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Categoría: Maduras

SITUACIONES EN LA VIDA II

Cuando mi padre fundó la fábrica, siempre los aspectos contables y fiscales se llevaban a través de una firma de contadores públicos, de la cual era socia Doña Lily, que al igual que su esposo eran amigos de la familia, por cierto el señor ya fallecido desde hacía muchos años, el era piloto aviador de la compañía Panam. Una noche mientras cenabamos me comentó mi madre que doña Lily se retiraba de la firma de auditores, y que se iba a vivir a Francia junto a su hija, ya que quería jubilarse, y que habían platicado que en el tiempo que estaría aún en Guatemala, podría formarnos la sección contable en la empresa.

Dos días después tuve una entrevista con ella, y así me enteré que dos años atrás su hijo mayor, y el esposo de su hija murieron en un accidente de tránsito, y que su hija por la relación laboral del padre, trabajaba en una empresa muy importante en Francia siempre en el ramo de la aviación. Ella laboró para nosotros por espacio de seis meses. Cuando se le adaptó su oficina en el mismo nivel que ocupaba la mía, se hicieron ciertas modificaciones a la mía para aprovechar el espacio y materiales sobrantes que consistía en estructuras de aluminio y vidrio. modificaciones que influyeron en el relato que hoy escribo. Mi oficina tenía un baño completo, pero había un espacio vacío entre este baño y un salón de sesiones, por lo que dispuse hacer un pequeño dormitorio, ya que en oportunidades salía demasiado tarde de la fábrica y de regreso a casa se exponía mucho por lo peligroso de la época, por lo que lo adapté con un pequeño closet, donde mantenía lo indispensable de ropa y otras cosas, y este dormitorio tenía una puerta con acceso al saloncito de sesiones.

Un día sábado como a las diez de la mañana, llegó doña Lily a la oficina, a recoger ya sus últimas pertenencias, ella siempre llegó a laborar con ropa muy formal, casi siempre con pantalón y saco, o a veces con falda pero siempre con su saco, o sueteres elegantes, ese día me sorprendió enormemente cuando la ví entrar a mi oficina, iba con un vestido blanco con flores azules, muy escotado por cierto, pegado a su parte superior, en el cual se dibujaban unos senos grandes hermosos, como mostraba casi la mitad de los mismos se apreciaban lisos, blancos y duros, su cintura delgada y la parte de abajo de su vestido era floja, le llegaba un poquitín abajo de la rodilla, sus zapatos blancos destapados y de tacón alto realzaban unas piernas hermosas blancas y torneadas, su cadera un poco ancho pero de un culo redondo y parado, su edad era de 52 años pero aparentaba mucho menos, su pelo castaño ondulado le caìa un poco abajo de los hombros, sus ojos avellanados grandes, y en si sus rasgos muy finos y hermosos, nos saludamos y ella me dijo que regresaba en un momento que solo iba a recoger ciertas cosas y que antes de marcharse quería hablar conmigo de algo demasiado importante. Cuando salió me quedé pensando que yo la conocía desde hacía mucho tiempo y no recordaba que fuera precisamente en mi casa, yo tenía para ese entonces 26 años y la memoria no podía encajar en la época que yo tenía que haberla conocido.

Cinco minutos después me pidió que hablaramos en el saloncito de sesiones, y me comentó que ese dia llegó a la oficina y que adrede había dejado ciertas cosas para poder hablar conmigo aprovechando que los sábados no llega más personal administrativo. Me dijo que nunca pensó que se daría esa situación pero que dado a lo ocurrido el día del apagón ella ya no podía aguantarse más. ¿que ocurrió el día del apagón? Ese día yo tuve que salir muy temprano a Escuintla, un departamento cercano a la capital, por razones de trabajo y regrese aproximadamente a las seis de la tarde, fué un día caluroso, y había sudado demasiado, había quedado de ir traer a mi esposa al hospital para luego cenar juntos, pero por la hora no me daba tiempo de ir hasta mi casa por lo que pasé a bañarme y cambiarme de ropa, cuando me estaba bañando hubo un corte de energía electrica, por lo cual fuí a vestirme al saloncito de sesiones, para aprovechar la luz de la lampara de emergencia que se enciende en estos casos, y a escasos cinco metros estaba la oficina de doña Lily, que a esa hora tendría que haber estado ya en su casa, ella intentó avisarme cuando me vió con la toalla en la cintura, pero la curiosidad fué mayor. Me vestí y salí a la cita ya descrita.

