"Un matrimonio se va de vacaciones y descubre que el amigo de sus fantasías puede ser real"

 

Mi nombre es Carlos y junto a mi esposa Lucía siempre encaramos muy bien nuestra vida sexual , pero al llegar a los cuarenta y con un par de niños en la casa , quedaba poco tiempo para la privacidad y teníamos nuestro sexo a escondidas y en silencio ,lo cual para dos amantes apasionados como fuimos , era como poner freno a la pasión y cuando nos quisimos dar cuenta todo se transformó en rutina.

A Lucía le gustaban mis intentos por hacer algo distinto , y me iba guiando en lo que mas la satisfacía. Fue así que probamos con el cubito de hielo , el pincel en su clítoris , hasta la zanahoria enfundada en un preservativo , pero ella no es que le guste mucho que cosas extrañas e inanimadas entren en su cuerpo.

Experta en sexo oral , se convulsionaba cuando mi lengua atacaba su clítoris y tenía que apretar los dientes para no explotar en un quejido al llegar a su orgasmo… y su boca…Dios mío que sensualidad para mamarla , yo siempre la premiaba con una buena chupada de tetas que le encantaba.

Pero siempre me parecía poco , porque mi mayor placer era verla disfrutar , gozar ,verle la carita de viciosa cuando me hundía entre sus muslos , verla estilo perrito mirando hacia atrás esperando que la penetrara, eso era la gloria.

Fue así como empezamos a fantasear con irnos al campo , tener sexo al aire libre , la hacía chuparse el dedo e imaginaba que la estaba mamando mientras yo le daba por detrás y así nacio nuestro amigo imaginario.

Tímidamente al principio, pero luego descubrí que me calentaba enormemente imaginando a ese amigo invisible mientras yo observaba como se le movían los pechos a Lucía , que hacía muy bien su papel y balanceaba sus caderas y chupeteaba al aire como si tenía algo enorme en su boca , y fue en esas actuaciones que tuvimos nuestros mejores polvos en años.

Parecía que había vuelto la llama.

A todo esto los días transcurrían y nos llegaron las tan merecidas vacaciones .Elejimos una cabaña en un balneario sobre un río , lugar que habiamos visitado en nuestra luna de miel .

Ahora si solos y en un lugar hermoso , todo pintaba para una segunda luna de miel soñada.

Y asi fue. Llegabamos de la playa cansados de caminar la arena , de bañarnos en esa agua clarita , nos duchabamos y salíamos a cenar , cuando llegabamos teníamos todo listo porque la cabaña tenía servicio.

Un muchacho muy simpático de unos 30 años era quien nos oficiaba de guia y tenía a su cargo el mantenimiento del lugar.

Porque nos cayo muy bien, fue que invitamos a Luis a hacer un asado en el parrillero, el ultimo fin de semana de nuestra estadía.

Aceptó de muy buena gana ,con la condición que el se encargaría de traer la leña y hacer el asado.

Llegamos de la playa y el fuego estaba encendido , me duché mientras Lucía compraba algo para la ensalada, y saboreamos un whisky con el amigo Luis.

Luego de ducharse Lucía se dedicó a preparar la ensalada.

Estaba espléndida , las vacaciones le habían sentado bien , al pasar al lado nuestro dejó un aroma a mujer mojada mezclado con una fragancia suave que erizaban los pelos.

Siempre me excitó mi esposa .

-Prepararé la ensalada mientras se toman algo – dijo

Charlando y cenando se nos fue pasando la noche y Luis nos comentó que había un baile en una discoteca del pueblo , nos miramos con Lucía, hacía mucho que no saliamos a bailar.

-Buenísimo!- exclamó Lucía – ¡Dale Carlitos , tenemos que ir! – insistió entusiasmada.

-Y bueno porqué no? – le dije mientras me ponía de pie.

-Si me esperan que me cambie , me podrían acercar? –preguntó Luis

-Si dale, te esperamos – respondí

Luis se retiró a arreglarse.

