente a su marido, esas escenas completamente amateur me excitaron mucho mas que cualquier otro tipo de imágenes que hubiera visto, se me comenzó a meter la idea de que si podía encontrar un lugar así, podría tener sexo con algún desconocido sin miedo a que alguien se enterara o que después me estuviera acosando, pensé que seria una forma de sentir un poco de placer sin comprometer mi relación, comencé a buscar información sobre cines porno en mi ciudad y encontré dos cines donde según decían acudían hombres y parejas a buscar sexo casual pero también muchos gay y no es que tenga algo contra los gays pero pensé que el ambiente tal vez no seria tan seguro si iba sola, incluso investigue la dirección y pase algunas veces por afuera de esos dos cines, los dos eran salas muy viejas y no se miraban nada higiénicos, así que no me anime a entrar en ninguna de esas ocasiones, pero la idea no se iba de mi cabeza, al contrario, la calentura acumulada que traía me hacia imaginar que entraba a uno de esos cines y que se me acercaba un hombre algo maduro pero atractivo y que sin decirme nada me comenzaba a besar y a fajar tan rico que no podía resistirme y terminaba cogiendo con el, después el solo se levantaba sin decir nada y se iba mientras yo me acomodaba la ropa para salir de allí, al menos eso era lo que imaginaba y lo que me hacia masturbarme hasta el orgasmo, pero no me atrevía a hacerlo realidad.

Pero un fin de semana de Agosto del 2018 mi marido tuvo que salir de viaje a Monterrey por su trabajo y mis papas se quisieron llevar a mi hijo a visitar a unos de mis tíos, así que todo el fin de semana era para mi y no pretendía desaprovecharlo, me hice a la idea de ir a pesar de mis miedos a alguno de los dos cines porno de la ciudad y busque alguna ropa que facilitara coger pero que a la vez no llamara mucho la atención por lo menos al entrar pues si tenia mucho miedo de que algún conocido me viera, me probé vestidos, pans deportivos y me decidí por una minifalda de mezclilla, unos tenis y una sudadera con gorro, era viernes, eche a mi bolso un par de condones que tenían años en la casa (después me di cuenta que estaban caducados) y llegue a uno de esos cines como a las 6 de la tarde, estaba muy nerviosa pero decidida, espere a no ver gente pasando por la calle, me puse el gorro y me pare en la taquilla, la señora que da las entradas se me quedo mirando cuando le pedí el boleto, me pregunto si iba sola y le dije que si, me pidió mi credencial del INE, ella me dijo que por mi seguridad no podían darme la entrada, me pregunto si ya había entrado alguna vez y le dije que no, ella me pregunto si sabia que pasaba adentro y le dije que si, me estaba poniendo mas nerviosa de lo que ya iba y estaba tardando en darme el boleto y estaba a la vista de cualquiera que pasara por la calle, incluso sentía que las dos o tres personas que pasaban por la calle me volteaban a ver y estaba a punto de darme la vuelta he irme cuando la señora me dijo "te voy a dar entrada para la zona de parejas, no te acerques a nadie a menos que ellos te lo pidan y si tienes algún problema, hay una persona que pasa con una lampara cada 10 minutos, a el le puedes decir cualquier cosa", le di las gracias y tome el boleto, llegue a la entrada y un señor ya mayor lo recibió y me indico por donde subir a mi zona, camine por el pasillo y mire a algunos hombres que para nada se parecían a lo que había imaginado, sentí un poco de decepción sobre todo porque la mayoría se miraban muy maduros y un par de jovencitos estaban a los besos con otros hombres, no quiero ofender a nadie pero todos tenían pinta de malandrines, los mas decentes parecían albañiles u obreros, también vi algunas mujeres que imagine eran prostitutas, unas solas y otras hablando con lo que imagine eran clientes, camine hasta la sección que me dijeron y solo estaba 1 pareja fajando entre ellos, me senté algo retirada de su lugar, me sentía incomoda y decepcionada, trate de mirar la película que proyectaban aunque era de lo mas simple, sin una historia, solo era porno gringo del mas común, pero unos minutos después me resigne a que aunque no pasara nada al menos podía masturbarme sin pena pues al parecer todos lo hacían. Poco mas tarde cuando mi vista estaba mas acostumbrada a la oscuridad pude notar en otra zona del cine a hombres que se masturbaban unos a los otros, algunos se hacían sexo oral y se escuchaban gemidos que no eran parte de la película y la verdad si me comencé a excitar pero entonces mas que masturbarme con la película me estaba masturbando mirando lo que pasaba en las butacas, estaba tan metida en mi, que no sentí cuando la señora de la pareja