Atrevidisima, sinverguensisima, aduladora, coquetisima, provocativa, deleítisima, deseadisima, exhibicionista y por consiguiente apasionadisima por devoción al entregarse a cualquier simbolo de apasionamiento como enamoramiento descriptiva en un plano jugandose todo por el todo haciendolo a las mismismas espaldas de su queridisimo esposo.
Siendo una adultera por excelencia, espectacularisima, famosisima, experimentadisima, atesoradisima por unos contornos anatomicos femeninos que atraen a los mirones públicos varoniles que les despierta un morbo interior orgánico como unas emociones lujuriosas, indecentes, cochinas y sobre todo juguetonas sentidas y palpadas personalmente con el rozes, caricias, peñiscadas, tocadas hasta agarradas sorpresivas en sus glúteos engrosados, voluminosos y apetitosos de la secretaría de derecho.
Evocando en una prostituta privada quién pide solamente algo a cambio un beneficio monetario después de acostarse al ser cogida en toda su esencia de mujer buscona de amor que no le dan en su propio matrimonio haptandose que es la mejor hembra que se cotiza al mejor postor cuando aprovecha que su esposo no la tiene medida el tiempo cuando llega de la casa en turno laboral vespertino ni matituno sino en el horario nocturno después de las once.