Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Orgías

Primer orgía de Eli

Ayer en la tarde recibí una sorpresa de mi amo y esposo que no esperaba, en lugar de ir a las cabinas fuimos a una orgía, la primera vez en mi vida.

Me puse un corset negro con tiritas rosas en la parte superior y una faldita azul muy cortita, tan corta que apenas tapaba mis nalgas. Llevaba unos boxers negros de encaje que hacen que mis nalgas resalten aún más.

Me gusta provocar a mi esposo así que no espere a cambiarme en el lugar, nos fuimos así en el carro al lugar de la reunión. Mi amo iba apretando mis pezones y dejando mis senos fuera del corset mientras manejaba para que todos los vieran. Me acariciaba las piernas, levantaba mi faldita y para ponerme más cachonda me metía el dedo en mi vagina para luego chupárselo para probar mi humedad ya que mi vagina estaba escurriendo de lo que excitada que estaba.

Mi amo tiene una regla siempre que estamos juntos, mi mano libre (en caso de que vaya manejando) tiene que ir en su verga, acariciándolo, poniéndolo duro y a veces, cuando hay mucho tráfico se saca su verga para que en los altos me quite el cinturón y se la mame y luego seguir masturbándolo mientras avanzamos.

Cuando vamos en metro o metro-bus me pongo de espaldas para apretar mi trasero a su verga, para empezarla a poner dura. Después meto mi mano y le acaricio los huevos y su verga. Mi amo no se queda atrás, le gusta meter su dedo en mi culo, lubricarlo con mi humedad y me hace llegar al orgasmo con su dedo en mi ano.

Cuando andamos en el carro le gusta que vaya sin ropa interior, pero también sé le gusta mi ropa interior sexy y esa tarde quería provocarlo, además se lo había prometido y tenía que cumplir con las expectativas de mi amo.

Casi toda la parte del trayecto tuve los pechos de fuera, mientras él me iba apretando los pezones, me mordía en los altos y me iba poniendo cada vez más caliente. Yo no quitaba mi mano de su verga que cada vez se ponía más dura.Y lo único que podía pensar era que me penetrara, que metiera toda su verga dentro de mi, que la mojara y luego me rompiera el culo.

Dejamos el carro en un estacionamiento cercano y no se hicieron esperar las miradas cuando baje del carro. Para estar cómoda me fui con unos tenis bajitos, con el corset, un suéter delgadito y chico, y mi faldita llamaba mucho la atención. Además de que mis nalgas son bastante llamativas y la falda apenas y cubría mi trasero.

Cuando llegamos al lugar de la reunión, mi pulso estaba a mil. Nunca había ido a una orgía, habíamos hecho un trío pero esto era un paso más allá.

El departamento es de tres cuartos y un baño, muchos sillones, un área de botanas y refrescos y un cuarto con puras camas. Todo muy limpio y a oscuras. No había muchas personas, había unos cinco hombres, ya desnudos esperando a que llegara más gente. Yo era la primera mujer en el lugar. Me sentí un poco cohibida, sentía sus miradas en mí, su deseo, su excitación.

Mi esposo y yo fuimos al baño para sólo quedarnos en ropa interior, así que quedó a la vista de todos mi corset y mi boxer de encaje negro. Cuando salimos del baño, si las miradas habían sido obvias, ahora no se contenían, me seguían con la mirada, sólo esperando la oportunidad para acercarse y empezar a tocarme.

Después de un vaso de refresco, me quite los boxers y me inserte en la verga de mi amor que ya estaba muy dura. No tardaron nada en acercarse todos a mi. En cuestión de segundos tenía la verga de mi amo dentro, vergas en mi manos, manos tocando mis tetas y bocas besándome.

La sensación de tener a tantos hombres a mi disposición hizo que llegara un mega orgasmo casi enseguida, mismo orgasmo hizo que mi amo no se pudiera contener y se viniera. Me ordenó que fuéramos a la cama para que estuviera más cómoda y pudieran cogerme todos.

Me recosté e inmediatamente se ubicaron dos a cada lado para que los mamara, mientras uno de ellos me penetraba, estaba tan caliente, tan excitada que todos mis músculos vaginales se contraían con cada embestida, apretando la verga del tipo que me estaba cogiendo haciendo que se viniera muy rápido.

Pero eso no detuvo la diversión, ya había otro hombre listo para cogerme. Mientras seguía mamando sin parar a los dos que estaban a mi lado. Estaba sudando de la excitación, de sentir manos recorriendo todo mi cuerpo, mis piernas, mis nalgas, mis tetas.

Estaba tan caliente que tan sólo el roce de las manos de todos los extraños me hacía tener orgasmos y cuando mi amo me metió su verga en mi boca no pude contener otro delicioso orgasmo al sentir la verga de mi amo en mi boquita mientras tenía a cinco hombres rodeándome, esperando su turno para penetrarme.

