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NUESTRA PRIMERA VISITA A UN PUB LIBERAL (1)

"100% real, tal y como sucedío aquella noche. Primera visita a un pub liberal."

 

Hola a todos, esto que a continuación os relatamos es tal como sucedió 100% real, compartimos nuestra experiencia para que le pueda valer de ayuda a alguna otra pareja que se encuentre en la situación que nos encontrábamos nosotros hasta ese día, es decir pareja con 0 experiencia, muchas ganas, mucha curiosidad y mucha incertidumbre por el miedo a lo desconocido.

Somos una pareja de Madrid, 34 años él y 32 yo, físicamente somos normales, nos cuidamos un poco pero sin obsesionarnos podemos calificarnos como del montón eso sí de la parte arriba jejeje.

Todo comenzó hace algún tiempo que salió a la palestra el tema de los tríos, yo he de confesar que siempre me había atraído pero pese a tener confianza con mi chico nunca se lo había confesado abiertamente, pero un día surgió el tema y le comente que le parecería invitar a una chica a unirse a nosotros, como os podéis imaginar no dudo ni un solo segundo jejeje, hombres…. Yo siempre he sentido cierta atracción por las mujeres de pechos grandes así que se lo comente y él más contento aún. Empezamos a ver páginas de contactos buscando una mujer sola que encajase, pero nada, buscamos por el chat pero peor aún, así que nos planteamos la opción de ir a un “pub liberal” buscamos información sobre el tema y el que más se correspondía a lo que buscábamos era FUSIÓN, por el tema gente de nuestra edad, por el tema de que lo sábados noche sólo hay parejas y por el tema de que la gente que lo frecuenta va menos a saco, o por lo menos esa conclusión habíamos sacado después de un tiempo buscando información por la red. Una vez decidido el sito, nos marcamos como fecha la más cercana a nuestro aniversario, ya que esto lo consideraríamos un regalo mutuo de aniversario. Ahora sólo nos faltaba hablar entre nosotros todas las posibles opciones y que cosas queríamos y que cosas no, que estaríamos dispuestos a hacer y que no, para que cuando llegase el momento los dos disfrutáramos del momento al 100%.

Acordamos que nuestro primera opción sería conocer el ambiente tranquilamente sin ningún tipo de obligación de ninguno de nosotros, y así lo hicimos.

Llego la noche como os podéis imaginar los dos estábamos con una mezcla de nervios, miedo y excitación. Nos arreglamos, fuimos a cenar tranquilamente y cuando serían sobre las 12.30, allí estábamos, llegando a la puerta con un nudo en la garganta. Nos miramos, me pregunto entramos?? Y le respondí venga. Qué mal se pasa hasta que estas dentro, una vez allí nos preguntan si conocíamos el pub?? Respondemos que NO, es la primera vez que venimos por aquí y tampoco conocemos ningún otro pub similar. Nos enseñar el local y nos explican básicamente el funcionamiento del ambiente, regla primordial el RESPETO, aquí nadie hace nada que no quiera.

Aún con el corazón a 160 pulsaciones, nos quedamos en la barra pedimos un par de copas, con la intención que el alcohol nos ayude a serenarnos, nos vamos a la zona de los sofás, con la intención de ir viendo el ambiente, vemos algunas parejas charlando otras, tomando sus copas y otras de paseo, a ambos nos extraña la naturalidad con la que la gente está.

Una vez más calmados decidimos dar un paseo y ver detenida mente las instalaciones y lo que allí sucede. El cruce de miradas con otras parejas, los gemidos que salían de no se donde todo esto mezclado con unas gotitas de ron, hace que la excitación se dispare, por lo que decidimos cambiarnos y ponernos más cómodos nos colocamos en un sofá tranquilo al final de jacuzzi y empezamos a intercambiar opiniones de lo hasta ahora vivido e ideas de como nos gustaría que siguiese la noche, los dos estábamos de acuerdo que lo que buscábamos es el morbo de estar los dos con otra chica, como creíamos que eso sería casi imposible, acordamos que como primera toma de contacto estaría bien ver y ser vistos y que según se desarrollase la noche veríamos que límites poníamos.

