Al llegar al reino ambos grupos de esclavas provenientes de sus respectivos eventos pasaron a su Alteza un reporte bien detallado de todas y cada una de las actividades a las que fueron sometidas. Las esclavas informaron que lo primero que hicieron fue recibir con toda elegancia a sus invitadas en ambas reuniones besándoles los pies como es debido.

Las esclavas que estuvieron a los pies de las invitadas del baby shower aun sabiendo que fueron sometidas y humilladas al máximo habiéndolas obligado a realizar cosas muy degradantes, ellas dieron un reporte a su Ama que la fiesta había sido todo un éxito y que se habían divertido mucho, terminaron agradeciendo a su Ama por haberles dado esa valiosa oportunidad de ver su capacidad como esclavas domésticas.

Las esclavas que fueron designadas a la despedida de soltera, comentaron a su Alteza que había sido una reunión totalmente al altura de sus invitadas, todas ellas personas muy refinadas que saben dar el trato que una esclava merece, añadieron que sus amigas siempre permitieron la exhibición de ellas como esclavas a su máximo nivel, y que eso las hizo sentirse muy agradecidas y valoradas con sus amigas, tanto como con su Alteza.

Su Alteza complacida con los resultados de ambos eventos nocturnos permitió que sus perritas desveladas fueran a la cocina en cuatro patas comieran su alimento especial y se retiraran después a sus jaulas para dormir solo por dos horas y después empezar sus labores cotidianas en el reino, las esclavas agradecieron la gentileza de su Majestad lamiéndole delicadamente los pies y enseguida retirarse a comer y dormir un poco.

Su Alteza se percató de que esas dos familias esclavas iban a ser una mina de oro haciéndolas trabajar en fiestas y reuniones privadas, una vez que las esclavas durmieron y se alimentaron fueron llamadas de nueva cuenta ante su Majestad. Esta vez el Ama les informó que por su buen desempeño en los eventos correspondientes, ellas iban a ser las encargadas de los eventos, pero que eran necesarias que reclutaran ellas mismas a toda familiar que tuvieran.

Las esclavas respondieron “si Alteza, como usted disponga, nosotras estamos a sus pies en todo lo que nos indique”. Apenas dijeron eso, las perras se retiraron para llamar a toda su parentela haciéndoles creer que había un trabajo donde se produce mucho dinero, las familias de las esclavas aceptaron gustosas, lo que las esclavas omitieron fue que el dinero sería íntegramente de su Alteza y que no les tocaría un solo centavo.

Las perras comunicaron a su Ama que el operativo “esclavizar familia” estaba ya puesto en marcha, que en cuanto llegara toda la familia serían abordadas por ellas mismas para someterlas e introducirlas en ese mundillo de esclavitud y sumisión. A los 15 minutos más o menos se escuchó el timbre de la mansión. En esa ocasión las esclavas familiares suplicaron ellas abrir la puerta del vestíbulo y conducir a su ingenua parentela al salón principal como si estuvieran llevando reces al matadero.

Las perras saludaron de manera cordial a su familia para que no sospecharan la realidad y fueran a salir huyendo, las llevaron al salón principal para ofrecerles una bebida en lo que esperaban, las familiares tenían sed por lo que aceptaron las bebidas agradeciéndolas, las perras fueron a traer las bebidas para volver enseguida y dárselas; al haber bebido apenas unos sorbos, todas ellas cayeron desmalladas por efectos de la bebida, ya que además de hielo, les habían puesto un somnífero lo cual les dejó totalmente indefensas. Esto facilitó su tarea a las perras al llevarlas a las nuevas jaulas. Una vez que pasó el efecto de la droga, las familiares se vieron enjauladas y frente de su familia que las había invitado a ir para ganar dinero. Ellas preguntaron ¿Qué estaba pasando? Las perras que ahora ya consideraban a su familias como las futuras esclavas de su Ama, con voz de mando hicieron callar a su familia diciendo “A callar todas, aquí no se habla jamás sin permiso de nuestra Ama”, apenas dijeron eso soltaron un latigazo al aire dejando hacerse escuchar un zumbido, esto con la intención de infundir miedo.

