Todo estaba listo para la boda. Pablo ayudado por su hermana Erika, se daba los últimos toques de su arreglo personal. Pablo es un hombre alto, piel bastante clara, su cabellera un poco larga, color castaño, al igual sus ojos, qué ahora estaban muy tristes. Pablo y su hermana aún eran muy jovenes, Pablo tendría unos 30 años. Era un día muy importante para él, se casaba con su novia de tres años de relación. Se amaban y por fin se unirian para siempre. Esa frase de "unirse para siempre" a Pablo no le gustaba mucho. Quería mucho a su novia Sandra, pero hace dos años se dio cuenta qué su amor por ella no era tan intenso cómo una vez pensó. Hoy era un día muy especial para todos, especialmente para su novia, pero no para él. Pablo sentía dentro de su ser qué aún no estaba preparado para ser esposo, estaba dolorosamente arrepentido. Todos esperaban esa boda con gran ilusión. "¿Qué ocurre Pablo? Te ves muy triste y apagado- le dijo su hermana Erika- no parece qué te vas a casar, parece qué vas para un funeral. No me digas qué te has arrepentido, sería un golpe muy duro para Sandra, ella te ama, tú también a ella y ya llevan tres años de noviazgo." Sandra era virgen, Pablo la respetó y nunca quizo tener intimidad con ella, algo que asombró mucho a Sandra, pero qué a la misma vez le agradeció qué la respetara y no quisiera tocarla hasta qué no estuvieran casados. ¿Cómo echarse para atrás ahora? Ya no quería casarse con ella, ni formar una familia.... porque Pablo había descubierto qué las mujeres no le interesan, aunqué no lo quería admitir..... pero hacía un año, por primera vez se habia dado cuenta qué sentía atracción por los hombres. Pablo era un homosexual............ escondido en el clóset.
Llegaron a la iglesia. La novia estaba muy preciosa con su vestido de novia, era una joven muy bonita. Los familiares y amigos estaban muy felices con esa boda. En la tercera banca, al lado izquierdo, estaba sentado un hombre de mediana edad. Tez trigueña, pelo negro, ojos claros. Muy guapo y elegante. Pablo de vez en cuando volteaba la cabeza hacia la banca donde se encontraba sentado el desconocido. Aquel hombre le sonreia y movia su cabeza en señal negativa. Pablo le sonreia tristemente. El sacerdote oficiaba la ceremonia, pero Pablo casi no ponia atención, se pasaba mirando hacia la banca donde estaba aquél desconocido. El desconocido miraba hacia el altar y a la novia, qué estaba muy nerviosa y preocupada por su novio, su actitud la tenía asustada. El sacerdote los casaba, Pablo miraba hacía la banca, el desconocido estaba muy serio, lo miró largamente y volvió a mover su cabeza en forma negativa, como diciendo, "no Pablo, no lo hagas."
Pablo sintió qué sus ojos le ardian, cómo si quisiera llorar, trataba de contener sus lágrimas. Cuando el sacerdote le pidio repetir lo qué le correspondía, tragó saliva y una vez más miró hacía la banca donde estaba aquél hombre qué lo tenia desesperado y temeroso. Pero aquél hombre guapo no estaba. Su sitio estaba vacio. Pablo sintió un dolor muy profundo en su alma, pensó en salir corriendo de la iglesia. Pero no lo hizo y ese día de su boda fue para él como una pesadilla.
En la recepción posó para las fotos de la boda. Fingia una felicidad qué no sentía. Abandonó por un momento a su esposa Sandra para salir afuera. Buscaba por todos lados la presencia de aquél hombre, su desesperación era incontrolable. Por ningún lado pudo encontrar a aquél hombre guapo qué estaba en la iglesia. Lloró, lloró mucho, cómo un niño al qué le quitan su juguete favorito. Se calmó, no podían verlo así. Trató de actuar cómo un verdadero hombre y a su manera, disfrutó de su luna de miel y complacío a su mujer. Cumplió con su deber de esposo aunqué su alma estaba destrozada. Al despertar en la mañana volvió a recordar a su amor secreto..... el amor de su vida. Un hombre cómo él fisicamente. Su familia no sospechaba nada, y menos su esposa. Siempre actuó como un hombre heterosexual, por sus padres, por su familia y por el qué dirán. A los dos años del noviazgo con Sandra, conoció al amor de su vida. Tuvo algunas aventuras amorosas con algunas mujeres, pero no lo complacían, no sentia nada. Las mujeres en la intimidad le daban asco. Para su familia y amigos él era normal, serio, honrado, trabajador, sencillo, no era mujeriego, siempre le fue fiel a su novia Sandra.
