Hace unos meses me ocurrió una situación extraña en una playa llamada Tucacas en Venezuela. Yo fui con la familia, nos quedamos en un hotel en el pueblo, pero al amanecer de ese sábado yo me adelanté para apartar un puesto bueno (para nada porque no había mucha gente). Estaba sentado en la orilla, fastidiado, ya llevaba como una hora allí y observaba con frecuencia y con prudencia a mi costado y habían un grupo de jóvenes como amanecidos, con mucho escandalo; musica a full volumen y con actitudes muy exageradas, o discutían con fuerza o se reían a carcajadas... Eran 3 hombres y 5 mujeres, que oscilaban entre unos 25 a 35 años. A mi me llamó la atención una de ellas, tenía un nombre parecido a Nilda.
Esa playa es muy amplia, y tiene mucha vegetación, por lo que tiene muchas mini playitas escondidas y apartadas. Noté en varias oportunidades que ella (Nilda) se alejaba y se metía en la vegetación, es decir hacia otras playas. Eso lo repitió varias veces y luego comprendí que intentaba incitar a unos de los hombres que andaban con ellos, a que fuera con ella a las otras playas, pero ninguno de los hombres le prestaba atención, y cuando ella se retiraba ellos se burlaban y hacían señas con las manos de que estaba loca. Creo que todos estaban bajo los efecto de alguna droga. En una de esas se escucharon unos insultos y era ella, al parecer la molestia termino de empeorar porque cada hombre tenía sobre sus piernas a una mujer y ella estaba celosa de uno de ellos, y para remate la cuarta mujer en forma burlona y vulgar intentaba besarla y tocarle las tetas diciéndole que ella si no la iba a rechazar... Ella (Nilda) se retiró muy molesta y nuevamente se internó en la vegetación. Yo esperé unos 10 minutos y luego empecé a caminar por los alrededores como buscando caracolitos, y poco a poco me fuí metiendo muy cuidadosamente a las vegetación, buscandola, caminé y revise como en una costa de 500 metros, entraba y salia de una y otra playa, cuando entraba y salía de cada una era como muchos paraísos, apartados y encerrados con una tupida vegetación... Intenté e intenté hasta que finalmente la encontré. Estaba acostada boca abajo dentro de la vegetación (lo único malo de ese paraíso era la fuerte plaga o mosquitos) Estaba como dormida, con la boca un poco abierta, la verdad que al principio contemple su hermoso cuerpo con su diminuto bikini metido entre las nalgas, pero luego de un par de minutos me empecé a preocupar y fue entonces que me le acerqué y le llamaba, la movía, una y otra vez intentando despertar, le puse mi oreja en la espalda y se sentía respiración y latidos fuertes, acelerados, por los que decidir ir inmediatamente a avisarles a las personas con los que andaban, pero cuando me disponía a retirarme , siento una risa... Ella estaba fingiendo estar dormida. Yo le expliqué que estaba preocupado y ella de manera irónica me dijo "si claro tan preocupado que duraste parado un rato buseandome (viendome). Me dijo que si quería hacer realmente algo por ella entonces que le untara crema repelente de mosquitos. Bueno a partir de allí ambos nos excitamos tanto que que sin mediar palabras ella se quitó el bikini y se sentó en mi cara, yo le chupé todo, ella gemía se volvió como loca, me tomaba las manos y unos dedos me los chopaba y otros se los metía por el culo y la cuchara, yo me desvestí, pero ella me dijo que no la penetrara, por lo que seguimos manoseandonos un buen rato, hasta que ella misma me pidió que se lo metiera, pero que no acabara adentro. La penetré de distintas formas, ella entre gritos y gemidos creo que tuvo como 4 orgasmos, pero yo no me aguanté y le acabe adentro, cosa que le preocupó y se sentó en cunclillas y metiéndose los dedos para tratar de sacarse el semen. Luego de una media hora de descanso, repetimos un par de veces mas, pero esta vez le acabé en el culo.
Me dejó un número de teléfono para contactarla, pero era falso, jamás la volví a ver...