Vimos en la zona de las camas una pareja, ella solo con un conjunto de ropa interior y el bóxer tumbados en acariciándose.

Mi chico y yo nos miramos y pensamos que podría ser interesante preguntarles si les molestaba que nos pusiéramos alado, a lo cual ello respondieron que por ellos no había problema. Nos tumbamos dejando a la otra pareja a mi espalda con apenas un metro de separación, nuestra presencia parece ser que les resulto excitante ya que a los poco segundos la temperatura subía por momentos, ella se había quitado el sujetador dejando al aire sus pechos y él empezó a besarlos y lamerlos. Al ver esto nuestra excitación se disparó y en apenas dos segundos estábamos en una situación muy parecida a ellos, yo les miraba mientras mi chico no paraba de besarme, lamerme y mordisquearme los pecho, estaba súper excitada lo cual noto mi chico a bajar su mano a acariciarme mi sexo, me miro con una mirada cómplice y empezó a meterme un dedo dentro sin dejar de lamerme los pechos por unos momentos cerré los ojos estaba disfrutando como pocas veces, al abrirlos y mirar hacia nuestros vecinos de cama pude ver como habían cambiado las tornas, él estaba ahora tumbado y ella empezaba a bajar con su boca hasta llegar a polla, la cual ya estaba en un estado de erección más que evidente, de un golpe se la metió entera en la boca, la saco muy despacio y empezó a lamerla como si de un helado se tratase, yo viendo esto estaba que me moría y quería más así que invite a mi chico a bajara con su lengua hasta mi clítoris y que comiese entero, disfrute como pocas veces era una mezcla explosiva estaba viendo una espectacular mamada a escasos centímetros de mi mientras mi chico me lamia el clítoris. Le pedí que parase, ya que si no paraba conseguiría que me corriese y aún era muy pronto quería alargarlo lo más posible. Le dije túmbate que ahora te toca a ti, se tumbó y ya tenía la polla dura como una piedra, me metí la punta y poco a poco me iba metiendo cada vez más hasta tenerla entera dentro de mi boca, por unos segundo perdí la visión de nuestros vecinos, pero de repente un escalofrío recorrió mi espalda al notar como una mano desconocida me empezaba a acariciar, mire a mi chico y el me respondió con la mirada “haz lo que te apetezca” y así lo hice seguí mamándosela a él e intente acercarme más hacia nuestros vecinos, note como esa mano anónima subía por mi espalda, por la suavidad con la que me acariciaba sabía que era la mano de ella, lo que me produjo más excitación, y más cuando se detuvo en mis pechos, los empezó a acariciar a pellizcarme muy suavemente los pezones, lo que hizo que se pusieran más duros aún, bajo con sus dedos hasta mi sexo y empezó a acariciarme el clítoris, no me quedo más remedio que dejar de chupársela a mi chico y tumbarme para disfrutar de la situación. Allí estaba yo tumbada con mi chico lamiéndome los pechos y nuestra vecina acariciándome el clítoris, pocos segundos después empezó a meterme un dedo y ver el estado en el que me encontraba mi miro con una mirada picara y su boca empezó a lamerme el pecho que mi chico dejaba libre sin dejar de meter y sacar su dedo de mi coño, estada a punto de correrme pero no quería, me senté en la cama para poder coger aire y ver la situación desde otra perspectiva para intentar calmarme un poco, allí estaba a un lado mi chico y al otro ella, la vamos a llamar ANA, detrás de ella estaba él, al que vamos a llamar PEDRO.

Ana me pregunto:

que si era la primera vez que veníamos??

Le respondí:

Que sí.

Nos preguntó que nos traía por el local??

Le comentamos que como era la primera vez, no buscábamos nada concreto, sólo ver como era el ambiente e ir viendo como se desarrollaba la noche.

Ellos nos comentaron que venían muy de vez en cuando y que buscaban principalmente alguna pareja maja, con la cual juagar y ver que pasaba, que no se ponían meta alguna simplemente pasar una velada agradable.

Nos preguntaron, si éramos bi??

Mi chico respondió que NO y yo que tenía mucha curiosidad por probar y que lo que acababa de probar me había hecho tener más, eso si le advertí que no conocía mis límites.

