Aqui en Cali, hay un club cerca a la ciudad, allí he vivido una experiencias agradables, esta es una de ellas.
Acostumbro con mi novia ir de vez en cuando a nadar, hacer deporte y broncearnos. En nuestra llegada dejamos nuestras cosas debajo de un árbol, y aprovechando el sol matutino empieza todo el placer de ver a mi novia quitarse la blusa, y dejar la forma de sus senos en el sostén, no muy grandes, pero son algo excepcional, luego sigue su pantalón, y me deja al descubierto una tanga que cubre su redondo trasero, solo al ver esto mi pene empieza a endurecerce, de tal forma que aún no puedo quitarme la pantaloneta porque una erección se alcanza a notar.
Mi novia sabe muy bien como seducirme, luego de esto tendemos una toalla, y allí se acuesta, en este instante me pide que le aplique el bronceador, claro sin más preámbulos empiezo por su linda espalda, desabrocho sus bragas y manos a las obra, más que aplicarle el bronceador, doy un masaje amoroso y pasional, luego quito su tanga, y ella queda en una mini, que deja al descubierto sus grandes y redondas nalgas, al ver esta escena mi erección es más fuerte, solo el tocar sus nalgas, pasar mis manos muy reservadamente entre estas, y tocar un poco su linda vagina, me fluye un poco de lubricación, estoy realmente muy excitado, y ella también, luego me toca el turno a mi, me acuesto boca abajo en la otra parte de la toalla, y ahora mi novia me quita la pantaloneta, me alcanza a palpar el miembro, que en estos momentos está bien tieso, y caliente, me aplica el bronceador y nos aguantamos unos 20 minutos de calentura, sin más nos duchamos, y a bañar un rato, yá en la piscina nos besamos apasionadamente y ella me cruza sus hermosas piernas alrededor, como especie de candado, dejándo a su conchita justo en frente de mi gran pene que en estos momentos empieza a tener contacto con ese gran monton que posee mi novia, mis besos y sus besos, nos indican que el momento a llegado, nuestros labios juegan y se entrelazan y yo siento su respirar acelerado, y unos suaves movimientos que nos indican que el momento está por lelgar.
Poco a poco voy acariciando su espalda, su vientre, y empiezo a bajar hasta su lindo culo, que es hermoso y bien esculpido, nuestro calor interno no acepta más y yo le acaricio por encima su bultito, mientras ella con sus suaves dedos toca mis testiculos, bien llenos y dispuestos, me acomoda el pene y lo siente fuerte y duro, mientras me susurra al oido que quiere sobarselo directamente en su chochita, sin más me lo descubre por un lado y yo corro su tanguita hacia un lado y empiezo a sobar mi verga con su clítoris, sintiendo su vellos rizados, comerme a besos su concha, sin más trato de metérle la punta en su estrecha cuca, y apenas por la posición y el lugar puedo meter entre ese lindo baulcito, la cabeza de mi pene, que apenas roza con sus labios, pero en este momento necesitamos estar en un lugar más cómodo. Nos dirigimos a una de los vestieres amplios, cerramos y empieza nuestro show, de una y sin aguantarme, la apreto contra la pared y le beso su boca, su cuello y acaricio su espalda, descubro sus senos, son unos lindos pechos con unos pezones a punto de reventar, (Dios esto es algo magnífico), rápidamente me dirige mi cara hacia sus pezones, que primero los beso y saboreo, mientras con una mano apreto fuertemente su trasero, succiono, y chupo sus tetas como queriendo metérmelas a mi boca, mi novia en estos momentos disfruta tanto como yo, después de este instante me dirijo más abajo, recorriendo con mis besos y mi lengua cada parte de su piel, me encanta darle besitos en su abdomen tan plano y seductor, meto mi lengua en su ombligo simulando ser su vagina, hasta que ella misma de un bajón, me agacha más hasta quedar frente a su taguita que en estos momentos cubre un poco su monte, aprecio unos vellitos que salen por los lados y me excitación se hace más intensa, rápidamente bajo la cabeza para besar sus piernas sus rodillas, y acariciar sus nalgotas, ella se encuentra desesperada y vuelve y me sube hasta su gran niña, sin más espera con mis dientes bajo su tanga y beso su entrepierna, lamo por los lados de su vagina, y pongo mi lengua plana para deslizarla desde su pequeño orificio anal, subiendo por su huequito, y hasta su clítoris, en el cual me detengo y beso muy cariñosamente, lo beso, lo chupo, lo lamo, sobo mis mejillas en su lindo vellos rizado que tanto amo, mientras he estado haciendo todo esto mi novia no hace sino acariciarse sus senos y apretarlos con fuerza, además de agarrarme fuerte la cabeza como queriendo meterme allí, puedo oler su aroma de su vagina y trato de mantener el control, ahora es ella quien me toma y me besa en la boca y directamente baja hacia mi pene que en estos momentos posee unas venas brotadas y está muy ancho, primero me lame los testículos y los chupa como queriendose quedar con ellos en su boca, su suave lengua juegas con ellos mientras los ha aprisionado uno a uno con sus labios, también ella pone su lengua plana y ahora me sube y me baja por el centro de los testiculos hasta subir al esta gran cabeza que está bien lubricada, uqe ha dejado huella de esto en mis interiores, y está dispuesta a enterrar, con la punta de la lengua, acaricia mi cabeza, y me da muchos besos, hasta que se mete esta y la chupa, luego al no aguantarme le digo que me lo chupe todo, que se introduzca mi miembro en su boca, ella asiente y de un solo chupon le entra casi todo, lo chupa como si estuviera bebiendo, y con gran satisfacción, me acaricia con sus manos los testículos, de vez en cuando lo saca de su boca para sobarselo en sus senos, y hacerme la paja, como me gusta, se unta saliba en sus manos y me frota tanto el pene que siento que ya me vengo, siento esa sensación que se lo hago saber y ella en estos instantes se lo mete a la boca, lo apreta con sus labios y sube y baja rápidamente, cada vez más rápido hasta que yo no me aguanto y me vengo dentro de sus boca ella sigue con sus movimientos, y tragándose toda mi caliente leche, me sigue apretando los testiculos queriendo escurrirme todo, pero aún dejo algo para lo que sigue.
En este instante mi novia, no se aguanta más y con sus dedos se acaricia su clítoris, hasta que empiezo nuevamente a besar y meter mi legua tratándo de mantenerla lo más rígida posible en sus cavidad vaginal, puedo apreciar el calor de esta, lo roja y mojada que está, meto y saco la lengua, mientras con mi mano sobo rápidamente su clítoris, mi nocia está a punto de reventar, cada vez gime más duro y con una mano apreta la mía que soba su clítoris, en ese preciso instante su linda cara deja ver un expresión de un gran orgasmo, que dura bastante, por que yo sigo comiendome su vulva, con mi boca y pruebo su dulce manjar que me ha regalado, en este instante de gran satisfacción salimos a tomar aire y comer un poco de helado, nos besamos y ambos sabemos que esto no termina allí. Luego les escribo la segunda parte de este real momento.