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Se hicieron con mi hermana, el alcohol y las drogas es lo que tiene ..

Se hicieron con mi hermana, el alcohol y las drogas es lo que tiene ....

 

 

Esta es una de las muchas fantasías que tengo y que quizás algo de realidad exista. Algún dia lo sabre.

 

La historia tiene lugar en el restaurante que regentamos mi familia, Yo solo trabajaba en cocina los fines de semana, es una bocateria donde los sábados suelen venir grupos de jóvenes a cenar.

Todos amigos, clientes y conocidos, ya que la bocateria esta situada en un pueblo de tan solo 1500 habitantes donde todo el mundo se conoce.

 

Mi nombre es xxx, y el de mi hermana Cari, ella es una chica de 38 años, bajita y regordeta, con grandes pechos (110) ojos azules, rubia con el pelo corto, guapa de cara, de carácter fuerte y quizás un poco chulita y confiada en si misma, cree que puede controlar cualquier situación.

Entre semana trabaja en una gasolinera por las noches, y los fines de semana en la bocateria, es muy conocida en el pueblo.

 

Un sábado normal, cuando ya habíamos casi terminado, solo quedaba una mesa en la que estaban tomando ya el café cuatro chavales de los cuales uno es del pueblo y “amigo” de mi hermana, otro era cliente ocasional, ademas paso una noche con mi hermana en urgencias de un hospital hacia algun tiempo atrás por que los dos habian llevado a un familiar y se encontraron alli pasando la espera juntos por lo que tambien tenia confianza con el, los otros dos son amigos de un pueblo cercano, ellos eran amigos del gim donde solian entrenar los cuatro.

 

Juan Carlos, que es el chico del pueblo tiene 22 años, mas o menos 180 fibrado aunque delgado, Abel que es el chico con el que paso la noche de espera en urgencias, media mas de 1.90 y la verdad tiene un cuerpo musculoso pero no tanto como un culturista, los otros eran mas altos que el y los dos mas fuertes y grandes que el, ciclados seguro.

Eran los típicos chicos de gim que se cuidaban entre semana y el fin de semana alcohol fiesta, tías y drogas.

 

Yo ya había terminado, y los otros empleados ya se habían marchado, yo en la barra terminaba de recoger y ayudar a mi hermana, cuando Juan Carlos se acerco y le pidió a mi hermana:

 

“ Cari, ahora que ya no hay nadie, te importaría que fumáramos?”.

 

Mi hermana, respondió:

 

“ Dame 10 minutos y cierro la puerta así podéis fumar tranquilos “.

 

Yo me quede intranquilo por que desde la barra veía como Abel, solo hacia que mirar a mi hermana y se fijaba mucho en sus tetas, en varias ocasiones cuando ella se acercaba a la mesa, les solía hacer comentarios a los demás sobre el tamaño de las tetas, lo supongo por que con las manos simulaba que se las tocaba, y los demás se reían.

 

Mi hermana cerro las puertas y la iluminación exterior y se acerco a la mesa para dejarles un cenicero, entonces Juan Carlos le pidió unos cubatas y le pidió que se tomara algo con ellos. Ella se acerco a la barra me pidió que le preparara las 5 copas y me dijo:

 

“ Puedes irte, esto lo tengo controlado, cuando tomen las copas y me pagues ya cerrare yo”.

 

Yo como eran conocidos, le puse las copas, ella las cogió junto con la factura de la cena, se encendió un cigarro y se dirigió a la mesa. Rápidamente Abel le hizo un sitio a su lado se puso de pie y puso una silla, indicándole con la mano que se sentara a su lado, cuando estuvo a su altura se notaba mucho su diferencia de altura y constitución, la cabeza de mi hermana no le alcanzaba la altura de sus pectorales, cuando ella estaba ya sentada, me acerque yo y les dije;

 

“ bueno chicos, me marcho no terminéis tarde, que Cari querrá descansar”.

