Esta historia, ocurrida a mediados del 2000, empezò por medio del chat. En un canal de casados, casi por casualidad, una mujer y quièn escribe comenzamos a conocernos. Con pocas preocupaciones ella, denotò cierta necesidad de nuevas emociones. Al principio solo fueron bosquejos acerca del sexo, pero con el correr de los dìas, el calor y las fantasìas subieron de tono. A lo escrito se sumo el telèfono, hasta que despues de un mes, decidimos encontrarnos. A pesar de haber intercambiado fotos, el encuentro personal fue mas que agradable. Me pasò a buscar por una esquina porteña en su auto y sin màs tràmite fuimos a un hotel de Palermo. Nunca pensè que me sorprenderìa tanto con una mujer madura. se cambiò en el baño con ropa mas que audaz, lo que me calentò instantaneamente. Me pidiò que le muestre la pija. Se relamio. Y me pidio que me pajeara. Aprovechando un espejo que habìa en la pared ella se dio vuelta, se inclino apenas, y mirandome por alli, empezo a masturbarse. Cuando el calor era intenso, empezo a pasar la lengua por el espejo, descubriò sus pechos, los que refrego sobre el mismo, humedeciendolos , con su propia saliva. A todo esto, mi pija, lubricada, casi al momento,latia. Ella, ya mas que mojada, me dijo...veni... Y aun inclinada abriò su concha sutilmente con una mano..jugò con su dedo, al que me exigiò saborear, antes de pedirme con tan sòlo una mirada que la penetre dice.Obviamente mi pija estaba dispuesta, y entrò toda, hasta el fondo. Ella cerrò las piernas y me pidio que me mueva. Asi apretada, mi pija luchaba por entrar y salir, y si bien no estaba comoda, sus movimientos, me hacian calentar mas que bastante. A todo esto sus pechos reventaban en el espejo, que no dajaba de chupar...Instantes despuès girò, quedo frente a mi, abriò la boca y me pidio que le lamiera la lengua, al tiempo que subìa sus piernas, para rodear mi cintura, lo que agilizò los moviemientos. El orgasmo mutuo no demorò. Y recuperando el aire, me dijo...esto es lo yo necesito. Sabìa que vendria por màs. Fue a ducharse, y me pidio que haga lo mismo. El 69 posterior al baño, duro 45 minutos. fue dulce , suave, candencioso, sabroso, exquisito, de los mas perfectos que hubiese experimentado. En un momento pensè, que era una mujer ideal para un trio, pero no se porque jamàs me animè a proponerselo. De todas maneras lo mejor estarìa por venir. Me sorprenderia de varias maneras. ..
Y hay tanto por contar...
Seguro habrà una pròxima vez...