Celebración otro año más del mismo Halloween en qué me invitaron a participar nada menos que en el consulado de España, en qué voy disfrazada de Alicia en el País de las Maravillas, con un traje corto de cuero bien ceñido además ajustado pero entallada a mis contornos anatómicos tipo tuto con medias ligero negras con botas negras largas hasta la rodilla con un delantal que cuelga propiamente de mi cuello y amarrado a mi cintura con vincha en el cabello.

Otra vez soy acompañada por mi adolescente hijo de 16 años disfrazado de Daniel Bum en que no me aparta para nada su coronada mano de mi culo en que estoy desnuda sin hilo dental cachetero ni brasier en que pasa rosándome con sus dedos en toda mi vagina y rabo en que ando disimulada al tener una amena conversación y que soy presentada incluso conociendo en persona al mismo señor embajador consular de España que está disfrazado completamente desde los mismos pies hacia la cabeza y viceversa cómo el legendario Zorro; en que estrecha mi mano al besármela con una ejemplar educación aristocrática que me deja sonrojada y algo incomoda pero lo sobrellevo tan bien en vivo y a todo color.

Ya en la 64 ^avb  entrega titulada propiamente Soy la Madre y Puta de mí Hijo hoy día y mucho más. Qué nuevamente interviene al inmiscuirse el impertinente además puto de mí hijo adolescente de 16 años que le habla qué soy una prostituta totalmente en que alternos con bastantes hombres complaciéndolos especialmente entregándome igualmente cumpliéndole todas sus fantasías eróticas de ahí pornográficas hasta pervertidas en que vuelve hacerme de las suyas ante mi presencia en que me enfado, abochorno, sonrojo, se me cae la carota de vergüenza, en fin qué la cosa no paso a mayores en que no lo considero una ofensa, irrespeto, desconsideración alguna, ofrecimiento, etcétera por parte de viva voz del mismo señor embajador del consulado de España donde está dándose la celebración otro año más del Halloween.

Bueno el señor embajador me toma del brazo me dice vayámonos de aquí y aleguémonos de la impertinencia de su hijo que parece bien su proxeneta qué la obliga hacer todo esto, en que me planta este beso el propia embajador de España, acepto irme con él para mayor intimidad estar solos como juntos ordenando que nadie nos interrumpa, moleste, distraiga, incomoden, y así que no le pase a nadie sobre todo al impetuoso de mi hijo adolescente de 16 años que anda haciendo de las suyas al revolcarse con las invitadas y agregadas culturales de la embajada de España.

Sentándose al darme una copa de vino en que brindamos y tomamos; entrando un poco más en insinuarnos, incitarnos, emocionarnos, deleitarnos, desearnos, fascinarnos, atraernos, calentarnos, excitándonos, dominándonos, apasionándonos, cautivándonos, seduciéndonos, provocándonos, coqueteándonos, flirteándonos, simpatizarnos, etcétera; el embajador desliza tranquilamente desde mis rodillas abriéndose mis piernas automáticamente al deslizarse entre varias manoseadas continuas permitidas por mí a lo largo en que sigue avanzando encontrándose con mis ingles descubriéndose por el mismo que estoy desnuda debajo del disfraz de Halloween. Me deja su mano puesta en micha metiéndome y sacándome al mismo tiempo el dedo de mi clítoris despacio en que voy relajándome y aflojándome corporalmente toda, baja su mano directamente a mi vagina en que lo dejo que me hurgue con tanta intensidad en que tengo convulsionada mis contornos corporales qué no dejo de contorsionarme continuamente por la hurgada perpetuada y coincidida por el mismo señor embajador de España. Qué me ha saco mis senos erectos y parados de pezones que al mismo tiempo anda devorándose soberanamente en que me los muerde despacio y leves al lamérmelos, chupármelos, jalármelos, besármelos, mamármelos, y obviamente apretarlos contra en el medio su verga que la tiene erecta, dura, enorme, buenísima, sabrosísima, riquísima, deliciosisima, lujuriosisima, etcétera en que lo ando follando en mis propia cara de arriba hacia abajo continuamente que tengo al señor embajador de España colosal, fabuloso, encantado, hechizado, hipnotizado, endemoniado, enloquecido, enajenado, etcétera conmigo y solamente conmigo.

En un grande taburete reposa pié ancho donde me tiene acostada doblada con la vagina hacia arriba y bien abierta en que me la clava, entierra, profundiza, penetra, mete, bombea, culea, así coge arriba mío con todas las fuerzas, ganas, ánimos, delicias,  deleites, deseos, emociones, entusiasmos, finalmente entre nosotros desquiciado conmigo y solamente conmigo en que jadeo igualmente gimo intensamente dándome este sexo gustándome, goloseándome, gozándome, disfrutándome, prostituyéndome, abanderándome, protagonizándome, en la noche de hoy que soy invitada en la celebración del mismo Halloween en el consulado de España otra vez encarnando a la madre y la puta de mí hijo hoy día y mucho más 64; se viene y me mojo toda en jugos vaginales quedándome sucia y embarrada de todo el polvo de la verga que está desbordante el propio señor embajador de España conmigo en la intimidad que lo hicimos por el contacto que tuvo el atrevimiento mi propi hijo adolescente de 16 años el que concertó esto y le digo de lo que me obliga siempre hacer contra mi voluntad, dignidad, honra, etcétera hoy día siendo toda una prostituta al mejor postor y mucho más.