 

Juan Carlos, respondió irónicamente.

 

“ Que va tío, esta noche se vendrá con nosotros de fiesta “

 

Abel la rodeo por la espalda los dos sentados y me dijo:

 

“ no te preocupes, que la vamos ha cuidar bien”

 

Los cinco se reían.

 

Yo, entonces cogí mi chaqueta, y me fui, aunque con mis dudas por si estos tios se pasaban o algo, no me hacia gracia que se quedaran los cinco allí solos.

 

Pero mi hermana también me dijo que no me preocupara, que eran de casa.

 

Salí del restaurante y me dirigí al coche, pero al llegar a el, decidí esperar un rato por si acaso, no me gusto las confianzas de Abel rodeandole con su poderoso brazo la espalda de mi hermana cuando me despedí de ellos.

 

Mi hermana no tiene costumbre de beber, asi que con un par de cubatas esta casi borracha, pero yo le puse su copa con poco alcohol.

 

Desde mi coche solo podía ver la ventana del restaurante, pero no se veía el interior por que es una ventana alta, y solo puedes ver si estas de pie frente a ella. Pasados mas de 30 minutos, pude ver a Juan Carlos de pie, quitándose un jersey y quedándose en camiseta, una camiseta negra ajustada con la que podías distinguir su cuerpo fibrado, pero me extraño el echo de que se dirigiera a la ventana observara el exterior y corriera la cortina, de esa forma era imposible ver lo que pasaba en el interior.

 

Yo seguí esperando un poco mas, y pasados unos 20 minutos, vi salir a los otros dos chicos, me escondí en mi coche por que ellos tenían el coche aparcado a unos metros del mio, podía escucharles hablar, los dos se dirigieron al coche, y se pusieron a mear detrás del maletero, mientras riéndose escuche decir a uno de ellos:

 

“ tío, tu crees que la Cari se dejara?”.

 

El otro respondió:

 

“ tío ya conoces Abel, acabara follándosela fijo, jajaja “.

 

Se subieron al coche y se fueron, yo al oir esto, no pude aguantar allí esperando, así que a través de una puerta trasera del restaurante entre sigilosamente y me escondí en el altillo donde tenemos todas las cajas de bebida, y desde donde puedes ver todo el comedor.

 

Una vez allí, podía ver con total claridad a los tres sentados, Abel seguía hablando con mi hermana, pero sin dejar de rodearla con el brazo, mientras Juan Carlos le pidió:

 

“ venga Cari, invítanos a la ultima”.

 

Ella, respondió:

 

Ok, pero la ultima vale?, que yo estoy cansada.

 

Abel le respondió:

 

Pero tu ponte una también ok?:

 

Ella dijo :

 

Me pondré una pequeña para acompañaros, aun no he terminado esta.

 

Juan Carlos dijo:

 

Vale, pero tienes que acabarte esta y la que te pongas, si no no vale, jajaja.

 

Cuando ella se dirigió a la barra, me sorprendió que Abel cogiera el baso de mi hermana, y vi como ponía unas gotas de una pequeña botella en su baso, dejándolo de nuevo donde estaba.

Juan Carlos riéndose, cogió también su baso, y escupió dentro.

 

Yo no sabia que hacer, por un lado quería bajar y echarlos, pero por otro me excitaba el momento y lo que estaba ocurriendo, así que decidí quedarme y ver hasta donde estaban dispuestos a llegar.

 

Cari se quito la camisa que usamos todos como uniforme quedándose con una camiseta de tirantes y el pantalón baquero, la camiseta ella no se había dado cuenta pero le marcaba mucho su pezones y se distinguían aun mas el tamaño de sus tetas, Abel no dejaba de mirarla haciéndole gestos a Juan Carlos y sobándose el paquete. Al acercarse de nuevo a la mesa, Abel le pidió que se sentara de nuevo a su lado, a lo que mi hermana respondió:

 

“ no, prefiero sentarme aquí, hace mucha calor”,

 

Abel le respondió riéndose a la vez que levantándose:

 

“ y mas que vas ha tener Cari, jajaja “.

