Hola le cuento mi historia, la misma es real y paso hace un tiempo y es la primera vez que me animo a escribir y contar sobre ello, ya que me puse a leer varias historia publicadas y me recordó lo vivido.
Mi nombre es Damián tengo 40 años y estoy bien conservado, siempre hago ejercicio y me cuido un poco, aunque ahora tengo un poco de pansa. Mi señora es una mujer muy linda que respeto y amo mucho, ella tiene muchas amigas y siempre con ellas me he llevado muy bien y nunca le he faltado el respeto por más que algunas se me pueda haber insinuado.
Pero lo que me paso con su amiga Patricia (no es su nombre real, pero por las duda la voy a nombrar asi) nunca lo pude imaginar.
Mi mujer con su amiga coordinaron unas vacaciones juntas, ella tiene unos hijos de la edad de mis hijos y se llevan bien y en otra oportunidad ya nos habíamos ido juntos de vacaciones y nos llevamos muy bien, Patricia es separada de 32 años de edad, delgada con unos pechos no muy grande, pero del tamaño justo tipo modelo y una cola que la verdad hace que cualquier persona se de vuelta a verla cuando pasa caminando, es perfecta con ropa y sin ella mucho más.
Como le decía no era la primera vacaciones que compartíamos y siempre la pasamos muy bien y teníamos buena relación entre todos, la ves anterior fuimos a la playa y me moría al verla en biquini super chica, tenia que hacerme el tonto para que mi mujer no me viera observándola pero no podía evitar mirar esa cola y su carita preciosa.
Pero en esta vacaciones sucedió algo inesperado. Como siempre salíamos a tomar algo y comer, ella y mi mujer toman alcohol y yo la verdad que por una promesa no lo hago, esa noche se tomaron de todo, estaban ambas muy alegre y contenta, los niños cansados, por lo que regresamos a la casa alquilada, mi mujer fue acostar a los niños y se acostó de inmediato, por lo que se quedo super dormida, yo siempre me ducho antes de acostarme, en ese momento que estoy en el baño, con la puerta cerrada, golpea la puerta Patricia y me dice si puede pasar por favor que ya se hace en sima que le abra, por lo que le saco la llave a la puerta y me meto nuevamente a la ducha, cerrando la cortina, le digo pasa ya esta abierta la puerta y cerre la ducha no te preocupes, siento que se abre la puerta y la verdad es que tenia ganas de espiarla por la cortina, pero si me viera me moriría de la vergüenza por lo que no hice nada. Ella me digo que sus hijos estaban también dormidos y que también quería ducharse para dormir, por lo que le dije que en unos minutos salia, que no se preocupara, en ese momento abre ella la cortina del baño, por lo que me observa totalmente desnudo y con la pija parada que apenas pude cubrir, la cual se me paraba de imaginar a ella en el baño, me dice--- Hup perdón, quería tocar el agua para ver si no estaba muy fría, pero veo que no ya que tenes la pija parada y se reía un poco.
Yo la verdad estaba colorado de la vergüenza y un poco tímido, no sabía que decir, ya que la observe y tenia puesto un desabille transparente, sin corpiño pudiendo apreciar esos lindos pechos y una bombacha diminutas que se translucía y se la marcaba esa cola.
Ella comenzó a tocar mi cuerpo y se metió a la ducha con migo, la verdad es que me sorprendió, me abrazo de la cintura me saco el brazo con el que me cubria el pene y me dio un beso en la boca, mi primera reacción fue besarla, podía sentir mi pene clavado en su estomago ya que es más baja que yo de estatura y mis mano fueron agarrar su cola, la verdad es que se veía como una diosa era una fantasía hecha realidad, con su ropa mojada, el pelo y ese cuerpo, solo pensaba en hacerle el amor en ese momento, pero la verdad es que reaccione y le dije, perdón por el beso, pero estas mal, has tomado mucho alcohol y no me quiero aprovechar de vos, ella no me soltaba y me decías aprovéchate, aprovéchate por favor, hace mucho que te tengo ganas y hoy con los tragos me anime a decirlo, ella se bajo y se arrodillo y sin decir nada, se metió mi pene en su boca, sentir esa boca, su lengua y el agua caer sobre mi cuerpo fue un placer, pero la corrí de nuevo, me salí de la ducha y le dije, no puede ser, si no hubieras tomado, lo haría tranquilo con vos, me gustas mucho, pero no me quiero aprovechar, báñate, yo me voy a dormir.
