Haciendo aerobicos en que soy la madre y puta de 35 años que hoy por hoy mantiene hasta protagoniza igualmente tiene relaciones incestuosa con mi hijo adolescente de 16 años que es mí hombre, macho, dueño, patrocinador, incitador, pervertido, pornografico, especialmente testigo presencial y participante de todo el sexo que tengo con hombres que los busca hablandole que soy toda una prostituta con un cuerpazo de mujer de 35 años que al llevarlo nueve meses en mi vientre antes y luego del embarazo me conservo identicamente tanto en figura cómo personalidad en que consensuo todo esto por amor a mí hijo y a los hombres que me presenta hasta los invita a acostarse también a tener sexo en persona cómo en vivo y a todo color solamente conmigo que para los casos propiamente soy la madre y puta de mí hijo hoy día y mucho más en está vigesima quinta entrega y versión de este relato.

Con jacket de tipo jeans con un corsé cuerina que hace juego perfectamente con una falda corta cuerina negra en botas plataforma látex soy el trencito que lleva atrás muchos vagoncitos que son todos los hombres me me tienen agarrada de la cintura cómo de mis muslos acariciandome, sobandome, tocandome, rosandome, sobandome, hurgandome al meterme el carboncito por la maquina del trencito, etcétera.

Me descarrillo con todos ellos en que le agarrar para sujetarse ferreamente de mis senos y pezones con son la chimenea del trencito y siguen metiendome el carboncito para que siga andando el trencito.

Paramos en las estaciones para coger agua por parte del trencito en que me la están echando y abasteciendome por cada follada y cogida que soy objeto, encantada, seducida, cautivada, provocada, dominada, atraida, caliente, aventurada, deseada, deleitada, zaceada, apasionada, etcétera por todos estos hombres en que mí hijo adolescente de 16 años no aparta la mirada siendo expectador observandonos propiamente con sus narices y ojos todo lo que está sucediendo con el trencito y los vagoncitos en que no nos detenemos al continuar el jueguito consensuado por mí parte libertina, sexual, amorosa, apasionada, y por supuesto  románticamente por mí y solo po mí que soy hoy por hoy la madre y puta de mí hijo adolescente de 16 años y mucho más.