 

Al levantarse se acerco a ella y estando ella sentada, el paquete de el casi se roza con la cabeza de mi hermana, el tocándose el paquete le dijo:

 

“ voy al baño Cari, me acompañas”.

 

Ella respondió:

 

“ si para sacudírtela, jajaja “ .

 

El se rió, y se fue al baño, quedándose solos ella y Juan Carlos el cual le pregunto:

 

“ te gusta Abel”.

 

Ella respondió:

 

“Me gustáis los dos, pero sois muy jovencitos para mi, jajaja”

 

Juan Carlos de nuevo le pregunto:

 

“ pero te lo harías con el?”.

 

Ella respondió:

 

Sois demasiado grandes para mi, si lo tenéis todo igual acabaríais haciéndome daño”

 

Al parecer la copa con la droga que le puso Abel y la saliva de Juan Carlos ya estaba haciendo efecto, ella se encendió un cigarro, y Juan Carlos sacándose del bolsillo un trozo de “chocolate” le dijo:

 

Te importa que nos hagamos uno antes de irnos?”.

 

Cari respondió.

 

Venga vale, pero os lo fumáis acabamos las copas y nos vamos, pero al tiempo que decía esto no dejaba de reírse.

 

Juan Carlos sentado comenzó a hacer un porro, mientras escuche el sonido de la cisterna, y vi salir a Abel del baño, dirigiéndose a la mesa, también se quito el polo quedándose en una camiseta también negra de tirantes, esta vez si se veía el super cuerpo de este tío.

 

Se sentó en la mesa, dio un sorbo de su copa, y le pidió a Juan Carlos que le pasara el porro.

 

Entonces fue Juan Carlos quien se levanto, y dijo:

 

“ ahora voy yo a mear, haber que hacéis eh?”.

 

Mi hermana siguiendo con la broma, respondió mirando a Abel:

 

“ y a ti que te importa, verdad Abel? jajaja”

 

Juan Carlos dirigiéndose al WC, no paraba de reírse.

 

Estaban solos entonces Abel y mi hermana, cuando el le pregunto:

 

“te puedo hacer una pregunta indiscreta?”.

 

Ella respondió:

 

“Tu pregunta, yo ya veré si respondo o no”.

 

Abel riéndose le pregunto:

 

“ cuanto tiempo hace que no te has tirado a un tío”.

 

Cari respondió:

 

“ uy, ni me acuerdo, no ves que con el trabajo casi nunca tengo tiempo?”.

 

El siguiendo con la conversación y apoyando sus codos en la mesa mirándola fijamente le pregunto de nuevo:

 

“ como te gustan los tios?”.

 

Ella, ya mas colocada, y mas suelta, le respondió:

 

“ pues como vosotros, pero con unos añitos mas y mas bajitos jajaja”.

 

El insistió, y de nuevo pregunto:

 

“ entonces, quieres decir que te lo harías conmigo, por ejemplo”.

 

Ella respondió:

 

“ jajaja, eso nunca se sabe”.

 

Y al mismo tiempo pregunto:

 

Que le pasa ha Juan Carlos que no sale? Tendré que ir a ayudarle?.

 

Abel el se rió y le dijo:

 

“No te preocupes, es que le he dejado una rallita”.

 

Ella respondió:

 

“ joder como sois, sin drogas no sabéis divertiros”.

 

Juan Carlos entonces salio del baño, y dirigiéndose a la mesa Abel le dijo:

 

Tío, a Cari le molamos, pero tiene miedo de que le hagamos daño.

 

Juan Carlos riéndose respondió:

 

“ joder Cari, todo es probar”.

