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Categoría: Dominación

Sumiso de mi suegra y mi esposa (4)

Ese fin de semana me la había pasado, recibiendo nalgadas y con el collar puesto, y Cristina se había encargado de conseguir un catre. El cual acomodo entre su recamara y la ahora recamara de Pamela, no sabía cuánto tiempo íbamos a estar con Cristina. Llego el lunes y las dos se prepararon para irse a trabajar. (No les había comentado que yo trabaja con Cristina en el negocio familiar de ella) Bueno como les decía, llego el lunes y tanto Cristina como Pamela, se preparaban para irse a trabajar, y yo me encontraba en la recamara de Pame, hincado a un lado de ella, mientras se terminaba de maquillar.



-Mira Ernesto, ahorita mi madre te va a cambiar de ropa, ya llevas muchos días con ese vestido y después, pues te va a decir donde esperarnos, entendiste…??



Lo que me dijo Pamela, me dejo pensando, donde me iban a dejar estas dos mujeres…???



Pamela termino de maquillarse y en ese momento iba entrando Cristina, y Pamela de inmediato le pregunto.



-Vamos a hacer lo que quedamos mama?? -pregunto Pamela.



Cristina se paró en frente de nosotros y una sonrisa maliciosa se le dibujo en el rostro, a la vez que respondía.



-Claro que si Pame, pero antes hay que quitarle ese vestido, que te gustaría ponerle?



-Mmmhhhh… la ocasión amerita el baby doll negro y la tanga, te parece?



Cristina salió del cuarto y Pamela me dijo.



- Vete quitando el vestido, antes de que entre mi mama?



Rápidamente obedecí y me saque el vestido quedando desnudo frente a Pamela, y en cuanto Cristina entro y me vio parado, se le volvió a iluminar el rostro.



-Bien Pamela, veo que ya te obedece más, es una lástima que no tengamos más tiempo para jugar con él, ya vístete Ernesto…



Rápidamente me puse el baby doll y unos tacones, después salimos los tres del cuarto.



-Cierra todas las puertas Pamela, solo déjale abierta la del baño, no queremos que se ponga ropa verdad…???



En este fin de semana había conocido a una Cristina muy diferente era una sádica que le gustaba humillarme en todo momento.



-Bueno Ernesto, haces el aseo y quiero que todo quede muy limpio, si no ya sabes, entendiste?



- Si Cristina, asentí con la cabeza baja.



Después ambas dieron media vuelta y antes de salir, alcance a escuchar a Cristina decirle a Pamela.



-No sabe la que se le espera… jajajaja…



Y ambas salieron de la casa, al fin podía descansar un poco, me quite los tacones y me senté un momento en la sala y me puse a pensar que no había forma de escapar de esto, Cristina me tenía bien agarrado de los huevos y era capaz de todo y no me podía arriesgar, tenía que soportar. Cristina y Pamela se habían ido como a las 9 am y ya eran casi la una de la tarde y ya había aseado la cocina y el baño, y no tardaban en llegar, así que me puse a limpiar los muebles, no quería hacer enojar a Cristina, no pasó mucho cuando sonó el teléfono, conteste y era Cristina.



- Báñate ponte el collar y espéranos en el baño…



Y sin decir más, colgó, así que entre al baño me quite el babydoll y me metí a la regadera y me comencé a bañar, afortunadamente todavía quedaba un poco de agua caliente desde en la mañana, así que en aproximadamente 20 minutos. Estaba ya como Cristina me había pedido, con el babydoll y el collar, y me senté en la banca del baño, no sabía que se le había ocurrido ahora a Cristina, pero me imaginaba que no era nada bueno, así que tome el collar me lo puse, pasaron varios minutos hasta que escuche que se abría la puerta, escuche el taconeo de Cristina y al fin se abrió la puerta del baño, entro como sin nada se me acerco saco su lápiz labial se me acerco me aplico un poco también me puso algo de maquillaje y tomo la cadena y me dijo.



-Bueno pues ahora vamos a la sala que te quieren conocer…



-Como…!!! Que dices… eso no Cristina… por favor…!!!



Le rogué a Cristina que no me sacara así vestido, pero ella solo volteo a verme y me dijo…



- Quieres sentir de nuevo el consolador en tu boca verdad?