Por dentro me puteaba de toda forma y los idiomas que existen, pero la verdad me preocupaba que al otro día que se le fuera el efecto del alcohol le contara a mi mujer ya que estábamos en la misma casa alquilando todos y con los niños, por lo que me fui a la pieza y junte la puerta, dejándola a ella en la ducha.
Mi mujer estaba redormida por los tragos que se había tomado, acostada boca abajo, ella como le dije es muy linda y también tiene un cuerpo muy lindo, con la calentura que tenia comencé a besarla y le corri la bombacha, un poco y comencé a frotarme, ella se despertó y se acomodo levantando la cola hacia mí, sabiendo que estaba como loco para hacerle el amor, como siempre, pero nunca imagino que era por la calentura que me había dejado su amiga, le meti de un solo envión mi pene, sin tanto juego previo, por lo que pienso que le dolió un poco, ya que no pudo callar su grito y no fue de placer, comencé a moverme como nunca, le besa el cuello y no paraba de penetrarla una y otra vez, los dos estábamos caliente y se podía sentir nuestros gemidos en la pieza como una música al compas.
Mi esposa me acostó y ella se subió sobre mi pene y me dacia estas como loco hoy quiero que acabes para dormir, se movía muy rico, pero no podía concentrarme en mi mujer, solo pensaba en Patrica y la calentura que me había dejado. Mi esposa bajaba y subia de mi pene con locura y a un ritmo muy rico, en eso veo que la puerta de la pieza se abre un poco y logro observar a Patricia mirando como hacíamos el amor, le brillaban sus ojos, mi mujer estaba de espalda a la puerta por lo que no pudo notar que ella nos observaba, yo me agarre una calentura de no creer, pero que un niño en su primera relación, cuando mi mujer me dice estoy por acaba, comienza a retorcer la espalda, se recuesta con todo su cuerpo sobre él mío, pudiendo sentir sus pechos duros y sus pezones como piedra, su respiración a mil por hora, por lo que también me éxito mucho y acabe en un grito de placer, que ella con su mano me tapo, para que no nos pudiera oir ni los niños ni su amiga Patricia, sin saber que la muy turra se encontraba parada mirando por la puerta.
Nos quedamos unos minutos abrazados y cuando observe a la puerta ya no se encontraba su amiga, por lo que me dormi.
Al otro día, nos despertaron los niños temprano, eso de las 10 hs que querían ir a la playa, nos cambiamos todos y yo le dije que fueran ellas, que iba a comprar para hacer la comida y la esperaba con el almuerzo, por lo que se cruzaron caminando ya que estábamos a dos cuadras del mar.
La verdad es que me sorprendió Patricia, ya que ni me miraba y hablaba como si nada hubiera pasado, pensé que esta con el pedo que tenía no recordaba nada y todo quedaría así.
Les dije que la comida la iba a tener tipo 13.30 hs para que regresaran a ese horario y luego saliéramos todos juntos de nuevo. Ellos se fueron y yo me fui a comprar y me puse a preparar la comida al regreso.
Siendo las 12 hs aproximadamente, siento que abren la puerta y era Patricia, había regresado sola, le pregunte que le pasaba y me comento que ella tenia muchas ganas de ir al baño y le digo a mi señora que ya se iba a quedar en la casa hasta que este la comida, que cuando le falte poco la iba a llamar, por lo que mi mujer se quedo en la playa con todos los niños.