que estaba allí se me acerco y me pregunto "que onda mija, nos acompañas a mi amigo y a mi?" la verdad me asusto sentirla al lado mio, creo que deje de masturbarme de golpe o hasta salte, ya no recuerdo, pero le dije que no muchas gracias y sin decir nada se levanto y se regreso con su "amigo", era una señora gorda como de unos 50 años, se veía algo vulgar, imagine que era una de las prostis que había visto al entrar, estuve tentada a irme, pero salí al baño para calmarme y pensar que hacer, decidí quedarme un rato mas para solo ver y cuando regresaba a mi lugar un hombre nada agradable me intercepto, su aspecto era como de unos 40 años o poco mas, de bigote, vestido bastante mal pero educado al hablarme, me dijo "disculpe que la moleste señorita, la vi desde que entro, yo se que no busca a alguien como yo, pero si no le pregunto no me quito la duda verdad, ¿puedo acompañarla a ver la película? sin compromiso de nada, solo hacernos compañía", sentí que no era alguien de peligro, hasta algo de ternura me dio el señor, le dije que si pero nada mas a ver la película, el me acompaño a mi lugar y se sentó a mi lado, ninguno de los dos decía nada, hasta que me pregunto en voz baja si era la primera vez que iba, le dije que si, el me dijo que seguido iba a ese cine pero que nunca había visto a una chica tan guapa y joven ir sola, yo no le respondí nada, pasaron un par de minutos, yo aunque no lo volteaba a ver, sentía que se estaba masturbando a mi lado, no sabia si se había sacado la verga o solo lo hacia sobre el pantalon, pero sentía sus movimientos con el brazo, entonces el de nuevo en voz baja me pregunto si no me molestaba que se masturbara y yo le rescindir que no pasaba nada, entonces me di cuenta que ahora si se estaba sacando la verga y se comenzó a masturbar con todo descaro, al principio no quise mirar, pero después de un rato voltee a ver su verga lo mas discretamente, no la tenia nada mal, era una verga gorda y cabezona, aunque no tan larga, pero ver su verga me hizo excitarme, no puedo explicarlo, el tipo no me gustaba para nada, pero sentir como se masturbaba junto a mi me hizo mojarme y comencé a frotarme la panocha pero discretamente, supongo que el se dio cuenta pero permaneció sin internar tocarme y eso me agrado aunque tal vez no me hubiera resistido, pero entre mas minutos pasaban mas me sentía caliente hasta que me arme de valor y con una de mis manos me anime a tocar su verga, el quito su mano y entonces yo seguí con el trabajo de masturbarlo, ninguno decía nada pero seguro que los dos lo estábamos disfrutando, poco después yo tome una de sus manos y la puse sobre mi panocha para que me masturbara, mi falda ya la tenia hasta la cintura y estaba con las piernas tan abiertas como me permitía los descansa brazos de la butacas pero aun estaba sentada, el lo único que dijo fue "que rico, la tienes bien mojadita" y me frotaba suavemente al mismo tiempo que yo seguía sintiendo su verga en mi mano, la verdad a esas alturas yo estaba bien caliente, mas de lo que había estado en mi vida, era una experiencia que no sabia si volvería a tener, así que quería disfrutarla y llego el momento que necesite sentir mas, con mi mano libre tome de nuevo su mano para indicarle sin decir nada que quería que me metiera un poco sus dedos y así lo hizo, el entendió que ya me tenia bien caliente y cada vez me empujaba mas y mas sus dedos, no se cuantos me estaba metiendo pero sentía muy clarito como los movía dentro de mi y mi cuerpo respondía como si ese hombre fuera el hombre que mas había deseado en mi vida, la verdad no recuerdo si tenia los ojos cerrados o abiertos y simplemente trataba de no recordar su cara, pero llego el momento que casi me acosté en la butaca y subí mis piernas a los apoya brazos para abrirme mas y que el pudiera dedearme mas, creo que me deje llevar tanto que me perdí, no sabia nada de lo pasaba a mi alrededor, solo estaba disfrutando de esos dedos rasposos, ásperos entrando en mi, nada que ver con las manos suaves de mi esposo, no me di cuenta cuando deje de masturbarlo, pero el nunca hizo nada que yo no le pidiera, incluso el estuvo incado en el piso solo metiendo sus dedos en mi y no me intento chupar la pepa hasta que yo se lo pedí empujando su cabeza hacia mi, también le indique poniendo mi mano de nuevo sobre la suya que quería que empujara todavía mas duro sus dedos y el señor muy obediente lo hacia, yo en realidad quería sentir que su mano entraba por completo en mi panocha pero no cabía, yo alguna vez recibí fisting de uno de mis ex novios y recordaba que había sido muy rico y en esos momentos quería sentir algo así de intenso pero no se pudo porque