Llegamos al lugar , típico baile de pueblo , muy entretenido y musisca divertida.

Bailamos como cuando teníamos veinte , y tomamos bastante , a Luis lo perdimos en un instante de la noche pero luego lo vimos en la barra del bar solo, y Lucía lo invitó a la mesa a tomar una cerveza .

A mi no me daban mas las piernas del baile y comenzó a sonar un grupo favorito de mi esposa que quería que la sacara a bailar , insistió tanto y tanto que le dije :

– y bueno sacá aLuis si querés bailar .

ella me miró, torció un poquito la boca .- porqué no – dijo , y salió con el pobre Luis de tiro.

Bailaron un buen rato, conversaron y se rieron.

Lucía estaba chispeada por la cerveza y comenzó un jugueteo. Me miraba sobre el hombro de Luis y cada vez que pasaba frente a mi se pegaba mas a Luis .

Yo me sonreía y me encogía de hombros , ella se reía. No creo que Luis se diera cuenta que ella me quería dar celos.

Luego de bailar volvieron a la mesa .

- No sabes lo bien que se mueve Luis, mi amor- me dijo con picardía.

- Si , ya lo ví –le respondí – pero estaba mirando lo bien que se mueve aquella morocha y que buen culo tiene! – agregué

- ¡tarado! .- explotó – pero seguro no se mueve como lo hago yo en la cama , ja ja – agregó pegada a mi oreja , mientras me abrazaba el cuello.

-

Así pasaba la noche hasta que decidimos irnos a la cabaña , destapamos otra botella y nos sentamos en el living .

Lucía y yo en el sofá y Luis en el sillón, haciendo tiempo para que abrieran la administración ya que tendría que trabajar.

Tomé el control remoto y comencé a hacer zapping , puros canales religiosos , de pastores y demás , hasta que en uno había una película bastante subida de tono.

-Pff cambia eso! ; me dijo Lucía

-Porqué , hay menores acaso aquí? - le contesté burlonamente. – A ti te molesta Luis?

- No, hombre necesito algo que me despierte que me está entrando una modorra ¡

- Y si -agregó Lucía- con todo lo que tomaste.

Continuamos sentados mirando como una srta se preparaba a hacerle una mamada al actor de turno , que desenfundó tremendo aparato ,que no demoró en engullir.

Pahh – exclamó Luis , se ve que esa mujer sabe lo que hace.

Largamos una carcajada que sirvió para que Lucía se sintiera un poco mas cómoda, ya que yo la veía nerviosa.

Eso no es nada -dije yo – a mi me lo hacen mejor.

Un codazo en la costilla fue la respuesta de Lucía que se puso colorada.

-Pero mi amor ,es una virtud que una mujer no debe despreciar – agregué

Con mi mano sobre su hombro, comencé a hacerle pequeñas caricias sobre la tela de la blusa en sus senos. Desprendí un botón, Lucía se movía nerviosa.

Solo la luz de la pantalla nos iluminaba y Luis con los ojos fijos en la pantalla.

La escena era una despampanante rubia , en plena tarea con su amante , mientras su marido había salido al trabajo.

El amante portaba tremenda herramienta y ella lo saboreaba como a un helado.

El cuerpo de la rubia estirado sobre la cama era espectacular., Luis estaba hipnotizado y no se daba cuenta que yo ya tenía toda una teta de mi mujer en la mano ,mientras hacía rodar su pezón entre mis dedos.

-No tenés frío?- le pregunté a Lucía

Lucía me miró sin entender la pregunta

Me levante y traje un frazada poniendola sobre nosotros , quedando cubiertos del cuello hacia abajo.

A todo esto la trama de la película tuvo una variante , regresó el marido y encontró a la pareja en pleana faena.

-Se complicó!-dijo Luis .

Pero el marido , lejos de enojarse , se sentó al borde de la cama a observar como su esposa engullía semejante pedazo.

Ya con la frazada cubriendonos y en la penumbra de la habitación , encendida por la peli y la situación , Lucía se dejó hacer , y sus pechos jugaban libres entre mis manos haciendo suspirar a la dueña , que me puso una mano en el paquete .

