Hola !!! Mi nombre es Elena tengo 25 años y soy originaria de México, soy alta, de tez blanca, complexión media 98-65-102, mis ojos son color miel y mi cabello es rizado a media espalda. Yo siempre fui de la idea de que hasta que me casara iba a tener relaciones sexuales.

Lo que les voy a contar sucedió el verano del 2002, después tener contacto con un chico del internet por mas de 3 años, por fin nos ibamos a conocer, era la primera vez que nos veíamos... así que fui a esperarlo a la central de autobuses y desde que lo vi algo dentro de mi sintío que era él, así es... era Ernesto, un chico de 31 años, un poco mas alto que yo, algo llenito pero muy guapo, unos ojos verdes preciosos que me cautivaron desde que los vi. Lo primero que hicimos por instinto fue abrazarnos y darnos un largo beso en la boca y comencé a sentir por todo mi cuerpo una especie de electricidad que me recorría, desde ahí sentí que algo iba a suceder.

Tomamos un taxi y en el transcurso al hotel, Ernesto iba acariciando una de mis piernas, yo sentía que me derretía -déjenme les comento que yo llevaba una falda un poco mas arriba de la rodilla y una blusa sin mangas- y me decía al oído que le había gustado mucho.

Llegando al hotel donde iba a pasar una noche, se registro y como era de mañana yo tenia pensado llevarlo a conocer parte de la ciudad e ir a desayunar, pero para mi sorpresa cuando le entregaron la llave me dijo:

- Me acompañas a dejar mi equipaje???

- Le conteste que Sí...

Así que subimos al cuarto, yo iba algo nerviosa porque presentía que estando solos podría suceder algo y mas por lo que ya había sentido estando cerca de él. El abrió la puerta y me invito a pasar, así que accedí después entro él y cerrando al puerta me tomo por la cintura y comenzamos a besarnos, eran besos de lenguita, es esos que parece que las lenguas son una sola, yo creo que él era un experto en eso de los besos porque bien sabia como hacer que una se excitara mas rápido. Entre tanto beso yo ya había comenzado a mojarme, la verdad es que nunca me habían excitado tanto unos besos hasta ese momento.

Comenzamos a caminar hacia la cama y así aun besándonos, el comenzó a meter su mano por debajo de mi falda, abrí un poco las piernas para que el pudiera acariciar mi vagina sobre mi bikini húmedo y mi mano le correspondió acariciando el bulto que se estaba haciendo debajo de su pantalón... Para ese momento ya era mucho el deseo que yo tenia por sentir su cuerpo rozando el mío, así que sin mas que decir comencé a desabrocharle el pantalón y la camisa y el me quito mi falta y la blusa... los dos quedamos solo en ropa interior.

Nos tumbamos en la cama yo abajo y el sobre mi y mientras me besaba me quito lentamente mi bikini y mi sostén, yo también le quite su bóxer así que los dos quedamos totalmente desnudos, mis pechos quedaron al descubierto y mis pezones cafecitos ya estaban erectos, comenzó a besar mi cuello lentamente bajando por mis pechos, los besó y chupo muy rico, parecía un niño tomando leche, mordió mis pezones y comenzó a pasar su lengua por mi vientre, y cada vez que bajaba mas, mi vagina estaba mas húmeda y caliente... cuando llego a mi vagina carnosa y velluda se detuvo, abrió mis piernas, con sus manos separo los labios y fue cuando comencé a sentir que estaba en el cielo... metió su lengua hasta dentro de mi vagina, buscando mi clítoris y comenzó a chuparlo yo me retorcía del placer con cada lenguetazo que me daba, y le decía:

- Si bb, asiiii no pares.. chupalaaaaa !!!

El muy obediente lo seguía haciendo cada vez mas rápido y ahí fue donde tuve mi primer orgasmo, sentía como mis jugos chorreaban por mis labios hasta llegar a mi culito. Ernesto se tumbo en la cama y fue cuando me pidió que le mamara su verga, yo nunca lo había hecho, también era mi primera vez, así que me puse arriba de él y cuando lo estaba besando tomo mi cabeza y comenzó a bajarme hasta llegar a esa verga tan rica que tiene, no era muy grande pero estaba muy gruesa, la cabeza estaba roja y en tronco con venas saltadas... comencé a pasar mi lengua por la cabeza como tratando de probarla, después la pase por el tronco hasta llegar a sus testículos que eran grandes los cuales chupe, y fue entonces que de golpe metí su verga caliente en mi boca, la comencé a chupar, al principio no me gusto pero conforme iban pasando los minutos me iba gustando parecía que me estaba comiendo una paleta, entonces Ernesto comenzó a mover mi cabeza en un meta y saca, mete y saca, succionándola a un ritmo cada vez mas rápido creo que le estaba gustando como se lo hacía ya que me decía...

- Ayyy mamita que bien lo haces... cométela toda... es tuya... te la traje para que te deleitaras... quiero darte mi lechita caliente, quiero que te la tomes !!!

Yo estaba muy excitada pero a la vez con algo de miedo porque no sabia que es lo que iba a pasar, cuando de repente siento como si su verga fuera a explotar y un chorro de semen caliente se quedo en mi boca sabia algo raro pero me gusto, me tome hasta la última gota ya que con unas lamidas más limpie bien su verga. Nos volvimos a besar y entre beso y beso me dijo que le había encantado como se lo había hecho y la verdad es que a mi también me gusto lo que el me hizo. Nos limpiamos, nos vestimos y salimos a enseñarle la ciudad... pero esto no es todo, falta lo mejor de este encuentro...

¡¡Cuando fui completamente de él!!


Pero eso se los platico en la próxima... Elena