Me dijo que a partir de entonces (cuatro días atrás) no había tenido tranquilidad, que siempre había estado pensando en mí y que incluso en pensar en mi pene grande y grueso se había masturbado, y que el día anterior había planeado lo de la visita y que su deseo era que la poseyera, dado que se iba y no me causaría problemas. La tomé de las manos la acerqué a mí y le dí un beso suave, ella me correspondió con pasión, nos encaminamos al dormitorio, desaté la cinta de su vestido que estaba ajustada al cuello y la parte superior del vestido se deslizo a su cintura y como no llevaba sostén quedaron libres esos pechos hermosos, blancos, duros, de pezones marrón claro, los que se endurecieron al sentir mis labios y mi lengua chupeteandolos, le bese toda la redondez de sus senos desde su base hasta los pezones, la parte de abajo de sus pechos, y así estuve jugueteando con ellos por varios minutos, ella me desabotonó mi camisa, y empezó a lamer mis tetillas, terminé de quitar su vestido y quedó en una tanguita , y pude aprecar aquel cuerpo hermoso, que tanto tiempo escondió en aquella ropa holgada de trabajo, besé todo su torso y vientre, en tanto ella ya se había encargado de quitar mi pantalón ayudada de sus piés, al llegar a su cintura fuí bajando lentamente su tanguita, y mis labios y mi lengua haciendo el trabajo muslos abajo, hasta llegar a sus piés, le mordisquíe los dedos, la planta de su piés, sus talones, y empezé a la inversa por su otras extremidad hasta subir y llegar a su vulva, estaba tan humeda que le corrían uns gotas hacia su ano, con mi lengua me abrí camino por su ranura, en la entrada de su vagina hice círculos con mi lengua, y le inroduje la punta de mi lengua, ella estaba como loca, se contorneaba, gemía, suspiraba hondo, subí a su clitoris, robusto hermoso bien paradito lo apricioné con mis labios y mi lengua, lo lamí y sentí como vibraba en mi boca, en ese momento se arqueó, y le salió un prolongado ah, se vino en extraordinario orgasmo, yo seguí lamiendo y chupando su vagina, no sé por cuanto tiempo, solo reaccioné cuando nuevamente se vino en otro orgasmo, a mí ya me dolía la base de la lengua por el esfuerzo de la chupeteada, mi pene estaba inmenso, hinchado de la sangre en las venas por la excitación, super mojado de la cabeza, ella quitó mi boxer, y saltó erguido, ella lo tomó entre sus manos y me dice es inmenso, y demasiado grueso, se lo llevó a la boca, esa boca pequeña que a como pudo se lo metió, sentí su calidéz y sus dientes que suavemente lo mordían, chupeteaba la cabeza, recorría con su lengua la parte superior del tronco, luego lo hacía por abajo, empezó a lamer los testiculos, estaba como puta en celo, hubo un momento que yo no aguante, la tomé de la cabeza y eyaculé en su boca, empezó a tragar mi semen, era tanto que corría por la comisura de sus labios, no dejó de mamarlo, pero a esto yo ya la había colocado en un 69, llegó el momento que estábamos nuevamente a punto, la puse boca arriba, y coloqué mi pene en su vagina,ella me dice es demasiado grande, recuerda que son más de veinte años que no tengo sexo, con cuidado por favor, tomé mi pene y en lugar de introducirlo lo sobaba a lo largo de su ranura desde el ano hasta el clitoris, en un momento deslizé despacio mi cabeza en su orificio, entró sin problemas, la sacaba y la metía, ella con sus talones empujaba mi cintura para meterse otro poco, pero adrede me retiraba y la sacaba para seguir frotandola con su clitoris, volvía a entrar un poco más, y la sacaba la tenía desesperada, hasta que me dijo, por la gran puta la vas a meter o qué. poco a poco le introduje la mitad, no quería lastimarla, pues el canal era demasiado estrecho, pero ya con la mitad la elasticidad de su vagina se hizo presente y dada la cantidad de jugo vaginal y liquído mío, estaba hasta el fondo, sentía su pulso en las paredes vaginales que se contraían aprisionando fuertemente mi polla, luego de unos minutos mi pene se deslizaba con mucha facilidad en su vagina, salía y entraba con facilidad, sentía su clitoris rozar con mi tronco, luego se prendió a mi boca en un beso apasionado, sentí cuando mordió mis labios, y se vino de nuevo, cuando se quedo calmada, la coloqué de perrito y la penetré hasta el fondo, ahí sentí que entré en mi totalidad, ella me dijo que la topaba y sentía una molestía adentro, creo que le llegué a su matriz, la senté sobre mi para que ella calculara hasta donde podía llegar,luego cambiamos de posición siempre sentada sobre mi, pero de espaldas, así podía acariciar sus senos y el roze de su clítoris era mas intenso con la parte saliente del tallo inferior de mi pene, y se vino en otro orgasmo, mismo tiempo que la inundé de semen.