El marido de la tele ayudó a desvestir a su esposa , y su amante comenzó a comerle la concha con extrema delicadeza , los gemidos de la chica llenaban el living , amortiguando los suspiros de Lucía , a quien se le había agitado la respiración , ya que sus tetas eran amasadas por mi debajo de la frazada.

Metí mi cabeza bajo la frazada , para saborear ese par de tetas hermosas que siempre me enloquecieron.

La situación era riesgosa , pero ya de novios habíamos tenido alguna experiencia donde podriamos haber sido sorprendidos , y esa adrenalina nos encantaba.

Mientras tanto Luis no se daba cuenta de nada , su sillón ubicado mas adelante del nuestro y la escena en la pantalla impedía que observara lo que sucedía detrás de el .

Mi lengua atacando los pezones de Lucía no demoró en encenderla , apenas contenía los suspiros y algún gemido se le escapaba.

Con una mano apretaba mi cabeza contra sus pechos y con la otra intentaba liberar mi pija , cuando lo logró se deslizó bajo la frazada y comenzó a chupetearme la pija con delicadeza como para no despabilar a nuestro invitado.

Este se retorcía incomodo por la calentura que le provocaba la rubia de la tv , sin percatarse de lo que hacíamos nosotros.

La mamada de Lucía era espectacular como siempre , mi pija ensalivada desaparecia entre sus labios .

Bajé mi mano por entre las piernas de Lucía y comencé a frotarle su conchita, que ya estaba inundada.

Un fuerte suspiro se escapó de su boca , rellena por mi miembro .

Fue ahí que Luis giró la cabeza.

Ojos de asombro llenaron su cara , pero educadamente atinó a levantarse para retirarse. Le hice una seña con la mano que se quedara quietito.

Luis entonces tomó asiento y comenzó a disimular, siguió mirando tv.

Mientras tanto , Lucía ,ajena a todo esto, seguía bajo la frazada devorandome

A la rubia de la Peli ya la habían desnudado y estaba mamando al marido, mientras el amante le chupaba la concha.

Los gemidos de la rubia se hicieron mas fuertes sirviendo para disimular los gemidos de mi esposa.

Pero ya no era necesario disimular , Luis alternaba su mirada entre la pantalla y el sofá en que nos encontrabamos nosotros.

En un momento incorporé a Lucía y me metí yo bajo la frazada para probar ese nectar que destilaba su entrepierna.

Le quité pantalón , tanga. y desde abajo podía observar que Lucía inquieta relojeaba a Luis que seguía pegado a la pantalla., disimulando.

Lucía estaba por estallar, su cuerpo se estremecía – vamos a la habitación –me pidió

Tienes sueño?- le pregunté picaramente

-Si – me contesto con una sonrisa.

-Ven, recuestate-le dije, y la senté sobre mis rodillas abrazandola contra el pecho y tapandonos con la frazada

Mi pija dura como estaca, fue buscando la posición y se deslizo dentro de su conchita , provocando un gemido que se escucho en toda la casa.

Lucía apretó los labios con miedo.

-Tranquila – le dije y la abracé

Estuvimos así unos minutos , abrazados y tapados. Su cadera comenzo a moverse lentamente , frotando su pubis contra el mio , provocandome una sensación increíble.

-Ahora no necesitamos nuestro amigo invisible-le susurré- Está aquí con nosotros.

Ella solo asintió con la cabeza , mientras con los labios apretados comenzaba un sube y baja.

La frazada resbalo sobre su espalda y Lucía atinó a levantarla, rapidamente la abracé y le di un dulce beso en los labios , la mire y le dije:

-No olvides que te amo y estás conmigo.

Me besó apasionadamente y nos fundimos en un abrazo.

Ahora ya su espalda desnuda era recorrida por mis manos , su cadera subía y bajaba sobre mi pija , Luis ya no miraba la tele nos miraba a nosotros.