 

Ella de nuevo riéndose les dijo, venga chicos, vamos ha ir acabando que esta copa me esta haciendo efecto.

 

 

Abel respondió:

 

“Ok, lo que te pasa es que no te atreves”.

 

Mi hermana dijo:

 

que no me atrevo a que?

 

Abel respondió, a echar el polvo de tu vida conmigo.

 

Ella se levanto, y dando una vuelta sobre si misma, mientras Juan Carlos se sentaba de nuevo, le dijo:

 

Pero tu me has visto bien?, si con tu cuerpo puedes follarte a la niña que tu quieras.

 

El se levanto, y se acerco a ella mirándola, se puso a su lado, y le dijo a Juan Carlos, que les hiciera una foto. Abel la rodeo de nuevo con el brazo izquierdo acercadola a el, y sonriendo al mismo tiempo que le miraba las tetas, que le veía casi enteras por el escote de la camiseta de mi hermana.

 

Ella miraba hacia Juan Carlos, riéndose, mientras Abel rodeo con su brazo por encima del hombro a mi hermana, dejando caer la parte inferior de su brazo y sin que mi hermana reaccionara su mano descansaba sobre uno de sus pechos . El le guiñaba un ojo a Juan Carlos, sacandole la lengua.

 

Entonces mi hermana se sentó de nuevo, quedando tras de ella Abel, el cual le dijo:

 

“ Cari, te atreves a medir quien de los dos tiene la polla mas grande”. Sin dejar de reírse.

 

Ella, le respondió:

 

“ cobarde, a que no me la enseñas?”.

 

Mi hermana ya se había bebido las dos copas, y casi no se tenia en pie.

 

Juan Carlos, se reía, mientras estaba subiendo al facebook la foto de mi hermana con Abel tocándole la teta, y sacando la lengua con el siguiente comentario:

 

“Abel y yo, esta noche follamos con Cari, alguien se apunta? jajaja”.

 

Abel respondiendo a mi hermana, le dijo:

 

“Si te la enseño, tu me enseñas tus tetas?”.

 

Ella respondió:

 

“Vale pero tu primero”

 

Juan Carlos no dejaba de recibir comentarios de sus colegas por el facebook, Alexis que era uno de los dos que se fueron, le envió un sms, preguntándole:

 

“Tío, os la estáis follando?”.

 

Juan Carlos respondió:

 

“Aun no, pero Abel no creo que tarde mucho. Jajaja”.

 

Alexis respondió:

 

“Tío voy para ahí, abrirme cuando llame ok?”.

 

Juan Carlos respondió:

 

Ya te dije que no os largarais, pero vente, que yo te abro.

 

Mientras tanto, mi hermana sentada en la silla, desafiaba con la mirada a Abel, el cual, sin decir nada, se quito la camiseta, y le dijo:

 

Te gusta lo que ves verdad?, pues venga, bájame la bragueta y sacamela”.

 

Poniéndose muy cerca de mi hermana, Cari sin pensarlo dos veces y riéndose, acerco sus manos a la cremallera del pantalón de Abel, pero al hacerlo, vio el descomunal paquete de Abel, así que levanto la cabeza y mirándole a la cara le pregunto:

 

“ que te pasa?, te has puesto cachondo?”

 

Abel le respondió:

 

“Bájame la cremallera y lo ves.”.

 

Ella intento bajarla cuando el se desabrocho el cinturón, le aparto las manos y se bajo el pantalón hasta los tobillos, quedando solo en boxer donde se podía ver el tamaño de su pollon.

 

Abel entonces acercando de nuevo su paquete a mi hermana, le dijo:

 

“venga, sacala “,

 

Al mismo tiempo le decía a Juan Carlos:

 

“Tio ponte al otro lado, y que nos las mida”.

