Historia sorprendente si la hay.
Sucedio hace algùn tiempo, estando yo de novio
y disfrutando de una noche como cualquiera en un
concurrido bar de Buenos Aires. Estaba junto a
mi pareja, mirando bailar a la gente, que empezaba a correr las mesas del lugar para disfrutar de una calurosa noche. Observando a
hacia ese lugar adverti la permanete mirada de
una rubia, pulposa ella, muy atrevida que no dejaba de posar su mirada sobre mi lo que despuès de un rato empezò a incomodarme, por la presencia de mi novia. Yo solìa serle infiel, pero la suituaciòn estaba por sobrepasarme, asì aprovechando la oportuna apariciòn de una amiga de
mi novia, y en un descuido, aproveche para, hacer
un gesto hacia la rubia a quièn invite a encontrarla en un pasillo contiguo a los baños.
lo que siguiò no llevò màs de diez minutos, pero las palabras brillaron por su ausencia, ya que sin medir las consecuencias entrelazamos nuestras
lenguas de manera feroz, casi que ademas de darnos placer, pareciamos querer lastimarnos. Las manos empezaron recorrernos locamente, y sus pechos subitamente se me ofrecian generosos frente
a mi boca pidiendo a los gritos mi lengua que no
tardo en humedecerlos, hasta erectarlos, endurecerlos de manera increible. En n poder penetrarla, por al situacion y el lugar, me enloquecia, pero sabiendo la situacion tomo mi mano y casi me obligo a masturbarla. Entonces mis dedos parecieron quemarse, por sus jugos, y su cadera que no paraba de moverse. A todo esto mi pija, casi estallaba, de mi pantalon. Segundos mas tarde, tomo mi mano, otra vez, para que compartieramos el sabor de esos jugos que hervìan
en nuestras bocas.. La sentì sacudirse por un orgasmo tan intenso... Nos calmamos, y una
una vez recuperada la respiraciòn, me susurrò, si
me animaba a preguntarle la edad. Cuando asentì,
y me dijo 16, me sorprendì, pero a la vez me
excitò aùn màs. Ella me dijo, si recordaba que alguien esperaba por mi en el bar. Sonreì y le pedi un telefono donde ubicarla, informaciòn que me nego rotundamente. Entonces volvio a recordarme
que no haga esperar a mi novia, sin antes pedirme
que no terminara la noche sin hacerle el amor, con quien me compañaba, pero sin dejar de pensar en ella. A lo que obedecì casi sumisamente...
lo que paso màs tarde entre nosotros, seguramente
aparecera por aqui pronto...