La luz de la pantalla iluminaba la blanca espalda de Lucía , que subía y bajaba sobre mi miembro .

Su cara tensionada , sus dientes apretados y su respiración me indicaron que el orgasmo era inminente.

Le hice una seña a Luis, que se acercó y tomé su mano poniendola sobre una teta de mi mujer.

Lucía se estremeció, y me miró , estaba al borde del clímax, podía sentir la vibración en su cuerpo .

-Tranquila…-le susurré en la oreja

Luis se paró detrás de ella y comenzó a masajear sus pezones , el orgasmo de Lucía no se hizo esperar. Pude sentir las convulsiones de su conchita , al tiempo que su espalda se arqueaba , su polvo duro unos minutos , cayendo luego sobre mi pecho .

La recosté de espalda sobre el sillón , mientras la acariciaba , me situé entre sus piernas y comencé a mamarle la conchita , lentamente al principio , Lucía continuaba con los ojos cerrados.

Mientras mi lengua recorría sus labios íntimos , Luis se arrodilló al costado y comenzó a besar sus pechos.

La respiración de Lucìa se aceleró , pero no abrió los ojos.

Al saberse saboreada por dos hombres, el efecto llegó como un relámpago a su concha que se inundó , haciendo que mi lengua chapoteara entre su clítoris y sus labios.

Luis parece que hacía un buen trabajo con las tetas de mi mujer.

-ahhhh….ahhhh …aaaaajjhh- exclamaba mi esposa.

Abrió los ojos para mirarme y decirme:

-Por favor mi amor…ponemela yaaaa , quiero sentirla dentro ahoraaaa…

Yo ya no daba mas , tenía la pija por explotar , giré a mi esposa sobre si misma, quedando de rodillas sobre el sofá , con las manos apoyadas sobre el respaldo.

Parado detrás de ella , me disponía a cumplir el pedido de mi mujer

-Bueno mi amor –le dije- pero que hacemos con el pobre Luis?

Luis a todo esto había quedado de pie observando la situación, mientras se tocaba el bulto por encima del pantalón.

Lucía le hizo una seña ,que Luis entendió enseguida y se sentó sobre el respaldo del sofá , mientras se sacaba el pantalón y la camisa .

Con mi mujer entregada , mientras frotaba mi pija en su concha y esta hurgaba entre el boxer de Luis yo estaba en una nube de placer.

Seguidamente dejé que mi pija se hundiera en la concha lubricada de mi mujer, mientras esta liberaba la pija de Luis de su prisión.

Ya libre del boxer la pija de nuestro amigo asomó en todo su esplendor , una hermosa verga muy gruesa aunque un poco mas corta que la mia, que se encontraba apuntando al techo , síntoma que su dueño se encontraba muy excitado.

Mi mujer la tomo con una mano mientras con la otra le acariciaba los testículos , miró hacia atrás donde yo estaba sin perderme detalle y comenzó a pasarle la lengua con mucha sensualidad por la cabezota , que a mi me pareció demasisado grande,pero que vi desaparecer entre los labios de mi mujer.

Lucía no me quitaba los ojos de encima mientras le mamaba la verga a Luis con total maestría.

Ella sabía como me calentaba esa situación y cumplía su papel a la perfección.

-Amigo-dije mirando a Luis- te van a hacer una mamada que nunca en la vida soñaste.

Luis sonrió con la cara desencajada , las caricias de mi esposa le estaban haciendo efecto.

Así seguimos un buen rato , yo aferrado a las caderas de mi esposa , embistiéndola sin piedad , dandole pija como nunca , mientras esta devoraba la verga de Luis que apenas le cabía en su boca , cuando la sacaba de su boca me observaba a mi y se sonreía,pero siempre sin soltar la verga del amigo que la pajeaba sin cesar.

Mi mujer estaba disfrutando como una loba , ya había tenido otro orgasmo hacía unos minutos y estaba desencadenando otro , Luis había comenzado a resoplar , yo no podía aguantar mucho mas.

