Brooke baja las escaleras luciéndonos cómo vistiéndonos adicionalmente exhibiéndonos con una divina belleza corporal de su figura cómo silueta hasta perfil femenino de talla pequeña cómo de estatura botas negras de tacón alto primorosamente con falda corta cuerina con ligas y suéter amarillo que de pie; al bajarse el suéter al estomago en que se soba cómo agarra también aferra además aprieta sonante sus senos y pezones continuamente. Qué se levanta la falda cuerina al llevarse la mano a su clítoris y debajo de la propia vagina al masajeársela cómo sobársela hasta jugueteársela también calentársela igualmente emocionársela especialmente bailársela parecida a toda una prostituta de barra tan bien lleva el ritmo sonriéndose en que se agacha a las piernas que la abre al entrarle al darse una merecida cómo soberna chupada al mismo tiempo mamada aumentando la propia intensidad corporal de la buenísima, riquísima y sabrosísima pinga que se le asoma en su propias narices y ojos a Brooke. Deseada, deleitada, sedienta, enajenada, hambrienta, seducida, cautivada, provocada, incitada, divertida, fascinada, asimismo besándole su ingles además de vientre cómo el mismo glande que lo tiene enorme y duro y gigantesco en que lo tiene preparado al pararse se levanta la falda cuerina abriendo las piernas que la tenía con candado al sentarse para que la follen con sus manos entrelazadas alrededor del cuello que la sostiene firmemente el amigo.

Se viene el amigo y se moja en muchos jugos vaginales Brooke que le está mamando los senos y pezones su amigo sediento, hambriento, devorante, apetitoso, suculento, exquisito y por supuesto excitado al pararse que se sube el suéter al ponerse las tiras que la sostienen del hombro y bajándose la falda corta de cuerina que se va a la cocina al abrir la refrigeradora  que sirve unas copas de vino para brindar por el maravilloso modelaje que le hizo y presencio hasta protagonizo juntos cómo a solas Brooke con su amigo y viceversa sonriéndole se lo besa al bajarse la falda cuerina que se mantiene juntas y cerrada cómo candado las entrepiernas al quedar recostada y pegada con su cabeza apoyada en su brazos y hombros al tomar vino y brindando con las copas por el buen sexo que tuvieron hace rato ambos y mucho más.