En el dia, mientras duermo en mi ataud, sueño con la muerte. Por momentos siento que voy cayendo en un profundo abismo, pero cuando me despierto me doy cuenta de que aun sigo en este patetico mundo decadente.
Una noche en la que me encontraba muy aborrecido caminando por el cementerio como un zombie sin rumbo me encontre con una hermosa mujer. Ella lloraba sin consuelo, pues habia perdido a su esposo en un accidente de autos. A mi nunca me habia interesado los sentimientos de las personas pero senti la genuina necesidad de conversar con esta dama. Ella me hablo del hombre que habia sido su gran amor. Me mostro una foto que llebava en su cartera y me dijo que nunca podra amar a otro como lo habia amado a el.
Cuando llegue a mi casa me sente sobre un viejo mueble y contemple un reloj sin baterias que tenia en una pared. Para mi el tiempo se habia detenido, pues yo lo controlaba con mi contemplacion. De manera burlona la noche pasaba sin que la pudiese detener y el sofocante sol se asomaba por mi ventana. Me acoste en mi ataud y me despedi de este mundo. Ahora me tocaba morir una vez mas para esperar mi resurreccion al despertar.
Mientras dormia soñaba con el llanto de aquella mujer que lloraba la muerte de su amado mientras que una alegria invadia mi ser decadente. Sentia que habia un fuerte enlace entre yo y ese hombre que no conocia. Lo unico que tenia en mi mente era el hermoso rostro que habia en esa foto...
Desperte cuando entraba la noche. Habia despertado a mi mundo obscuro y de relojes sin baterias. De manera extraña me sentia un poco avergonzado por ese sueño que habia tenido, aunque por otro lado yo sabia que esa mujer profetizaba un falso amor. Cuando alguien ama de verdad no permite que la muerte se interponga y yo estaba enamorado de ese hombre sin podermelo explicar.
Llegue nuevamente al cementerio y me pare frente a la tumba en donde me habia encontrado con aquella mujer. Lei una y otra vez el nombre de ese hombre: "Julian, Julia..." Algo se poseciono de mi y comenze a tocarme las tetillas con la punta de los dedos. Mi respiracion era tan fuerte que tuve la certeza de que los muertos podian despertar. Al pensar en eso me imagine que Julian despertaba de la tumba y me besaba profundamente. Mire para todas partes y no vi a nadie. Me moleste al ver que aquella hipocrita mujer no se encontraba por el area, pues entonces comprobe que no eran especulaciones cuando dije que aquella mujer profetizaba un falso amor.Me arrodille frente a la tumba y dije: "No te preocupes Julian, yo si te amo..." Comenze a desenterrarlo con mis uñas. No se cuanto tiempo estuve, pero por fin tenia su ataud de frente. Lo abri de inmediato y lo que encontre fue a un hombre que llevaba algunos meses muertos y que no olia nada bien. "Maldita mujer, no me habia dicho que llevabas algun tiempo aqui encerrado, pero no te preocupes, con un poco de perfume arreglamos, mi amor..."
Me las arregle para llevarme a mi amado Julian a mi casa. Cuando lo desnude me di cuenta de que los gusanos se habian comido su pene por lo que los maldije con toda mi alma vampira. No tuve mas opcion que tratar de penetrarlo. Cuando lo intente se me hizo totalmente imposible, ya me estaba lacerando el glande con su hermoso ano reseco. Lo remoje en vinagre y lo intente nuevamente; esta vez tuve exito. Fornique toda la noche con este hombre, que aunque ya no era tan hermoso como en la foto, era mi amado. Cuando le saque el pene, detas de el salieron cientos de gusanos. "Que travieso eres, Julian. Ahora somos padres..." Despues de aquella noche duermo con mi amado en mi ataud. YO SI LE PROFETIZO UN VERDADERO AMOR. Todas las noches le unto perfume y fornicamos como locos en la obscuridad. Ya hemos tenido miles de gusanitos y a todos los amamos por igual.
Bueno Lorelay, este cuento puede carecer de sentido para personas de un mundo tan inferior como el tuyo. Lo unico que te puedo decir de todo esto es que yo no tengo la intencion de escribir para exitarte, yo solo queria compartir mi hermosa historia de amor, mas conmovedora que la de Titanic.