Era una noche común con apagón en mi camino a casa. Caminaba rápido pues había escuchado de los asaltos recientes en esa zona y no quería ser una víctima más.
La carretera estaba desierta y eso me daba un poco más de preocupación pues pensé que si algo pasaba nadie escucharía mis gritos.
A lo lejos vi unas sombras en movimento y mi corazón se agitó. ¨¿Qué hacer si son asaltantes? ¿Correr? Esa parece la mejor opción... o advertirles desde un comienzo que no llevo nada de valor, para que no haya ninguna violencia y ni lo intenten... Rayos, son como seis¨.
-Oye, ven acá un momento.
-No puedo, compadre, estoy apurado -dije acelerando el paso.
-Es un momento nada más.
Ya me estaban rodeando seis mulatos. Dos de ellos muy altos y fornidos, los otros cuatro más o menos de mi tamaño (1.76) o al menos eso me pareció.
-Estoy atrasado, no puedo detenerme.
-¿Te vas a parar o no?
El brillo de la hoja del cuchillo me convenció inmediatamente.
-Oigan, no tengo nada de valor, por favor déjenme tranquilo
-¿De verdad?
Me agarraron fuertemente entre dos por la espalda. No opuse mucha resistencia pues pensé que sería peor.
-Pueden revisar, se darán cuenta de que soy un arranca´o y me dejarán tranquilo.
Se convencieron de era cierto que no llevaba nada valioso...pero no me dejaron tranquilo, sino que ahí comenzó la pesadilla.
Me quitaron con viloencia el pantalón y descubrí que habían cambiado sus intenciones. Pensé en resistirme lo más que pudiera, pero fue inútil. Yo sólo pensaba en el mito de que te conviertes en gay sin remedio cuando eso ocurre y gritaba desesperado.

Cuando sentí el primer miembro dentro de mí el dolor fue insoportable:

-Ay hijoeputa!!! Ay, no me hagan eso!!!
Por favor!!
Tengan piedad!!!
Ay coño que duele!!!
Déjenme, por favor!!!
Yo los masturbo si quieren, coño!!!
...
Ay, espérate que me está gustando!!!
....
Me está gustando esto!!
...
Ay, coño, que rico!!
Ay, me gusta cabrón!!!
Métemela!!!
Métemela!!!
Ay, no pensé que se ponía tan rico!!!
Ay, duro!!!
Ay, papito, soy tuya!!!
.....
Soy tu yegua!!!
Ay, que pinga más rica!!!
Sigue!!! Sigue!!!

Que puta soy, coño, no lo sabía!!!
Quiero una en la boca también, coño!!!

Me complacieron. Fue increíble lo que sucedió después.

Quiero las otras, las quiero todas!!!

Y también me complacieron.

-Ay, tú sí que la tienes grande!!!
Me duele!!

Me duele!!! Para, coño!!!

Para!!!
...
No!!! No!! ESpera que me gusta!!
Ya me gusta!!
Ay, que grande está!!!

Ay que rico!!!


Soy tu puta!!! Mi culo es tuyo!!!

Cuando me lo pidas es tuyo!!!!

...

Acabaron todos dentro de mí y me dejaron tirado. Con dudas de lo que sería mi futuro... Ya no sé que pensar. Me siguen gustando las mujeres pero no puedo olvidarlo. ¿Por qué hicieron eso conmigo?