Hace un año en un club "gay" qué fue por primera vez, conoció al amor de su vida.........Raúl Costa. Raúl era un especialista y programador de computadoras, con mucha experiencia. Daba conferencias en diferentes agencias del gobierno. Formaron una conversación y Pablo quedó muy impresionado. Vivía solo en Nueva York, cerca de Times Square. No tenía ningún compromiso. Pablo se enteró qué a Raúl le atraían los hombres y qué había terminado hacia tres meses una relación amorosa de cinco años con otro hombre. Entre Pablo y Raúl hubo una química inmediata, como amor a primera vista. Raúl fue el primer hombre por el cuál habia sentido algo muy diferente y bonito. Lo qué nunca habia sentido por otro hombre, y menos por una mujer. La segunda noche qué se encontraron, se sentaron en una mesa qué quedaba en una esquina y con poca luz. Raúl le contó mucho sobre su vida, Pablo escuchaba atentamente, pero no le contó qué estaba comprometido con una mujer para casarse. Al conocer a Raúl se pudo dar cuenta de qué él podia amar a otro, pero no a otra. Raúl lo tenia hechizado, pensó en lo mucho qué sufria por esconder su preferencia sexual. Raúl le dijo, " si eres cómo yo y te gustan los hombres, sal del clóset y di tu verdad, qué todos sepan qué eres un homosexual, eso no es una verguenza, es una preferencia sexual cómo cualquier otra." Pablo dijo qué lo iba a pensar, pues temia el rechazo de su padres y su familia. Tomaron unos tragos más y después juntos se fueron al hotel donde se hospedaba Raúl. Allí se besaron y por primera vez Pablo hizo el amor con un hombre. No sintió verguenza ninguna y lo disfrutó mucho más qué con una mujer. Al paso del tiempo esa atracción qué ambos sentían se convirtió en un amor verdadero.
Siguieron viendose a escondidas, Pablo no se atrevía a decir la verdad sobre su doble vida. Hasta qué cuando llegó la fecha de su boda, le contó todo a Raúl. Éste se puso furioso y lo amenazó con decir la verdad si él no lo decia. Pablo estuvo unas dos semanas sin ver a Raúl, lo amaba, pero también queria a su novia y a su familia. El día antes de su boda fue a buscar a Raúl, no podia vivir sin él. Le juró qué le diria la verdad a su novia y a sus padres. Raúl le creyó. Esa noche hicieron el amor como nunca, Pablo se entregó a su amor con mucha pasión. Raúl le dijo, "espero cumplas lo qué me prometiste, mañana no te casarás, dirás qué eres homosexual y qué me amas. Si no lo haces, iré a la boda y diré la verdad, qué eres "gay" y me perderás para siempre." Pero Pablo no pudo hablar, no confesó su verdad y con el corazón echo pedazos se casó con una mujer a la qué no amaba. Raúl cómo lo prometió fue a la boda, pero no lo descubrió, prefirió callar. Sufría, porqué habia pérdido al amor de su vida. Ahora estaba casado y se sentía sucio y malo. Su esposa no se merecía ser engañada de esa manera. Seguía cumpliendo con sus deberes de esposo pero extrañaba las caricias y los besos de su adorado Raúl. Por eso decidió hacer algo qué le iba a romper el corazón a su querida Sandra.
Esa mañana de invierno, con mucho frío, Pablo decidió hacer algo muy monstruoso y doloroso...abandonar definitivamente a su esposa e irse para Nueva York con el amor de su vida. Le dolía hacerlo, la queria mucho y adoraba a sus padres, pero preferia huir a decir qué era un homosexual. Seria un golpe muy fuerte para sus padres y también para su esposa. No era fácil tomar la decisión qué tomó, quizás ni Sandra, ni sus padres lo perdonarian nunca.... pero no podia estar un momento más lejos de su amor, amor prohibido, pero su único amor. Ya estaba cansado de su esposa y de hacerle el amor. Pero no tenia el valor de gritar a los cuatro vientos....su orientación sexual. Sus padres y Sandra sufrieron mucho su abandono. Por medio de un amigo les hizo saber qué estaba bien, y qué no sufrieran por él. Sandra dolida por su abandono le puso el divorcio y nunca Pablo supo qué la habia dejado embarazada.
Cuando Raúl llegó de viaje y vio a Pablo se puso muy alegre. Sabía qué algún día él diria la verdad de su vida y volvería, porque se amaban mucho. Raúl le preguntó qué si habia arreglado su problema personal y por primera vez Pablo le mintió a su amor. "Dije toda la verdad, mis padres no quieren saber de mi, mi esposa me odia. Mis padres sufren mucho y no me van a perdonar y menos me van a aceptar como homosexual. Por ti perdí a toda mi familia, pero no me importa porque te amo más qué a mi vida." Raúl estaba muy contento, lo abrazo, lo beso en la boca y le dijo, "¡te amo Pablo, te amo, eres el gran amor de mi vida!!!" Pablo se sintió mal, no le gustaba mentir y menos en algo tan serio como la relación que sostenía con su adorado Raúl. Pero por temor a perderlo, por no decir su verdad, mintió, mintió descaradamente. Vivía con el temor de qué algún día Raúl se enterara qué lo había engañado. Eso sería un golpe muy bajo para él. De seguro no se lo perdonaria. Pensaba algún día sacar el valor de lo más profundo de su ser y decirle por fin a su familia quién verdaderamente era él. Por el momento gozaba de la dicha de estar con su amor, disfrutar su intimidad, vivir su vida a su antojo y olvidarse de lo qué pasaba en el mundo, donde para él solo existia Raúl. Lo demás salía sobrando.