Todo en familia, me acosté con mi sobrino mientras los demás estaban en casa

La familia

Después de mi experiencia con mis compañeros de trabajo en el hotel, pasé una semana tranquila haciendo mis cosas normales de trabajo y de casa, estaba planeando que haríamos el fin de semana con mi esposo cuando llegó la invitación de familia a pasar el fin de semana en una casa de una prima en Cuernavaca... Y ahí iba a estar mi sobrino, aquel al que le mandé la foto por error y desde ese día me tenía acosada con numerosos mensajes por el celular, la verdad es que me gustaba la idea de tenerlo, pero me daba un poco de temor con mi prima que era solo unos años mayor que yo y habíamos crecido juntas, recuerdo que se casó muy joven y su hijo nació poco después, y hoy estaba considerando la posibilidad de cogérmelo!, normalmente le platico a mi esposo todas mis aventuras intimas, pero decidí dejar esta en secreto debido a que se trataba de alguien en la familia.

Llegamos el viernes por la tarde-noche a la casa de mi prima y rápidamente nos asignó una recamara, nos instalamos y decidí cambiarme porque era una noche algo calurosa,

Mi marido salió a reunirse con los demás hombres de la reunión y empezaron a tomar cervezas y a platicar animadamente en la sala de la casa, yo me puse un bikini blanco que me había regalado mi maridito que era súper diminuto, tanga de hilo dental minúscula cubriendo solo a medias mi velluda raja y bra extra pequeño que solo cubría mis pezones, blanco, de esos que al mojarse se vuelven transparentes, me puse una bata semitransparente, zapatillas y me dirigí a la alberca que estaba sola porque los demás estaban dentro de la casa, me preparé un mojito y me metí a la alberca.

Mmmm, delicioso!, de repente oí voces en la entrada y personas platicar en la estancia, me estaba terminando mi bebía para salir a ver quién había llegado cuando mi sobrino se paró en la puerta de la sala viendo hacía la alberca y al verme ahí en la alberca casi grita: tía Marielaaa!!

Sonriéndole le dije: hola pequeño, cómo estás? (media 1.78 m. Contra el 1.52 mío!) Saliendo de la alberca por los escalones de la misma y avanzando hacia el...

La vista que le ofrecí era de mi cuerpo prácticamente desnudo cubierto solamente por ese bikini que se transparentaba completamente dejando ver mi velluda raja y mis diminutos senos desnudos, camine sonriéndole, moviéndole las caderas cachondamente y dándole los brazos para recibirlo con un abrazo.

Me abrazo como si fuera la primea vez que nos veíamos y me dijo al oído: me tienes caliente desde que me mandaste esto: saco su celular rápidamente y me mostro la foto que le había enviado en aquella confusión de mi parte la noche con mis compañeros de trabajo, ahhhh... Esa foto! Dije riendo y poniéndome de nuevo frente a él para que me viera de nuevo... Y qué opinas? Volteando hacia la casa para asegurarme que no hubiera nadie más en la alberca le dije: quieres esto? Acariciándome el cuerpo con ambas manos mientras movía mis caderas hacia él.

Ufffff... De haber sabido que eras así tía desde cuando...

Shhhh!, lo callé poniéndole un dedo en sus labios, soy Mariela, lo de tía déjalo para cuando estemos con los demás ok?

Ok Mariela, estás riquísima!, que piernas tienes! Siempre me han gustado tanto! dijo sin poder contener y acariciándome un muslo mientras se acercaba a centímetros míos, iba a besarme cuando oímos la voz de mi prima llamándolo, rápidamente se separó de mí y yo regresé por mi bata para poder entrar con los demás a la estancia.

Mi familia siempre ha sido muy alegre, les encanta estas reuniones y todo lo que sea fiesta, solo que dudo alguien de ellos se imagine mi otra vida, siempre he pasado como “Marielita la platicona que le gusta cantar en las fiestas”, la música es parte de las fiestas así que me apuré a llegar a donde estaba el aparato de sonido antes de que alguien más me ganara y puse una colección de sade, me encanta esa música para bailar seduciendo y por lo visto nadie se fijó en que mi sobrino y yo que cruzábamos miradas en la sala después de que puse la música, “no ordinary love” empezó a sonar en el estéreo y no resistí la tentación de levantarme a bailar en mi lugar moviendo suavemente las caderas y subiendo los brazos, girando despacio dejando que se entreabriera mi batita sin dejar de mirar a mi sobrino que me veía sin parpadear...

