Sentadas en una banca amistosamente conversando tanto Jayner acompañada por otra colaboradora viéndose muy alegres departiendo participativamente hasta riéndose jocosamente con mucha gracia.

La colaboradora le pide con toda la amabilidad si tiene a su disposición kotéx toallas femeninas. Parándose y caminando entran a su oficina le saca de su cartera una que tiene por cualquier emergencia van al baño de la empresa trancando la puerta sentándose las dos a orinar este le dice es mi primera vez que uso estas toallas femeninas puedes enseñarme como ponérmelas con el hilo dental cachetero.



Terminando y limpiándose al lavarse las manos Jayner llegando a donde está la colaboradora le muestra en vivo a todo color y físicamente como se quita el papel adhesivo que trae la misma toalla se limpia la colaboradora al pararse le muestra con el mismo panti como se pone le salta de repente sin que se dé cuenta un pené de hombre al retroceder un poco con la boca abierta sorprendida le dice que es esto. Sonriéndole la colaboradora le habla soy una hermafrodita a simple vista me ves toda femenina pero cuento con dos órganos tanto masculinos y femeninos puedes tocarlo y sentirlo es real no muerdo soy bien cariñosa y sobre todo muy respetuosa esto no amerita que me trates de hoy en adelante indistintamente como lo hemos hecho a la fecha de hoy. La asistente administrativa se lo soba igualmente se lo masajea efervescentemente e inclusive, se levanta la falda cuero al bajarse el hilo dental cachetero a la altura de las rodillas para que la folle y la coja en un momento que nadie los descubra encontrándolo emocionante plenamente vigorosa finalmente rico para cerrar con broche de oro es mamada y chupada como mordida superficial, leve, suave y lamida en todas sus tetas por la colaborador hermafrodita.



Saliendo como no hubiera ocurrido ni presenciado también no protagonizaron en ese instante lo que no divulgaron ni Jayner ni la colaborador hermafrodita en absoluto pero continuaron su primer contacto como su primera experiencia sexual al invitarla a su casa o a la casa de la colaboradora a pedir de boca a manos llenas