No me quedo de otra, que seguirla hasta la sala, en cuanto atravesamos la puerta del baño, sentí como la sangre se me agolpaba en el rostro, y pude ver a Pamela y a otra mujer que no conocía, ambas estaban de pie justo frente a la puerta del baño.



-Mira Sandra, es el esposo sumiso y feminizado de mi hija Pamela.



La señora Sandra al verme comenzó a caminar alrededor mío, mientras le decía a Cristina,



-Vaya Cristina, esta genial, tú lo depilaste?



-Claro que sí, entre mi hija y yo, nos encargamos de feminizarlo, fue bastante divertido



-Si lo creo, y más conociéndote – contesto Sandra.



-Tiene unas buenas nalgas?



-Jajajaja… -rio Cristina.



-Y tu hija nos lo va a prestar –pregunto Sandra.



Cristina volteo a ver a Pamela y ella sin titubear, respondió.



-Claro que si, pueden usarlo cuando ustedes gusten.



-Gracias señorita Pamela, entonces… me dejas revisarlo más a fondo – pregunto Sandra a Pamela.



-Claro que si Sandra, está a tu disposición, úsalo…



Sandra se paró frente a mí y con una mano tomo el baby doll y lo levanto un poco mientras que con la otra, tomaba la pequeña tanga y me la bajaba, dejando al descubierto mis genitales.



- Vaya sí que se divirtieron, lo dejaste bien depiladito, aún se ve rozado… jajajaja… y no me invitaste a la fiestecita.



-No te fijes Sandra, ya vendrá otra y será para ti solito -exclamo Cristina.



-Bueno pues entonces déjame revisarlo ya que esa es mi labor, claro sin olvidar la diversión, y tu Pame, poco a poco la veas ir agarrando el gusto a esto de la dominación femenina y veraz que conmigo, te divertirás bastante, puedes preguntarle a tu madre.



-no es así Cristina?



- así es Pamela, Sandra y yo nos hemos divertido horrores, con algunos amigos de ella y míos.



-Pero esas son otras historias, comencemos a divertirnos.



Después de que Sandra dijo esto, se acercó a Cristina le pidió la correa y jalo de ella llevándome hasta el respaldo de uno de los sillones.



- como se llama Pamela.



Cristina no dejo contestar a Pamela y respondió.



-Puedes llamarle putita.



-A ver putita, reclínate sobre el respaldo del sillón y calladito entendiste…???



Sin decir nada obedecí y me recline apoyando mis brazos sobre el respaldo del sillón, dejando mis nalgas expuestas, después sentí como Sandra tomaba la parte de abajo del baby doll y la levantaba dejando mis nalgas expuestas.



-Ya le estrenaron –pregunto Sandra.



-No Sandra, solo le hice sentir un poco mi dedo.



-Huyyyy… vamos a estrenar… jajajaja…



Después de eso, Sandra tomo la delicada tanga y de un jalón la deslizo hacia abajo, dejando mi trasero desnudo y expuesto, una vez así, escuche que le dijo a Cristina.



-Pásame los guantes Cristina y ya sabes que hacer…



-Perooo… si claro, Sandra.



Cristina se acercó a Pamela y le dio los guantes después se fue detrás de mí y sentí como poso sus manos sobre mis glúteos, después Sandra se paró a un lado mío y levanto su mano a la altura de mi cara y puso su dedo frente a mi rostro, y me dijo.



-Abre la boca…!!!



Abrí ligeramente mi boca y Sandra metió su dedo completamente.



- Comienza a chupar, putito, entre más húmedo este el dedo, será mejor para ti.



Sabía lo que me esperaba, así que comencé a chupar el dedo de Sandra, de inmediato pude sentir el amargo sabor del plástico inundar mi boca, pero no tenia de otra, así que comencé a lamer y a chupar su dedo, dejándolo lo más húmedo posible, y mientras yo lamía, ella platicaba con Cristina y Pamela, acerca de lo que me tenían que hacer, decía que me tenían que aleccionar muy bien y que entre más humillaciones era mejor, durante varios minutos Sandra estuvo metiendo y sacando su dedo de mi boca, hasta que después de un rato le dijo a Cristina.



-Ya está Cristina, sepárale sus nalgas.