Mi marido paso a mi lado y me dio una nalgadita diciéndome: andas romántica esta noche?

--jajajaja algo así le dije devolviéndole la sonrisa mientras veía las demás mujeres algunas ocupadas platicándose los chismes de la semana y otras poniendo la mesa, ahí supe que era mi oportunidad, le dije a Balam (mi sobrino), ven ayúdame a traer el vino de la cava!

Lo tomé de la mano y salimos rumbo a la cava que quedaba al final de las habitaciones.

Caminamos en silencio, cuando pasamos enfrente de mi recamara lo jalé adentro y riendo cerré la puerta mientras él me miraba entre sorprendido y excitado...

Me empecé a quitar la bata y acercándome a él le dije: no era esto lo que querías?

Me tomo entre sus brazos y me beso con lujuria, sonriéndole le dije: apúrate que no tenemos mucho tiempo!

Fuimos a la cama y me saqué el bikini quedando desnuda solo con las zapatillas, ayudándolo a quitarse los pantalones y la camisa pude apreciar ese cuerpo joven musculoso ya que practicaba futbol americano, no resistí la tentación y empecé a besarle el pecho mientras él se quitaba los calzoncillos, mmmm... tenía un pene precioso!, muy grueso y sin circuncisión como me gustan!, y estaba tan erecto!, ahhh... la juventud y sus ventajas! me cargó y me deposito en la cama, estando boca arriba le dije:

Cógeme rápido antes de que empiecen a preguntar por nosotros! se abalanzó sobre mí, sus manos no se daban abasto tocando y acariciando mis partes íntimas y de manera ágil se acomodó entre mis piernas, Mariela, si superas cuantas veces me he masturbado pensando en ti!

Me penetró salvajemente mientras lo abrazaba y le decía lo mucho que lo deseaba yo también, mmmm... que rico! Las niñas te van a adorar corazón! Que bien lo haces! Cógetelas bien y verás que siempre las vas a tener detrás de ti! empezaba a sentirlo muy dentro de mi cuando súbitamente empezó a moverse más rápido en señal de su venida inminente... me vengo Mariela!, me vengooooo! Lo abrace fuertísimo mientras nos besábamos y sentía sus embestidas llenarme la raja velluda de su semen joven.

Mmmm… corazón, muy rico pero muy rápido! le dije sonriéndole y acariciándole el rostro, vamos a tener que enseñarte y practicar más seguido! Tienes novia?

-sssí, dijo tímidamente, pero todavía no cogemos, me dijo con algo de pena.

Mejor! Casi grito del gusto! así tenemos oportunidad de practicar antes de que lo hagan y de esa forma cuando le hagas el amor va a quedar e-n-c-a-n-t-a-d-a!

Lo sentía durísimo todavía dentro aún después de haberse venido, seguíamos moviéndonos despacio mientras él me veía preguntándome: lo vamos a hacer de nuevo? me vas a enseñar Mariela?

-quieres que sea tu maestra?

Sí! Dijo empujando de nuevo profundo y resoplando mientras me tomaba de las nalgas para iniciar de nuevo sus embestidas mientras yo sonreía satisfecha de saber que un macho joven puede darme orgasmos más seguido que un adulto.

Sí sí dámela profundo, empuja fuerte nene! lo abrace con mis piernas y comenzamos a movernos al mismo ritmo... cuando estaba por tener mi orgasmo, oímos la voz de mi marido llamándome, se paró como resorte y empezó a buscar sus ropas mientras  me quede acostada con las piernas abiertas y su semen empezando a derramarse por mi raja.

Terminó de vestirse y volteando a verme le di una mirada de aprobación y le dije: dile a mi marido que estoy aquí en la recamara

-pero, pero, Mariela no vas a vestirte?

Jejeje, no te preocupes, dile donde estoy y regresa a la estancia con una botella de vino, ve a la cava y lleva la que sea.

-que pasó Marielita? Te estamos buscando para la cena... dijo mi marido abriendo la puerta y quedándose congelado en la puerta mientras me veía desnuda acostada con las piernas abiertas.

Pero con quién??? Pregunto cerrando la puerta... te cogiste a Balam???? ya decía yo que ese muchacho te veía raro...

Shhhh! Cállate y ven, acércate, le dije abriendo las piernas y abriéndole mi raja... mira, me dejo bien llena, es una maquinita de hacer el amor el pequeño, acércate a olerme la raja...

Continuará.