El morbo de la situación se apoderó de mi y sentía como un volcán que iba a hacer erupción por la punta de mi pija. Quería prolongar el placer pero era incontenible , con unos gemidos impresionante y el cuerpo tensionado , aprete la cintura de mi mujer mientras se escuchaban las palmadas de mis bolas sobre las blancas nalgas de Lucía y exploté derramandome en su interior en una serie de convulsiones.

-Ahhh ¡ ahhhh mmmm ahhhhhh…..- exclamé mientras derramaba hasta la ultima gota en esa concha hirviendo .

Lucía al sentirme acabar me aprisionó intentando llegar a su polvo , que estaba ahí ,al borde ., miró hacia atrás y su carita suplicante presagiaba otro polvo fenomenal . intenté seguir pero ya me dolía la pija de tanto darle.

Me daba pena dejarla a medio camino de un polvo.

Salí de su interior y la acaricié la espalda , su cuerpo temblaba , ella seguía mamando , la pija de Luis aparecía toda mojada.

-Voy hasta el baño- le dije y le di un beso en el cuello, ella asintió con la cabeza,resignada.

Mientras estaba en el baño sentí como conversaban , me apuré porque quería ver el momento en que Lucía ordeñaba a Luis , exprimiendole hasta la ultima gota.

Mientras iba por el pasillo ya no se escuchaba nada mas.

Llego al living y lejos de haber terminado, encuentro a Lucía acostada boca abajo ,con la cabeza escondida en sus brazos una pierna algo flexionada dejando ver su conchita humeda y rosada que estaba a punto de ser ensartada por la verga de Luis, que se había enfundado un condón y agarrandola por la base ya estaba en la puerta de entrada.

Me quedé parado y vi como Lucía levantaba rítmicamente la cadera deseando ser cogida,para poder liberar ese polvo que yo había iniciado.

Me senté a su lado , ella me miró suplicante.

-Mi amor …- dijo con la voz temblorosa – quedate conmigo

-Claro que si…tranquila amor está todo bien , yo estoy contigo –le dije tranquilizandola.

A todo esto Luis le dejó ir todo su miembro hasta los huevos , lo que logró una exclamación de mi esposa , que se aferro a mi. Lentamente nuestro amigo comenzó un mete saca que hacía vibrar el cuerpo de Lucía

Las embestidas de Luis iban en aumento y yo veía como se perdía su pija en el interior de mi esposa.

La situación me ponía a mil y mi pija comenzó a recuperar su posición ideal , Lucía se dio cuenta y me la acaricaba .Cuando ya estaba durita me la empezó a mamar incorporandose un poco.

Sus tetas se bamboleban a los impulsos de Luis , los gemidos de Lucía eran ya alaridos ,llegando a su último polvo de la noche .

Las venas del cuello de Luis estaban por estallar , sus fuertes brazos tenían aprisionada a mi Lucía , dandole pija enfurecido.

La voz de Lucía temblaba ante los embates del muchacho .

Me miró con ojos llorosos –¡¡ voy a aaaacabarrrrrrr…!!!.murmuró mientras estallaba en un espectacular polvo que le dejó los ojos en blanco.

Luis resoplaba y se veía no iba a durar mucho , con la pija empapada me puse de pie y ayudado con la boca de mi esposa ,acabé otra vez sobre sus tetas ,mientras Luis se desarmaba en una convulsión dentro de la concha vapuleada de mi esposa.

Nos abrazamos con Lucía , estábamos exhaustos pero felices.

Después de un abrazo que duró una eternidad nos fuimos a duchar .

Cuando salimos , Luis ya no estaba.

Nos dormimos y al despertar cargamos nuestros bolsos y partimos.

Nunca mas vimos a nuestro amigo ni volvimos a saber de el .

Alguna que otra noche recordamos lo que vivimos y volvemos a tener el mejor sexo de nuestras vidas , pero ahora nuestro amigo imaginario ya tiene nombre, se llama Luis y el recuerdo de esa noche es el mejor combustible para cuando la llama de nuestra pasión decae.