Sentí como Cristina apoyaba sus manos sobre mis nalgas y de forma brusca la separaba, después Sandra saco su dedo y se fue hacia atrás, sabía que lo que venía me iba a causar un gran dolor, así que no me quedo de otra más que relajarme, sentí como Sandra apoyaba su dedo en mi ano y después un dolor tremendo recorrió mi espalda, esta vez el dolor fue más fuerte que con Cristina, fue tal que por poco se me doblaban las piernas, Sandra había metido todo su dedo en mi trasero, y durante unos segundos lo dejo quieto, pero de pronto, comenzó a girarlo y a moverlo de un lado a otro, aumentando tremendamente el dolor.



-Hhayyyy… yaaa… Cristinnnaaaa… ya… Pamela… díganle que lo saque por favor?!



Pero fue inútil, suplicarles, y las tres comenzaron a reír.



Sandra no dejaba de mover su dedo y Cristina además de estar separando mis nalgas las estaba apretando y me daba de nalgadas, durante varios minutos el dedo de Sandra entro y salió de mi ano, y ellas tranquilamente charlaban y reían, pero como siempre Cristina no podía dejar pasar la oportunidad de humillarme. Así que le dijo a Pamela que tomara su lugar, que ella quería hacer algo especial, Pamela se acomodó detrás de mí y puede escuchar que Cristina se metía a su recamara, no sabía que tramaba pero por un momento descanse ya que Sandra saco su dedo de mi trasero, pero fueron unos pocos segundos Cristina casi de inmediato salió del cuarto y se paró frente a mí y me dijo.



-Levanta la cara putito…!!!



Como pude le hice caso y en cuanto mi cara quedo frente a ella, una fuerte luz me sorprendió, me había sacado una foto.



-Jajajaja… como no inmortalizar este momento verdad putita.



Después dio media vuelta y dejo la cámara en un mueble justo frente a nosotros, y se volvió a ir detrás de mí.



- Sandra, no seas envidiosa y déjame jugar un poco con él.



-Jajajajaja… claro Cristina, es todo tuyo.



-A ver Pamela, sepárale bien sus nalgas.



Sentí como Pamela, sujetaba mis nalgas y los separaba fuertemente, después sentí como Cristina, me aplicaba algo líquido en mis glúteos y comencé a sentir como sus dedos acariciaban los bordes de mi ano.



- A ver Sandra, sujétalo de la cadena y ponlo mirando frente a la cámara.



Sandra se me acerco y me sujeto la cadena jalando hacia abajo, tomo mis cabellos y me levanto la cara, y Cristina no dejaba de acariciarme, sabía que me iba a doler así que me relaje, y de pronto un fuerte dolor recorrió mi espalda, pero ahora era mucho más fuerte que antes, Cristina me estaba metiendo dos dedos,



-Levanta la cara putito, quiero que todo quede grabado…!!!



-Sandra me tomo fuertemente del pelo y me levanto la cara, mientras que Cristina metía lentamente sus dedos, sentía que me desgarraban.



-Vaya putito, si te cupieron dos dedos y enteros… jajajajaja… relájate que los voy a tener hay metidos unos minutos, entendiste…!!!



-Si Cristina… ya entendí…



Después de eso Cristina comenzó a meter y a sacar sus dedos de mi ano, primero los introducía fuertemente y ya una vez que los metía completamente comenzaba a girarlos hacia los lados, causándome un gran dolor, después de escucharme gritar un poco los retiraba completamente de una forma lenta, me dejaba descansar unos segundos y de nuevo volvía a introducirlos.



- Como sientes el culo putito?



- Me duele mucho Cristina…!!!



- Quieres que me detenga?



- Si... Cristina…!!!



- Si que putito…???



-Cristina en verdad estaba gozando verme así humillado y quería disfrutarlo al máximo.



- si… Cristina quiero que te detengas… por favor…



Mmhhhh… bueno solo porque me dio algo de sed y quiero tomar algo, vamos a descansar chicas.



Y después de decir esto, saco sus dedos se quitó el guante y lo aventó sobre mi espalda y me dijo.



-Quédate así como estas, si te mueves… ya sabes…



Y después las tres se fueron rumbo a la cocina, dejándome reclinado en el sillón y con los calzones abajo.



Continuará.


Datos del Relato
  • Categoría: Dominación
  • Media: 2
  • Votos: 1
  • Envios: 0
  • Lecturas: 2312
  • Valoración:
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