En un atardecer con el solo poniente hacia las montañas cruzando como siempre la acera frente a su casa. Yessenia no se imagina la bomba que encontrara presencialmente en su propia sala comedor de su casa estando justamente por meter la llave en la puerta de hierro de la puerta principal descubre algo embersimil pegado escuchando bajito por la ventana que da justamente a la sala comedor, asomandose y metida camuflajidamente entre un arbusto mirando vivamente una escena en donde esta el descarado, maldito, desgraciado, jodido, necio, acusante, dominante y sobre todo, decente hasta integro como honorable e intachable esposo teniendo relaciones con otro hombre que están muy encaramelados viendo con unos ojos que se le caeran de la misma cara de sorprendida igual estupefacta como inexplicable que consideraba que era un individuo que no se le levantaba el libido ni siquiera se fijaba de cuerpo entero tirandole unas miradas de lujurioso a ninguna mujer. Doblada con falda azul oscura y medias queda mirando con mucha curiosidad planeando una buena merecida de su propia cucharada de medicina cuando le venga con sus pendejadas y su hombria al carajo y al imponerse sus ordenes y lo que se le venga la plena gana a la hora de recriminarle como hecharle en cara sus acostumbradas infidelidades, traiciones, adulterios, libertinaje, aventuras con otros hombres a sus espaldas inclusive, engaños contra la dignidad, pudor y merced de su sagrado matrimonio.

Pasando cuatro horas al despedirse saliendo por la puerta de hierro que da al patio trasero donde esta la lavanderia el amante gays de su querido y pillado hasta pescado plenamente con las manos en la masa pasando unos veinte minutos contados en el reloj de Yessenia abre la puerta de hierro delantera y la puerta principal encontrando todo quieto y su esposo leyendo tranquilamente como no hubiera pasado nada en ausencia de Yessenia el mismo periódico, dandole un beso de saludo y iendo al baño para orinar de ahí, pasa a la cocina para sacar algo de la refrigeradora que se preparar la cena que esta muriendose de verdad de hambre, al entrar al cuarto para quitarse el uniforme y ponerse algo comodo huele la ropa de su esposo notando la prueba crucial para tenerlo muy dominado y en sus enteras manos para confrontarlo hasta descubrirle el engaño. Lo llama toda brava estuvistes con otros hombre aquí teniendo amores a mis espaldas los descubri hace másde cuatro horas pegada en la ventana de nuestra sala comedor grabandote con la camara de mi celular que tu me regalastes en mi último cumpleaños ahora estamos a mano sino quieres escandalo que lo divulge continuaremos con nuestras vidas por fuera como dentro de esta casa entiendes lo que te digo tomalo como un ultimato o bien siquieres una maneza a futuro sino me dejas de molestar e interrogarme como fueras de la fuerza de defensa que ya no lo eres y están extinto entiendes con toda una sonrisa como miradas atenta y tirada como dardos a toda la cara de su esposo en esa noche espectacular y infrganti descubrio al santo de su querido esposo que no mata ni una mosca.