Despertamos todas las mañanas juntos tanto mí hijo de 16 años adolescente conmigo que soy su madre y puta de 35 años hoy por hoy.

Nos metemos juntos y solos al cuarto de baño de mi habitación donde yo orino y obro, en que mí hijo el adolescente de 16 años que se ha convertido hoy por hoy en mí hombre, amante, puto, dueño, macho, excitado, endemoniado, etcétera en que no aparta nada su cara de lujurioso y pervertido de mis entrepiernas viendo mi orine y pupu, que termino me pide orina un poco más le respondo eso es todo mi vida con mis manos en su mejillas pero lo complazco e intento hasta obedezco milagrosamente orino cortamente en que me limpia toda al lavarme en persona cómo en vivo y a todo color toda mi micha y rabo en que lo huele para ver si ha quedado rastro de mis necesidades fisiologicas femeninas.

Me viste con minifaldas de cuero con corsé de cuero con mallas y botas de plataforma látex en que ns desayunamos soberana, buenisima, riquisima, sabrosisima, espectacularisima, deliciosisima, deseadisima, deleitadisima, zaceadisima, fascinadisima, fabulosisima, cautivadisima, provocadisima, dominadisima, atrapadisima, apresadisima, asimismo obligadisima, y por supuesto sometidisima, hasta atrevidisima, pero putisima ambos.

En que me penetra y hurga hasta juguetea en sus eternas fantasías de que soy su puta en que me lo cabalgo al echarme para atrás con tal destreza, agilidad, habilidad, profesional, experta en que me sujeto de las mismas suelas especialmente aferrandome a los tacones de aguja de mis botas de plataforma látex jadeandome cómo gimiendo inclusive suspirando continua e incontenible hasta inidadamente a petición de mi hijo de 16 años adolescente y mcuho más de lunes a viernes al despertarnos cómo orinando hasta obrando juntos y solos en el mismo cuarto de baño de mi habitación y mucho más después de que me viste con atuendos de cuero enteramente a su madre que soy su puta hoy por hoy.