 

Mi hermana entonces, le bajo el boxer a Abel saliendo casi a presión su polla que casi le da en toda la cara al sacarla. Abel se reía y le dijo:

 

“Seguro que cuando me enseñes tus tetas, crecerá un poco mas”,

 

Juan Carlos que se puso al otro lado de la silla, se bajo los pantalones, y el slip, y aunque el la tenia flácida se le notaba que también tenia un polla grande, no tanto como Abel.

 

Abel al ver que Juan Carlos no estaba empalmado, le dijo a mi hermana.

 

“ bueno tía, creo que ahora te toca a ti, por que si no Juan Carlos no se empalmara para que nos la midas “

 

Juan Carlos le dijo a mi hermana.


“Yo si me la tocas, crecerá en segundos jajaja “.

 

Mi hermana, se levanto y les dijo, darme dos minutos, por que si no voy al baño, voy a terminar orinandome encima, a lo que Juan Carlos le respondió:

 

“ sabia que te rajarías “.

 

Y Abel, le dijo a Juan Carlos:

 

No hombre, déjala que mee, después seguiremos, nos ha prometido mostrarnos las tetas.

 

 

Mi hermana medio borracha se levanto, y se dirigió al baño, quedándose solos Abel y Juan Carlos.

 

Juan Carlos entonces le pregunto a Abel:

 

“Tío de verdad que te apetece hacer algo con Cari?”.

 

Abel respondió:

 

“Voy a reventar a esta gordita antes de irnos de fiesta chaval, y tu?”.

 

Juan Carlos respondió:

 

“Joder si se deja, encantado. Jajaja, por cierto he subido la foto al facebook, y no veas la peña como esta comentando. Alexis me ha dicho que vendrá ahora, el también quiere follársela”.

 

Abel le dijo:

 

“ok, pero tenemos que andar con cuidado, por que ella podría asustarse y jodernos el plan”.

 

Juan Carlos respondió.

 

“No te preocupes, ya le he dicho que me llame cuando este en la puerta y yo le abriré”.

 

Los dos se quitaron lo que les quedaba de ropa, quedándose solo con las zapatillas y los calcetines, y se sentaron. Ha Abel no le bajaba el tamaño de su polla, mientras esperaban los dos se reían de los comentarios que sus colegas iban dejando en el facebook.

 

Mi hermana salio entonces del baño, se había lavado la cara y se mojo sin querer la camiseta, por lo que sus tetas ya podían casi verse tras ellas, no llevaba sujetador.

 

Juan Carlos al verla salir le dijo:

 

“ joder Cari, nunca me había dado cuenta de lo buena que estas tía”,

 

Se levanto y le dijo de nuevo:

 

“Mira como me has puesto” mostrandole la polla esta vez ya dura.

 

Ella, se sentó de nuevo y se saco los dos pechos por encima de la camiseta, al mismo tiempo que les decía:

 

“Bueno, ya las habéis visto, creo que ya deberíamos pensar en irnos”.

 

No termino la frase cuando Abel se puso de pie, detrás de la silla de mi hermana, y cogiéndola de los sobacos, la levanto diciéndole:

 

“Déjame verlas bien anda “

 

Ella entonces se dio la vuelta bruscamente, y al darse la vuelta el pollon de Abel le golpeo por encima de su ombligo, El se rió y le quito la camiseta, diciéndole:

 

“ umm. Ahora si las veo, tenia razón menudas tetas tienes”.

 

Sin dejarla reaccionar se agacho le cogió por las mandíbulas y le dio un beso metiendole toda su lengua. Ella al terminar de morrearla, se sentó de nuevo, y dijo :

 

“ creo que estamos llegando un poco lejos, no?”.

 

Pero el solo respondió:

 

“ es demasiado tarde, Cari “.

 

De un golpe la sentó en la silla, Juan Carlos se puso por detrás y sujetándola de los hombros impedía que se levantara, y Abel con una mano se cogió la polla encanrandola a la boca de mi hermana y con la otra la cogió de la cabeza inclinandola hacia su polla, y comenzó a darle con la polla en la cara, ella ya no se resistía y le dijo:

 

“Abel ten cuidado ok?”.