Les comentamos que no buscábamos intercambio ya que era la primera vez que íbamos por allí y que queríamos tomarnos las cosas con calma a lo que ellos respondieron que por su parte no había problema alguno y que si nos apetecía podíamos jugar los cuatro juntos y que nosotros poníamos el límite.

Tras este pequeño KIT KAT, volvimos a estar como al principio es decir cada oveja con su pareja pero estaba vez muy muy cerca.

Volví a chupársela a mi chico y Ana hacía lo mismo con Pedro, mientras se la chupaba mi cabeza no dejaba de pensar y si invitar a Ana y que me ayudase, por una parte me moría de ganas por otra no sabía como reaccionaría al ver a otra mujer chupándole la polla a mi chico, Ana alargo el brazo y empezó a acariciarme de nuevo el clítoris, ese fue el empujón que me faltaba para invitarla, la mire y le hice un gesto con la mano ella lo entendió a la perfección y se acerco cogí la polla de mi chico y se la acerque a la boca de Ana, saco la lengua y empezó a lamerla mientras yo se le pajeaba a la vez buffff …. Qué situación tan excitante, morbosa y rara ver como otra mujer chupaba la polla de mi chico y mirarle y ver su cara de excitación, Ana no dejaba de follarme con su dedito, yo estaba tan excitada como antes, a veces le sacaba la polla de la boca de Ana y me la metía en la mía, la saque de mi boca y cogí la cabeza de Ana hasta que se la metió entera en la boca, yo para aliviar mi excitación empecé a chuparle las tetas Ana eran unas tetas preciosas, duras, con un pezón que invitaba a ser devorado y no pude evitarlo, las chupaba, las mordía, las lamía cada vez a un ritmo más frenético, mientras Carlos se había retirado un poco y observaba la escena, al igual que otra pareja que se había detenido a los pies de la cama, el sentirme observada me excito aún más si cabe. Le pedí a mi chico que me follara que no aguantaba más sin su polla dentro de mi. Me puso a cuatro patas y de una embestida me la metió entera hasta el fondo, empezó a follarme fuerte, parecía que me iba a partir en dos pero eso es justo lo que mi cuerpo pedía notar una polla dentro de mi follándome salvajemente. Ana se tumbó justo delante de mi y pudo reprimir las ganas de volver a comerme esas tetas mientras estaba siendo follada bestialmente. Era difícil meterme las tetas de Ana en la boca ya que mi chico con sus embestidas hacia que esto fuera una cosa imposible. Levante un segundo la vista para coger aire y allí a los pies de la cama había un par de parejas observado, una de ellas, ella estaba de rodillas chupándosela a él y la otra el chico era quien le metía un dedo a ella mientras gemía de placer. No aguante ni tres segundos más, me corrí como nunca lo había hecho, todo me cuerpo se estremeció, un latigazo recorrió cada centímetro de mi cuerpo liberando toda la excitación acumulada, por unos segundos me quede sin aire me quede tumbada boca a bajo en la cama con la mirada perdida en mi chico e intentándole dar la gracias por su brutal manera de follarme.

Me senté en la cama, le dije a mi chico que se acercara y que necesitaba toda su leche para mi. Empecé a chupársela de manera salvaje como él me había follado a mi, necesitaba corresponder todo ese placer que él me había dado, si bien he de decir que no me gusta que se corra en mi boca, esa noche todo era diferente solo quería sentir como su polla explotaba dentro de mi boca, necesitaba saborear su leche caliente y así se lo hice saber le dije:

Quiero que te corras en mi boca, que me la llenes de leche, lo quiero todo para mi!!!

El me agarro del pelo empezó a follarme la boca, me la metía entera dentro notaba como estaba apunto de correrse, la saco un poco y empezó a correrse como nunca la excitación era tan grande que mientras se corría me tiraba del pelo, eso junto con el sabor de su leche caliente rebosando mi boca me puso súper cachonda, nunca antes me lo había tragado es más muy pocas veces se había corrido dentro de mi boca, pero esa noche necesitaba saborear hasta la última gota, y así lo hice.

CONTINUARÁ…

Datos del Relato
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