Dos días después mi madre la invitó a cenar a casa, y notificarle que su casa la habían reservado a una familia extranjera, en arrendamiento con opción a compra, ya que la intensión de ella era venderla pues no pensaba regresar a vivir a Guatemala, y que mientras se arreglaba todo se podía ir a vivir a uno de los apartamentos nuestros que en ese momento estaba desocupado. Ella se marchó tres días después, mi madre me avisó y me preguntó si yo podía ir a dormir es noche al apartamento para pdoer llevar llevar al aereopuerto a Lily pués tenía que estar ahí a las cinco de la mañana para el chek. Una tarde antes salímos a cenar con Lily, y luego a darnos la despedida a lo grande teníamos la noche completa, si la primera vez fué a gloria esa noche fué inolvidable, cuando ya habíamos tenido varios orgasmos, y estámos abrazados de lado, le dije a Lily, tu me pediste que te poseyera porque estabas fascinada de mi pene, ahora yo quiero pedirte algo, yo estoy fascinado de tu trasero y quiero penetrarte por el ano, hubo un silencio y al cabo de unos minutos me dijo, a lo que aguante te lo voy a dar, me empezo a mamar la pinga en un 69 yo le vesaba su vulva, y y mis dedos con gel, hacían el trabajo de dilatación, cuando estaba suficientemente dilatado, ella se colocó suficiente gel en el ano y luego me embadurno el pene completo, y se sento sobre mi y agarró el pene se lo colocó en la entrada del ano y poco a poco se lo fué introduciendo, se subía y bajaba despacio, yo sentía el calor de su conducto, luego empezó a hacerlo mas rápido y con ritmo y me dijo me está gustando, el pene estaba completo adentro, ella se culiaba en circulos y con mi dedo pulgar frotaba el clitoris que sentía mas gordito y grande, me pidió que le frotara más rápido el clitoris y ella acelero el movimeinto y de verla extasiada y a punto de su orgasmo me vino en su ano al tiempo que ella también se vino. Una hora antes de estar en el aereopuerto le dije que ya era hora de alistarnos y me dice con una sonrisa, esa hora le dije a Mónica (mi madre) pero es a las nueve la hora correcta. Me voy a ir con la vagina hinchada y tu te vas a quedar ordeñado pero esta es mi última follada, por eso quise tenerte a mi lado y fuí yo quién sugerió a tu madre el favor del aereopuerto, pues a nadie se le ocurriría que entre nosotros pasaría algo.

Pedimos por teléfono desayuno a un restaurante de comida rápida, y al cerrar el directorio telefónico cayeron unas fotografías ya amarillentas de esa que tomam fotografos ambulantes de al minuto, y ella las recogió por casualidad, y cuando vió las fotografías se puso pálida y nerviosa, y me dijo tú estás en estaas fotografías, me sorprendió verla así y le dije que sí y me dijo me podrías decir el nombre de estos chicos, le dije, el Mau, Beto, Calín, Rolo, memo, y el de aquí en medio soy yo, son amigos de infancia y jugabamos beisbol en el hipodromo del norte. Se me queda viendo y con una sonrisa que denotaba al mismo tiempo ternura, sorpresa y nostalgia me dice, quién lo iba a decir, el chico de los ojos azules, el pipo. Más sorprendido le pregunto y como sabe mi sobrenombre de chico, y conoce a mis amigos, y me dice soy la madre de Patricia, nosotras íbamos a verlos jugar, Mi hija por poco se muere de tristeza cuando ya no te vió, desde los ocho o nueve años te ha amado, porque aún te ama, un día antes de casarse me reveló que fueron novios y que se entregó a tí de 14 años, se casó hace tres años y enviudó hace dos. Me siento muy mal con todo esto que ha ocurrido tu no tienes la culpa de nada, fuí yo quien te sedujo,
pero quiero contarte algo cuando hablé por teléfono con ella y le comenté de la oferta de compraventa de la casa, y como todo lo puse a nombre de ella, me dijo: Ojalá se venda porque mi mayor deseo es volver a Guatemala un día y pedirle a Dios encontrarme con Pipo, verlo aunque sea solo una vez, y pedirle un hijo. Llevo conmigo la fotografía que nos tomaron en la cena navideña de la empresa, en esa foto está mi madre, seguidamente yo. mi esposa y Lily. no le voy a decir nada será sorpresa para cuando vengas a Guatemala, porque se la voy a poner en un sobre que va abrir hasta el llegar aquí, porque de lo contrario se viene antes.

Por eso los relatos titulados como coincidencias en la vida, la parte I está en clasificación primera vez, y luego les relataré la parte 3.
Datos del Relato
  • Categoría: Maduras
  • Media: 4.76
  • Votos: 29
  • Envios: 2
  • Lecturas: 3179
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