 

El no respondió, se limito a abrirle la boca con los dedos y meterle su capullo dentro al mismo tiempo que le decía:

 

“ si me corro en tu boca no te follare, así que cometela bien”.

 

Juan Carlos ya no era necesario que sujetara a mi hermana, ella solo podía tragar aquel pollon impresionante, así que Juan Carlos se sentó de nuevo a seguir tomando su copa, mientras miraba las tetas de mi hermana, y los gestos que le hacia Abel.

 

Cuando ya llevaba comiéndole la polla un buen rato mi hermana a Abel, sin dejar de follarle la boca este le dijo:

 

“Tía, creo que voy ha tener que follarte, por que no hay manera de que me corra”.

 

Miro a Juan Carlos y le dijo:

“ Tío, ayúdame a sacarle los pantalones”.

 

Le saco la polla de la boca la apoyo inclinada hacia adelante en la mesa, aplastandole la cara en la mesa con una mano y con la otra desde la cintura presionándola para que no pudiera moverse. Juan Carlos por detrás le bajo los pantalones a mi hermana dejándola con el tanga puesto.

 

Abel se puso por detrás de ella, pero estaba tan bajita, que el tenia que agacharse demasiado, le puso la polla en la espalda, y la dijo:

 

“ bueno así no voy ha poder follarte así que tendré que ponerte encima de la mesa”.

 

De nuevo la cogió de los sobacos por detrás y la levanto diciéndole a Juan Carlos:

 

“Quitaselo todo tío”.

 

Juan Carlos por delante le termino de bajar los pantalones, la zapatillas, y el tanga. Mi hermana ya estaba totalmente desnuda y enormemente cachonda.

Entre los dos le dieron la vuelta, Abel se agacho y cogiéndola por detrás de las nalgas, la subió a la mesa le separo las piernas y manoseo su coño que ya estaba mojado diciéndole:

 

“ ahora si vas ha disfrutar, como le había dicho a tu hermano jajaja”.

 

Sin decir nada mas, la cogió de las piernas tirando hacia el y poniendo las piernas de mi hermana en sus pectorales, acerco su capullo a el coño de mi hermana y poco a poco se la fue metiendo, ella comenzó a gemir, pero al mismo tiempo intentaba apartarlo de ella.

 

Juan Carlos, en ese momento no lo pensó, y subiéndose a la mesa, se sentó sobre sus tetas y comenzó hacerle una cubana, mientras le metía los dedos en la boca, tras esto le acerco la polla a su boca, y casi al mismo ritmo que Abel le follaba la boca.

 

Juan Carlos estaba tan excitado, que no aguanto mucho tiempo, y sin decir nada, se corrió en la boca de mi hermana, mientras su semen se salia por los lados de sus labios. Se levanto inmediatamente y se fue al baño.

 

Abel entonces le dijo a mi hermana:

 

“Quieres ponerte encima de mi?”.

 

Mi hermana no respondió. Así que el sin sacarle la polla la cogió de nuevo por las nalgas se sentó en la mesa, y se tumbo boca arriba en esta posición a mi hermana le entraba todo la polla de Abel, el cual al ver que ella no podía casi moverse la rodeo con su brazos por la espalda, y reclinando sus piernas apoyando sus pies en la mesa, empezó a follarla como nunca había visto, la cabeza de mi hermana estaba apoyada en el hombro de el y se la veía disfrutar al mismo tiempo que se quejaba de sus embestidas, Abel no decía nada.

 

Mientras tanto Juan Carlos se vistió, y le sonó el teléfono, era Alexis, que estaba en la puerta, el discretamente le abrió y al entrar Juan Carlos le dijo:

 

“No digas nada “.

 

Alexis, respondió:

 

“joder, tu ya te la follaste?”.