su mano era demasiado grande, aun así estaba disfrutando muchísimo y así pasamos varios minutos, hasta que el señor me dijo "mija, ya me canse de las rodillas, ¿sera mucho pedir que me ayudes un poco?", me sentí un poco egoísta y desconsiderada, pobre señor lo tenia incado frente a mi solo dándome placer y el apenas y se la jalaba el sólito un poco mientras me chupaba y con una de sus manos me dedeaba, cuando el se sentó de nuevo en su lugar, yo se la jale un poco y después fui yo la que se puso de rodillas frente a el, me metí su verga en la boca y aunque al principio me dio un ligero sabor amargo que mi esposo no tenia, no deje de chuparsela mientras con una de mis manos me seguí frotando mi panocha, el señor nunca me empujo la cabeza como algunos hacen, no me hubiera molestado pero me agrado mucho que fuera tan respetuoso de mi, seguí chupando su verga y metiendo algunos de mis dedos en mi panocha, estaba bien cachonda, ya quería coger y sin decirle nada monte sobre el, ni de los condones me acorde, yo ya necesitaba sentir una verga entrando en mi y con una de mis manos la puse en mi panocha para que entrara, no costo trabajo por lo mojada que estaba aunque era muy incomodo hacerlo en la butaca, aun así sentí como se metió por completo en mi, sentía la pepa caliente y como pude me subí la sudadera y el bra para que me chupara las tetas, el lo hacia suavemente, fui yo la que le dijo "chupalas fuerte" y el lo hizo, me succionaba los pezones y eso al mismo tiempo que su verga entrando en mi me excito muchísimo, lo bese unas pocas veces pero cerrando los ojos, sus bigotes y su aliento no me gustaban pero estaba tan cachonda que no me importo, yo todavía no estaba ni cerca de un orgasmo cuando el me dijo "me voy a venir" al mismo tiempo intento quitarme, pero yo no quería parar y no lo deje, seguí moviéndome sobre el hasta que sentí que se le había hecho chiquita, fue hasta entonces que me quite de arriba de el justo sentí como sus mecos salían de mi panocha con un chorro que callo sobre su estomago, yo seguía caliente pero el ya no podía, me acomode en mi lugar y me seguí masturbando un poco para poder terminar, creo que el señor se acomodo la ropa mientras yo buscaba terminar y se espero a mi lado hasta que me vine, no dijimos nada por unos minutos, hasta que el se despidió dándome las gracias y sin mas se fue.

Francamente después de que alcance mi orgasmo, me sentí preocupada porque no usamos condón, también me dio un poco de pena pues había llegado otra pareja mas a la sala y ya no espere mas y me salí del cine. Cuando llegue a mi casa corrí a bañarme, me di cuenta que tenia marcas en las tetas por las chupadas de aquel hombre, pero no podía hacer nada mas que esconderlas de mi marido cuando regresara, me puse algo cómodo y me acosté en el sofá a mirar la TV, pero no estaba atenta, estaba recordando la cogida de ese ruco que me había hecho gozar tanto, yo sabia que no había sido precisamente ese hombre, mas bien fue mi calentura que necesita salir y el estuvo allí para ayudarme. No sentí culpa por mi marido, tampoco me preocupe demasiado por haber cogido sin condón, al menos no podía salir embarazada, pero esa noche ya no volví a necesitar masturbarme, aunque al día siguiente si que me volví a excitar recordando lo que había hecho y pensé en volver a ir, pero no me anime. Pasaron casi 2 meses para que me animara a ir a el otro cine, pero esa vez no fue tan agradable la experiencia, así que para la tercera regrese al primer lugar donde fui y busque al mismo señor sin encontrarlo, aun así, no me fue mal, conocí a otro hombre un poco mas agradable físicamente que el primero pero menos respetuoso y me volví visitante ocasional de ese cine, a veces me encontraba con aquel primer desconocido y sin dudarlo me iba a sentar con el y nunca supe su nombre, otras veces llegue a coger con dos y en una ocasión hasta con tres diferentes hombres en la misma visita, perdí el miedo y cada que a mi marido le tocaba viaje me las arreglaba para ir, saque de allí 3 amigos de los que no preguntan nada a los que en ocasiones aun veo (por separado) pero ya sin ir al cine, también aunque nunca he hecho un trió, me gusta la sensación de en un mismo día coger con dos o mas hombres, esa sensación de sentirte toda una puta es muy excitante, pero ya tengo la propuesta de uno de mis amantes para que invite a algunos de sus amigos a cogerme en grupo pero aun no se si se hará realidad, si lo deseo pero de decirlo estando calientes a que se haga hay mucho trecho. Con mi marido estoy bien, trato de ser muy discreta y el confía en mi, a veces quisiera que no fuera tan decente pero es lo que hay y así lo amo.