Ya mi cabeza me hacia pensar miles de cosas, de preguntarle si se acordaba de lo de anoche, pero me daba cosa de meter la pata y preferí callar. En eso ella me dice que se va a sacar la malla que estaba mojada y que luego me ayuda.
Se fue a la pieza y pasaron un par de minutos, cuando sale de la habitación la verdad no la tenia a la vista, pero podía sentir que se había puesto un perfume muy rico, que desde lejos ya me hacía pensar en su piel y el poder olerlo directo de todo su cuerpo.
Cuando giro al verla, la verdad era un sueño, tenia puesta una bombacha diminuta de color blanca unas medias caladas y un corpiño que le levantaba el pecho. Lo primero que reaccione y dije que linda te vez, ella solo se sonrió y se me acerco, cuando estaba a mi lado me dice.
- Me cambie para vos, sos todo un hombre, la verdad es que esperaba que ayer me hicieras el amor, pero el hecho que no lo hicieras porque estaba tomada, me puso más loca. Quiero que seas mío.
Después de ello, no me pude contener, la tome de la cintura y comencé a besarla, sus besos me volvían loco, ya que estaban llenos de deseo y pasión. Ella comenzó a sacarme una remera que tenia puesto y también comenzó a besar mi cuerpo, desde el cuello hacia abajo, me desprendió la malla la y mi pene estaba como una roca, era irreconocible, nunca lo había visto tan parado y excitado, su boca comenzó a recorrer lentamente por el costado de mi miembro, besando cada centímetro y con sus manos me masajeaba el pene y los huevos, luego se introdujo todo el pene en su boca y comenzó a chuparlo como una experta, me calentaba al verla arrodillada comiéndose mi pistola y cuando levantaba sus ojos para verme me calentaba mucho más.
Luego de unos minutos, la levante y recosté sobre la mesa de la cocina donde estaba, levante sus piernas y fue mi momento de besarla, comencé por los dedos del pie y fui bajando hasta su concha, la cual estaba muy mojada sin que la tocara, su bombacha estaba toda humeda, con mi mano corri su bombacha a un lado y comencé acariciarla con un dedo, luego comencé a besarla, cuando mi lengua toco sus labios vaginales, solto un suspiro, que pienso que desde la playa nos pudieron escuchar, pero no me importo callarla, sus gemidos eran música para mis oídos y me calentaba mucho más, le introduje un dedo, luego dos y ella solo podía genir, sin callar, no dejaba de mojarse y su sabor era exquisito de verdad, me reincorpore de píe a su lado y la gire en la mesa, la puse apoyada boca abajo con los pies sobre el piso para poder contemplar esa cola hermosa, comencé a besarle el cuello y luego baje por su espalda con mis besos mientras no podía dejar con mis manos de penetrar su concha, por lo que ella no paraba de gozar, cuando llegue con mis besos a su cola, la bese por todos lado, luego comencé a morder esos cachetes ricos y ella daba unos pequeños gritos de dolor, le saque la bombacha dejándola caer al piso y me concentre con mis besos en su cola le comencé hacer el besito negro, no se si antes nadie le había chupado la cola, pero primero se sorprendió y me quiso correr , pero le dije que se quede quieta y comenzó a disfrutar, mientras le chupaba la cola la seguía masturbando sin parar con mi mano, me pedía por favor que le haga el amor, que se la meta que estaba por acabar, en esa misma posición me pare detrás de ella, y comencé a rosarle con la punta de mi pene su vagina la cual estaba inundada de liquido por su placer, también le rosaba el auguró de la cola, el cual con los besos estaba bien lubricado, cuando estaba nuevamente mi pene a la altura de su vagina rosándola, ella hizo su cuerpo para atrás por lo que se metió de un envión, la verdad se sentía genial, verla de espalda, su figura, el pelo en la espalda, la cola parada mientras mi pene le penetraba una y otra ves, no me podía contener y le meti un par de nalgadas, ella la verdad disfrutaba que le pegara unos chilos a esa cola, antes que me diera cuenta ella empezó a retorcerse en la mesa, su cabeza giro al verme y pude notar su mirada perdida mientras de mordía los labios de placer, en ese momento me di cuenta que estaba acabando, por lo que más me movía para que no quejara de gozar ni un instante.