 

Juan Carlos respondió:

 

“A mi me la comió, paso de follármela”.

 

Alexis le dijo:

 

“joder yo le daba por el culo”, al mismo tiempo que se tocaba el paquete.

 

Abel al volver su cabeza entre envestidas, vio a Alexis, y mostrandole el culo le dijo:

 

“Alexis, tío dale”.

 

Mientras le metía los dedos por el agujero del culo de mi hermana.

 

Alexis, se bajo los pantalones, y los calzoncillos, subió a la mesa, y puso un pie en cada lado de los cuerpos de mi hermana y Abel, comenzó a pajearse hasta que su polla estaba bien dura, entonces se agacho, y mientras Abel sujetaba a mi hermana Alexis escupió en su culo, se agacho y poco a poco fue metiéndosela por detrás, Abel paro de cabalgar para que entrara bien, mi hermana no podía ni moverse solo salieron de su boca lo siguiente:

 

“ por favor el culo no, me vais hacer daño”.

 

Pero Alexis fue metiendola poco a poco hasta que de nuevo, comenzaron a follarla los dos a la vez, durante un buen rato, Abel ya no podía mas, así que le dijo a Alexis:

 

“Tío, para por que me voy ha correr y no quiero dejar a esta embarazada”,

 

Alexis, que también estaba casi a punto, se levanto y entre los dos sentaron de nuevo a mi hermana en la silla, poniéndose cada uno en un lado, se pajearon hasta correrse el primero fue Abel, se corrió tanto que mancho toda la cara de mi hermana incluido el pelo, después fue Alexis, el cual se corrió en sus tetas quedándose los tres exhaustos, ellos se sentaron y se encendieron un cigarro, mi hermana le dijo a Juan Carlos:

 

“Por favor tráeme una toalla del baño y mi copa, necesito beber algo y limpiarme”.

 

Juan Carlos se levanto, se puso frente a ella, se saco su polla, y sin decirle nada, le dijo:

 

“Toma bebe”, y comenzó a mearle en la cara, mientras los otros dos decían:

 

“ que haces tío?”.

 

Juan Carlos respondió:

 

“Ella quiere beber y yo quiero mear, que queréis que haga, jajaja”.

 

Abel, se levanto y dijo:

 

“tienes razón le vendra bien una duchita caliente”.

 

Y aun desnudo se puso al lado de Juan Carlos, y también comenzó a orinar, la dejaron casi duchada los muy cabrones.

 

Alexis, le saco la toalla, y ella se seco los tres se vistieron y se sentaron en la mesa.

 

Abel le dijo entonces a mi hermana:

 

“Cari, espero que no te hayas enfadado y que hayas disfrutado”.

 

Mi hermana respondió.

 

“Enfadada estoy, pero he disfrutado”.

 

Juan Carlos entonces les dijo.

 

“nos hacemos una foto los cuatro para acordarnos de esto”.

 

Se pusieron los tres detrás de mi hermana, levantando el dedo pulgar, y Juan Carlos le dijo a mi hermana:

 

“Cari, lo sentimos, esperamos que si te hemos ofendido o algo nos disculpes”.

 

Abel le dijo también sin dejar de reírse:

 

“No volverá a pasar si tu no quieres. Jajaja”.

 

Ella solo respondió.

 

“ vayámonos por favor”.

 

Los cuatro se fueron, dejando el restaurante lleno de leche y meaos, cuando ya se habían ido, salí y me fui para casa. Escuche a mi hermana en la ducha y yo me fui a dormir.

 

Las fotos solo se mantuvieron online un par de semanas, hasta que mi hermana le pidió a Juan Carlos que las quitara.

 

 

--- Si os ha gustado este relato, del cual estoy seguro que algunas cosas son realidad, podéis escribirme a nugo@outlook.es, y contarme historias similares a esta, tanto con mi hermana como con mi madre. Sera para mi un verdadero placer. Gracias a todos. -----

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