Llega y acude a su cita con el abogado para que le aregle hasta le tramitan el permiso de trabajo cómo prostituta a mí chica colombiana Melisa. En que contesta a todas las preguntas que le realizan sin chistear ni omitir detalles algunos a la información proporcionada al mismo abogado en su despacho donde se muestra completamente honesta y sobre todo insistente asimismo algo coqueta al tratar de mantenerse en regla y comportamiento ante este abogado que n osabe la pinta que esconde dentro de esa fachada de rectitud de la boca para fuera según lo que imagina, intuye y piensa mí chica colombiana Melisa.

Donde finaliza la ronda intensa de preguntas que ya fueron contestadas debidamente según la información brindada en persona cómo en vivo y a todo color por la mí chica colombiana Melsia al mismo abogado.

Sonriendole el abogado le habla digame más de usted a que se dedicaba allá en su país adicionalmente de ser prostituta, entonces Melisa le contesta con franqueza y propiamente soy ingenieria informática y trabajaba para una empresa del ramo de economía pero quedo cerrada la compañía y yo en la calle era buena colaboradora hasta que me descubrieron teniendo amores y sexo con el dueño; en que me tomaba de mis senos al apretarmelos y agarrarmelos hasta sobarmelos todo en que se desabrocha la blsua azul oscura de manga corta al dejarselo abierto no carga para nada sostén mi chica colombiana Melisa.

Se pone de pie al caminar detrás del escritorio del abogado al pegarsele en que pone ambas manos en sus muslos y gluteos al levantarselos cómo apretarselos hasta abrirselos completamente con la misma falda levantada desnuda sin hilo dental en que le empuja su vagina contra la misma cara del abogado en que se la toma a la braza abrazandole y entrelazandole sus brazos alrededor al comersela a punta de besos cómo lamidas en que mí chica colombiana Melisa, le habla así era que me ofrecia igualmente cumplia hasta servia a las fantasías eróticas cómo sexuales de mí antiguo y último jefe por alla que me trataba amorosa y cariñosa y normalmente siempre en que me llevo hermosos recuerdos junto y asola con él jadeante, gimiente y suspirante entonces mí chica colombiana con su abogado en que lo tiene probando y saboreandose sobre todo deleitandose y calentandose asimismo fascinado hasta zaceado y por supuesto tenemos endemoniado con toda la vagina de mí chica colombiana Melisa que se moja en muchos jugos vaginales que se los traga el mismo abogado en que no se aparta en nada de la plena y propia vagina de mi chica colombiana en sus propias narices y ojos solos y juntos en su despacho que acudio a una entrevista para así formalizar ssu papeles cómo tramitar su permiso de trabajo en el país hoy por hoy.