Jhony de mi alma...Ahora estoy aquí tirada en el suelo de mi habitación, encorvada sobre la hoja de papel en la que te escribo, iluminado sólo por la tenue luz de una lampara. Con mis cabellos alborotados por la brisa que entra desde mi ventana, mi piyama azul se abre y deja ver la humedad de mi coño que muere por ser penetrado por una polla de verdad bella y gruesa que no me conformo ya con verla desde la web cam...ya necesito sentirla...porque es tuya amor mío...en realidad necesito todo de ti...mi meta más grande es convertirme en la mejor amante que hayas tenido, hacer de ti un hombre pleno y satisfecho...sueño despierta con el día que pueda pasarte mi lengua por el frenillo de tu polla muy delicadamente, que muevas tu culo y lo acerques a mi boca, que me digas lo mucho que te gusta que te chupe tu culo y que yo fascinada viendo ese culito bello que tu tienes amor mío, me caliente a mil grados centigrados y por fin pasar mi humeda lengua por tu orificio ..escuchar tu voz ronca por el deseo decir- así me gusta mi putica bella...ahora dale a la lengua, zorra mía, méteme la lengua , lámeme el culo- y empiezas a mover el culo contra mi cara. yo saco la lengua y lo comienzo a lamer con pasión, metiendo y sacando la lengua de tu culo, mientras me lo mueves en mi cara. ¡ Qué placer me has dado, mi hombre bello! Que sabroso! pensaba mientras te lo hacía ...!Mi lengua te recorría tu culo de arriba abajo, y te lo besaba como si estuviera hipnotizada!- Estaba fascinada. Estaba dispuesta a volver a chuparte ese culo cada vez que me lo dijeras. !Así putica! ¡ méteme la lengua! ¡ y besámelo, chupámelo! y seguias removiendo tu culo contra mi cara y mi boca. Te gusta el olor? ¿te voy a refregar este culo en la cara para que conozcas lo que es complacer a tu amo...te escucho decir. Me gustaba su olor. Y también el sabor... -¡¡¡Qué rico, papito!!! ¡Chuparte el culo me calienta mucho, te digo! ¡Me gusta cuando tengo la cabeza entre las piernas de mi hombre- Me gusta dominar a mi mujer y obligarla a que haga lo que yo quiera! Me gusta verte dominada y obligarte a chuparme el culo y la polla! Era lo que me decías y me hacías.¡ Mi clítoris se puso rígido. Yo chupaba y chupaba. De pronto me cogiste del pelo y acercastes mi boca a tus huevos. Fui limpiando tus pelos. Abres las piernas ampliamente, ofreciéndome tus pelotas desfachatadamente. Tus pelotas eran corrugadas pero suaves y acariciaban mis mejillas. El olor que salía de tus genitales me embriagaba. Una vez que tuve tus huevas dentro de mi boca comencé a pasarles la lengua y a ensalivarlas. Todo esto ocurría en silencio, con sólo el ruido de nuestras respiraciones y jadeos.-¡Así me gusta, mi putica obediente! -¡Ahora de rodillas, zorra!- y pusiste tu verga frente a mi cara. -¡Ya sabés lo que tienes que hacer!- ¡Mámala pero sin sacarme la leche! Yo me la metí en la boca y la entraba y sacaba de mi boca como si fuera un bombón. De tu polla comenzó a salir un poquito de semen y entonces le retiré la cara. Me tomó por las axilas y me hiciste erguir hasta que mis tetas te quedaron en tu cara. Mis pezones estaban duros. Te pusistes a chuparlos y a morderlos. Tus manos mientras tanto apretaban y soltaban mis tetas con fuerza. Con las manos también me acariciabas la cabeza y el cuello, y me metistes un dedo en la boca para que te lo chupara, y te lo chupé.¡Ahora tengo ganas de ir al baño...dijiste de pronto.!¡Pero creo no voy a llegar a tiempo! ¡ Abre tu boca! Ordenaste. Y ahí me soltastes un chorrito y luego me tiraste un chorro más largo que me llenaste la boca. Me sentí extasiada y me lo tragué. –Muy bien putica! Ahora lámeme bien la polla para limpiarme... Pero cuando estaba ya acabando de limpiarla de pis con mi lengua, llegó otra descarga, que empecé a tragar con gozo. Me agarré a tus nalgas, pegando mi boca a tu verga, para tragarme todo lo que tuvieras para darme, pero me la sacaste de la boca y me dijiste que me acostara de espaldas sobre el suelo. Y parándote con ambas piernas abiertas, una a cada lado de mi cuerpo, apuntaste con tu verga a mi cara, ojos, pelo, orejas, nariz, boca. Yo abrí la boca y me metiste un largo chorro para después seguir por mi cuello, mi pecho, hasta mojarme completamente. -¡Estuve juntando todo este pis para ti, zorra mía! dijiste agachandote frente a mi boca, de modo de que pudiste continuar meándome. Yo estaba llena de placer, y bebía y bebía tu orín, amarillo y caliente. Cuando terminaste, yo vi embobada como tu verga se acercaba y la restregabas contra mi cara. Tus orines sabían exquisitos. Me dijiste: ¡ ponte en cuatro!, de espalda a mí, abre bien esas nalgas y colócate la verga a la entrada de ese culo, que es mío! Hice lo que me dijistes y me tomastes con tus manos de la cintura y metiste tu verga en mi culo hasta empaparme completamente. Mis nalgas rebotan una y otra vez sobre tu pelvis y yo hago movimientos cortitos pero cada vez más seguidos. Ahí estaba yo con tu verga bien metida en mi culo, mi respiración se acelera más y más, mi culo se contrae espasmódicamente para apretarte tu polla. Sentí que tu verga estalla en mi culo como un surtidor y que tus manos se aferran con fuerza a mis nalgas. Un orgasmo se me vino también desde la cabeza e hizo explosión en mi culo. Quedamos rendidos, uno en brazos del otro....que tristeza que al despertar todo era un sueño y no estabas, pero ahi estaba mi caperucito rojo para ayudarme un poco...que corrida me di en tu nombre....siempre tuya....!!!!TU MUJER