Mirando de frente al sacerdote Yessenia con su vestido gris sin manga con sus pantimedias con las botas negras luciendola como moviendolas con mucho gusto igualmente con una picardía clavada al levantarse como ofrecersele al mismo sacerdote con una sonrisa algo maqueavelica; el sacerdote le pregunta hija mía en que le puedo ayudar, diciendole Yessenia soy divorciada y estoy algo inquieta con mis pensamientos y mi imaginación sabe sacerdote tengo ganas de zacearme ahora mismo aquí en la sacristia a un sacerdote que me tiene pecaminosa e inclusive, ardiendo como una condenada diabla con las flamas y las brasas quemandome toda. El sacerdote comienza a rezar desperado y algo alterado tienes el mismo demonio metido como poseída hija mía no puedo quitarte este pecado estas condenada por la eternidad, pero hay una solución para que estes aliviada como librede pecado. Se desnuda de la cintura para abajo el sacerdote al señalarle con un leve manoteo en el escritorio que se acerca para confesarla se arrodilla frente al sacerdote Yessenia al besarle los testículos como lamiendole el cuello con la cabeza de este, al chuparselo como mamarselo con tal devoción y con una locura descritiva nunca vista en ella encontrandolo sabroso que se lo saca y mete continuamente al lamerselo en la plena punta de la cabeza del pene.

Con sus dos manos puestas en los muslos y parte de las nalgas del sacerdote gozando el momento al ser una pederasta en plena consagración tanto atrayente como descomunal la verga buenisima que le esta dando mucho interes además atención personalizada de una puta rica, en que tiene al mismo sacerdote gimiendo como jadeando de muchos placeres encontrados como volcados en que lo pone a vivir como enardecido hasta desquiciado finalmente masturbandolo a punta de mamadas que se viene todo sin avisarle ni parar ni interrumpirla recibiendo com otragandose sin titubiar ni producir asco alguno bebiendose el mangar del polvo que le saco al sacerdote al provocarlo como fascinarlo hasta deleitarlo también echarselo al mero bolsillo con una invención de algo que se el vino a la mente al instante a Yessenia cuándo se fijo y quedo prendada del sacerdote.