Una de las familiares enjauladas que salió siendo prima de las ya perras entrenadas no sabían que estaba pasando y con algo de inseguridad se dirigió a su prima para preguntarles porque les había traicionado de esa manera, la perra le soltó un bofetón para después reiterarle “acaso no advertí que mantuvieran silencio”, ya cuando llegue el Ama les explicara todo, yo no tengo autorizado decir nada más; la prima sorprendida de recibir semejante bofetada decidió guardar silencio, sí como la demás familia. La perra se retiró dejándolas abandonadas en total oscuridad, tal cual a ella la dejaron el primer día con una incertidumbre de no saber que sería su futuro.

Su Alteza apareció para encender la luz, lo que provocó ceguera temporal a las futuras esclavas al estar en total oscuridad por tantas horas, habían perdido la noción del tiempo que llevaban ahí. Habían transcurrido ya 24 horas desde que su prima las había enjaulado, lo que si sabían es que estaban hambrientas y muy débiles, el Ama sin dejar tiempo a que las enjauladas dijeran algo, les dejó claro que solo ella era la que hablaba ahí y que ellas callarían” la familia se percató que ella era la REINA y AMA de sus primas, el Ama les comunicó que desde ese momento pasaban a ser sus esclavas y que no tendrían manera alguna de planear su escape, que solo podrían salir cuando se les asignara trabajo y que solo entonces podrían salir de sus jaulas, a menos que tuvieran que presentarse al llamado de su Alteza.

Las nuevas esclavas no tuvieron la oportunidad ni de decir “HOLA” simplemente les abrieron las jaulas para empezar con el entrenamiento y su calvario permanente. Su entrenamiento fue intensivo, ya que no había que perder mucho tiempo y poderlas usar ya como esclavas en los eventos realizados para el negocio. Ya que estas nuevas esclavas iban a tener a su cargo junto con sus primas el saber dar atención en los eventos, sus propias ex primas ahora entrenadoras se encargaron de pulir su manera de servir en todos los aspectos.

Los eventos empezaron a ser cada vez más solicitados y las perras cada vez daban mejor atención, ya habían perdido toda su voluntad y hasta el deseo de escapar de su encierro, ahora les daba miedo salir, ya que durante mucho tiempo su mundo fueron solo el reino y sus jaulas por las noches, esto fue ventajoso para su Alteza, ya que ahora temían hasta asomarse por la ventana, su nivel de miedo era total. Ahora para torturarlas las amenazaban con echarlas a la calle, y las mismas esclavas rogaban no hacerlo.

Con el pasar de los años el negocio dio a ganar millones a su Alteza lo que permitió gozar de una estabilidad económica muy cómoda y despreocupada. Años después ya su Alteza entraba a una edad donde ya no tenía el mismo vigor de su juventud para seguir reclutando esclavas, por lo que quiso a pasar la estafeta. Decidió que la que heredaría su puesto sería su esclava más leal que siempre tuvo. Su Alteza siguió siendo dueña del imperio, aunque su fiel esclava ahora era la directora del imperio.

Años más tarde su Majestad su Majestad se despidió de sus perras permitiéndoles besar sus pies al igual de cada día desde hacía ya muchos años, esa vez fue diferente ya que al día siguiente su amada dueña ya no pudo abrir más los ojos, había partido del mundo.

Las esclavas tristemente habían perdido a su Alteza, su tan respetada Ama por todas, y aunque ahora al perder a su dueña que tantos años les dedicó con su sabiduría había fallecido a causa de la edad, las esclavas decidieron unánimemente seguir la tradición de aquel mundillo siendo las mismas esclavas de toda aquella mujer que requiriera sus servicios.

Aquel mundillo que al principio se negaban a aceptar, ahora no deseaban abandonar, ya que se había convirtió en su modus vivendi. El legado de su ahora ya extinta Ama continuaba estando en la memoria de sus esclavas, momentos que al comienzo fueron despreciados, pero que ahora valoraban por aprender a vivir en un mundo en el que todos conocen, pero pocos se atreven a vivir dentro de él, y todo gracias a su muy amada dueña que vivió en sus recuerdos hasta el último de los días de la última esclava del reino.