Se acercaban a mi boca para mamarlos mientras otro me estaba cogiendo, cuando se venían, otro llegaba a mi boca para ponerlo duro mientras alguien más ya estaba dentro de mi. Me llenaban la boca de sus vergas, sin dejarme respirar, ahogaba mis gritos de placer con las vergas que me llenaban mi boquita. Cuando me separaba para respirar y dejar salir mis gritos de placer, me volteaban mi cabeza para seguir mamándolos. Para recorrerlos con mi lengua, para chuparlos y meterlos hasta mi garganta.

Me encanta tener una verga en mi boca y tener a mi disposición a seis hombres para mi me estaba volviendo loca, no me daba abasto, no dejaba de mamar y no dejaban de cogerme. Mi amo me penetro y su verga dura y gruesa hizo que todos los músculos de mi cuerpo se contrajeran y esta vez era aún más excitante porque tenía a dos vergas en mi boca más una más mi mano, mientras los demás tomaban un descanso cerca para tomar fuerzas y seguir cogiendome.

Cada uno tenía su forma de cogerme, algunos me levantaban más las piernas y me embestían rápido y hasta dentro, otro era menos duro pero igual de rápido. Mi amo me penetra duro, me mete toda la verga pero hace que la disfrute, se mueve dentro de mi y no se apresura, le gusta sentir mi humedad, disfrutar de estar dentro, cuando siente que estoy cerca del orgasmo me levanta mucho mis piernas y me empieza a penetrar muy fuerte, duro y rápido.

No pude ahogar el grito de placer de tenerlo dentro de mi mientras tenía a tres vergas más para mi. Tuve que sacarme las vergas de mi boca y gritar, dejar salir esa excitación.

Tomamos un descanso, me habían cogido ya varias veces y la cantidad de orgasmos que había tenido eran impresionante. Ser multi-orgásmica es una delicia y tener a seis vergas para cogerme, para mamar y probar sólo hacía que quisiera más.

El descanso no duró mucho, y probé algo que ya tenía tiempo queriéndolo hacer: una doble penetración. Me recosté en la verga de uno de los extraños mientras mi amo me rompía el culo, en cuanto sentí la verga de mi amo en mi culo, rompiéndolo, abriéndolo por completo llegue a un orgasmo que hizo que el hombre que me estaba penetrando en mi vagina se viniera.

En ese momento los demás hombres se acercaron y empezaron de nuevo. Un señor de más de 50 años se puso de mi lado derecho para que se la mamara, mientras tenía a uno de 30 y tantos a mi lado izquierdo, uno cogiendome, masturbaba a mi amo, mientras los demás hacían fila para cogerme.

Mi vagina no estuvo sin una verga dentro por una hora seguida, ya fuera mi amo o los otros 5 hombres. A mi boca no le faltó verga que mamar, todas de diferentes tamaños y a todas las mamaba completamente, las metía hasta dentro, les lamía los huevos y las dejaba listas para que me penetraran.

Por alrededor de dos horas, me cogieron sin dejarme casi respirar por las vergas en mi boca. Me dieron tanto placer que mis gritos se escuchaban hasta la calle.

Llegué a un punto en que mis piernas estaban tan cansadas que ya no podía mantenerlas arriba. Y me seguían penetrando, me seguían cogiendo y seguían disfrutando de mis mamadas, mis tetas y de mi vagina.

Le pedí a mi amo otro descanso y cuando me recosté boca abajo, mientras él me acariciaba el trasero y el culo, casi me quedo dormida. Estaba exhausta, me habían dejado completamente agotada y adolorida de mi mandíbula, de mi piernas y de mi vagina.

Falto mucho que probar, faltó ponerme en cuatro para que vieran que soy la perra y puta de mi amo. Ya será en otra ocasión en la que vean que soy la puta y perra de mi amo y esposo.

Estamos en busca de chicas bi, hombres solos no, sabemos donde hallarlos. Manden cel para pronto contacto
Datos del Relato
  • Categoría: Orgías
  • Media: 5.05
  • Votos: 20
  • Envios: 2
  • Lecturas: 8951
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.145.110.99

3 comentarios. Página 1 de 1
maxi
invitado-maxi 18-09-2015 00:58:18

Me encanta el relato, me gustaria compartir con ustedes a mi mujer.

estefania
estefania 21-12-2013 16:45:17

se me antoja estar en ese lugar

miguel
invitado-miguel 15-03-2013 00:00:00

hola muy buen relato me hubiese facinado haber estado con ustedes para que me chupes la vega cogerte y hacerte la cola, supongo que tanbien te tomaste mucha echita

Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 38.476
»Autores Activos: 2.273
»Total Comentarios: 11.905
»Total Votos: 512.063
»Total Envios 21.926
»Total Lecturas 105.323.149