Metido debajo del escritorio de Blanc osado admirando y cautivante por los florecientes rincones sexy y exquisitos como fabulosos debajo de la falda primordialmente de las pantimedias con su panti; complaciente igualmente placentera en su gracia y divinidad femenina Blanc deja que la llene a plenitud puramente de besos como caricias con mis ambas manos recorriendola desde sus tobillos subiendo por las rodillas metiendome espesamente en sus entrepiernas sintiendo y palpando lo suavecito como acolchonadito de su pie por las pantimedias viendo una temperatura semi caluroso a lo interno del vestuario de Blanc. Tomando por la fuerza invasora en esa misma posición y lugar estrategicamente de sus muslos y gluteos que los bese y mordi superficial, suave, leve hasta formidablemente por mi boca saciadora y amorosa que me emana de todo mi ser a la fecha de hoy por el eterno cariño y enamorado que estoy hoy día por Blanc.