Entre las mujeres hay un dicho que se repite siempre desde tiempo de las abuelas, para satisfacer a tu marido en la cama tiene que ser una puta, pero en mi se materializo en todo el sentido de la palabra, les voy a comentar junto con David esta historia que nos sucedió en una noche desenfrenada.
David; Una de nuestras fantasías como pareja es que mi mujer se ponga a putear en la calle y yo la “levante” con el auto e irnos a tirar a un hotel, ya lo habíamos hecho una vez y salió de maravillas, la deje en una esquina con un vestido super ajustado y super chico, a eso de la una de la madrugada, me doy la vuelta a la manzana para el carro converso con ella y la subo, en el hotel le doy dinero y nos ponemos a tirar muy rico, esta noche prometía el mismo placer, separamos la habitación, fuimos a la habitación del hotel, se cambió se puso un vestido muy corto y ceñido sus sandalias de taco 9, sin medias (era verano e inclusive en las noches hace calor), salimos en mi auto y fuimos a una disco-bar a tomar y calentarnos, a eso de la 1:30 de la mañana salimos, ella había tomado y estaba alegrona y bien excitada, estábamos llegando al lugar que es una avenida poco concurrida, ella tiene su teléfono, marque su número, para estar comunicados todo el tiempo mientras me doy al vuelta a la manzana, me puse el auricular del teléfono para poder manejar tranquilo, le deje en la esquina ya convenida, y empiezo a dar la vuelta por la manzana, para “levantarla”
Kiara; Me baje del carro y puse en la esquina, estaba con tragos y media cachonda no me importaba, me gustaba sentir la sensación de una puta, que la miren, que toquen el claxon, que disminuyan la velocidad, todo eso, ni bien baje se sobreparo un auto un viejo feo, me dijo sube, no le dije, estoy esperando a un cliente, y me moví en dirección opuesta, arranco y se fue, vino otro auto, en el había un tipo bien plantado, muy elegante, guapo, me dijo:
"Hola, hola respondí".
"Te llevo a un sitio me dijo", "depende de cuánto tengas", le dije.
Cuanto necesito tener me pregunto, yo obvio estaba haciendo tiempo y le solté una cifra como para que se fuera, son 300 le dije, 300 dólares, por una hora, y lo que paso después me dejo pasmada, ya me dijo sube, y cuando me dijo eso, la verdad sentí una comezón en la concha, y sentí que me mojaba, no sé por qué , pero lo sentí, haber muéstrame, me saco los billetes, para esto vi que el carro de mi marido daba la vuelta por la esquina, sube me dijo, yo pensé es ahora o nunca, y me subí, creo que fue una reacción instantánea, o sé qué, pero subí, me empezó a hablar educadamente, me dijo quieres un hotel o mi Dpto. Hotel le dije, es más por acá hay uno cerca (era el hotel donde tenía la habitación con mi marido), mientras me sobaba las piernas con sus manos calientes y suaves, fuimos al hotel, entramos por el estacionamiento, el bajo pido una habitación, nos fuimos directo.
David; mientras conducía, escuche como mi mujer espantaba al pobre tío que se paró a querer llevársela, mi pinga esta al palo demás está decirlo, escucho la otra conversación de otro tipo que se detiene y le pide los 300, para eso ya estaba en la esquina y lo que escuche y vi, me dejo helado escuche que le aceptaba la propuesta, ella dudo un momento y se subió, al auto, no lo pude cree, escuchaba como conversaban, y que se iban al hotel donde nosotros estábamos, al menos eso dije, mientras pensaba en cómo se tiraría este extraño a mi mujer esta con la pinga totalmente erecta, me detuve una cuadra antes, deje que ellos entraran primero, una vez que escuche que mi mujer le pregunta que habitación nos tocó, es la 303, le dice, Oh no, era la habitación que estaba en el mismo piso de la nuestra, entre al hotel y me fui a la habitación
Kiara; entramos a la habitación, pero antes de llegar en el ascensor me metió la mano a la concha, al culo, me agarro todo lo que quiso, pues era sabedor que en ese momento le pertenecía, entramos a la habitación y me dijo me voy a dar un baño, se desnudó, cuerpo atlético, culo bien formado (se ve que era un asiduo asistente a gimnasio), vamos me dijo, ok, pero primero págame, ah sí me dijo, toma y saco los billetes, eran de 50 y 20, a medida que me entregaba los billetes me sentía que me estaba mojando lentamente, pero en mayor proporción, estaba super mojada, recibí el dinero, le dije ayúdame a sacarme el vestido, me lo saco, le llevo a la ducha nos bañanos, me pidió que le chupara su verga, con gusto se lo hice, no dejaba de pensar en los 300 dólares y las cosas que me compraría, un vestido, no una cartera, mejor zapatos, en fin, terminamos de bañarnos nos fuimos a la cama, y se echó encima mío, empezó a tirar, lo hacía despacio, como si fuese su novia, ah pensé este no va acabar nunca, le dije, dame duro papi, me gusta fuerte, empezó a darme con fuerza, luego le dije, yo te cabalgo, y me senté en su verga y empecé a cabalgarle, me movía como una licuadora, gemía fuerte, la verdad que lo hacía más que para que este excitado, pues no daba como para gemir, el tipo cerraba los ojos, me tocaba toda, en una de esas sentía que me quería levantar, como para que no continúe, le di con más fuerza, sentí su verga bien dura, y en eso ya no pudo aguantar y se vino, habrán sido 5 minutos que duro, no pudo más, estuvimos echados, viendo una porno, ya faltaban 20 minutos, quiso otro le hice un perrito, ahí empezó a darme y embestirme a lo bestia, muy fuerte, ese era su especialidad al parecer, me movía para que se venga y me hizo venir a mí, continúe así hasta que se vino.
Me fije la hora, le dije ya estamos terminando, me empecé a cambiar él me dijo te acompaño, no le dije me voy sola, ah toma esto para tu taxi, me dio 10 dólares más, y Salí, como sabía que mi marido debía estar en la habitación, pues me fije en el teléfono y seguía prendido, toque la puerta, y la empuje, entre a la habitación donde estaba mi marido y yo radiante le dije, mira lo que me gane, y después de todo no fue tan difícil le dije, escuchaste todo le pregunte, si me dijo, ah ok, ya no te cuento entonces, déjame bañarme por segunda vez para tirar le dije.
David & Kiara