Luego de ello, ella se corrió, me tomo de la mano y me digo ahora me toca a mí, me llevo a la pieza donde ella dormía, era una cama chica de plaza y media ya que la pieza matrimonial la ocupamos nosotros, me tiro sobre la cama de espalda quedando mi pene parado a su merced, se empezó a meter por mis piernas besándome por todos lado, hasta llegar a mi pene, comenzó a besarme los huevos y luego se los introdujo todo en su boca, haciendo movimiento con su lengua la verdad era que no podía aguantar más ya estaba a punto de acabar, por lo que la corrí y le dije - subite y que ya acabo
Ella se rio y me dijo ahora vos no das orden me toca jugar a mí, comenzó a chuparme el tronco de mi pene, luego se introdujo la cabeza entera en su boca y comenzó a jugar con su lengua por lo costado, mientas con una mano me masturbaba la parte que no le entraba en la boca la otra me masajeaba los huevos, por más que quise aguantar de la calentura que tenia no pude y comencé acabar, saliendo de mi cuerpo un grito de placer, como si fuera años que no tenía relaciones y la misma noche me había desquitado con mi esposa. Patricia me tapo la boca y continuo chupándome la pija la verdad es que me seco hasta la última gota, yo estaba rendido y extasiado de placer, pero ella continúo pajeandome por lo que nuevamente tuve una erección y ella decía esto no se acaba, se subió sobre mi pene, bajo lentamente y pude sentir como se iba introduciendo mi pene en su vagina, comenzó con unos movimientos lentos hasta que pudo introducirlo entero, se recostó un poco para adelante y de esta forma le pude besar sus pechos y la boca, comenzó a moverse con furia y la verdad que ya tenía ganas de acabar de nuevo, ella me había tomado mis manos y me decía que ahora ella mandaba, se movía a su placer, de arriba abajo, luego de adelante para atrás y ver su cara sentir sus besos, sus pechos sobre mi me encantaba, ella me dijo que estaba por acabar, por lo que yo también me relaje y acabamos esta vez los dos juntos. Nos quedamos abrazados unos instante y cuando nos dimos cuenta de la hora ya faltaba muy poco para que regresara mi mujer con los niños. Me para fui a la cocina, me puse la remera y la malla que tenia, ella apareció desnuda nuevamente me dio un beso tan rico en la boca que nuevamente mi pene se puso como tronco, sin mediar palabra, la gire inclinándola en cuatro y me quedo esa cola con la que me había masturbado un par de bese a mi placer, me baje un poco la malla comencé a frotarle mi pene por su ano, pero cuando lo quise introducir a ella le dolió mucho, diciendo desde que me separe hace años, no se lo he entregado a nadie, pero te prometo que va hacer tuyo, pero hoy no ya me mando un mensaje tu mujer que viene en camino y le dije que me estaba duchando, por lo que me voy a meter al baño, prepara algo de comer que te vea cocinando por lo que ya tiene que estar llegando, Patricia entro al baño yo me quede parado en la cocina acomodándome la ropa y sentí la voces de los chicos que venían contento de la playa, le abri la puerta y mi esposa me saludo con un beso, me causo gracia que me vio colorado y le dije que era por el sol, ja ja parecía un tomate, la comida no estaba ni preparada, por lo que me invente una historia que cuando Sali a comprar me encontré un conocido de la provincia y me demore hablando, ella fue a cambiar los niños y yo me puse a cocinar, sin poder sacarme de mi mente la cola de Patricia y su promesa que iba a hacer mía.
La cual luego me entrego, pero eso se lo cuento en una segunda historia