Esta es la historia mia y de Monica. Yo tenia 18 años y Monica 12. Para su edad estaba muy linda y desarrolladita, con pechos ya empezando a abultar. Cuando iba a su casa a ver tele nos sentabamos juntos y yo la miraba con su pollerita tableada, tan linda y tentadora que tuve una enorme ereccion. Le dije, ves como me has puesto... Se encogio de hombros y le pedi: me dejas besarte ahi abajo. Me miro y sonrio: de verdad te gusta eso? no te da asco? Le respondi: a ti te va a gustar mucho, te lo prometo. Me arrodille frente a ella, le levante la pollerita, le baje su ropa interior y empece a lamerle su sexo. Empezo a suspirar y me agarro la cabeza. Cuando le aprete el clitoris con los labios tuvo su primer orgasmo. Yo estaba con el el miembro tan duro de excitacion que me perforaba el pantalon. Le pedi, ven y montate mirandome sobre mis piernas. Se subio y nos besamos en los labios largamente. Saque mi miembro del pantalon y comence a rozarlo contra su sexo. Siguio besandome y empezo a suspirar. Estaba mojadita. Le puse la cabeza del miembro en la entrada y empece a metersela despacito. Cuando llegue a su virginidad, hizo un gesto de dolor, pero segui presionando y note que la cabeza le entraba. Grito y me dijo: sacala, por favor, duele. Le respondi: no, solo quedate quietita y pasara. No la puse mas adentro, solo la gire y gire suavemente hasta que la cabeza se acomodo en su sexo, seguimos besandonos y ella empezo otra vez a suspirar. Entonces muy despacio la segui penetrando hasta que entro todo lo que pudo y me quede quieto. Ella me abrazaba fuertemente. Al rato note que mi miembro se movia con mayor facilidad dentro suyo y empece a entrar y salir despacito. Ella empezo a besarme con mas fuerza en los labios. Yo ya estaba enloquecido de excitacion y no pude contenerme mas y le acabe a chorros dentro de su sexo. Estaba tan apretadita por ser virgen que su sexo oprimia mi miembro deliciosamente. Quede dentro suyo por un rato y seguimos besandonos apasionadamente. Le dije: Te amo, amorcito mio, sos divina. Despues se la saque y le limpie el sexo con un kleenex. Despues de eso, ella empezo a venir a mi casa cuando estaba solo y lo hicimos varias veces con muy gran placer de los dos. Antes de la penetracion le lamia el sexo largamente hasta que mi Monica suspiraba y gemia de placer. Entonces la penetraba y gozabamos como locos. Lamentablemente su hermana mayor sospecho algo y le prohibio venir sola a mi casa, pero ese desvirgamiento fue una delicia indescriptible y aun hoy cuando nos pasamos en la calle, ella me mira con ojos llenos de cariño. Fui su primer hombre. Yo nunca la olvidare.