Blanc llegando y entrando a su primera cita de ortodoncia le tocá un papazote, buenisimo hasta por que no decirlo, ejemplar de hombre que le atrae muchisimo también, buen mozo de los que ya no hay ni se cuenta para nada brillando por su entera ausencia. Comienza todos los chequeos como entrevista con la paciente que es en este caso particular la querida, fascinante, divina, sexy, provocativa hasta enamorada al instante como inmediata igualmente profundamente Blanc.
Le me las piezas dentales al felicitarla tiene una dentadura bella y con una higuiene perfecta nada de caries ni dientes quebrados y bien fuertes en la misma corona; muy sonriente le pone su babero para no ensuciarle el uniforme de trabajo al acomodarselo cubriendo toda la blusa y parte del saco, mirandolo detenida sin quitarle por ningún momento la mirada de curiosa, atenta como placentera hasta confortada por los modales como la misma caballerosidad que le hace honra al apellido del odontologo que la esta atendiendo para sus frenos.
Le hace una leve profilaxis al tener la boca bien abierta con la lengua quieta por parte de Blanc, en que le conversa agradable como deleitosamente el odontologo, es una hermosura de mujer no se lo han dicho escucha Blanc, sin pronunciar nínguna palabra en absoluto. La incorpora la silla odontologica nos veremos en la siguiente cita para programarle cuando le extraemos las piezas requeridas y comenzemos el tratamiento con los frenos para ir corrigiendo esa hermosa mordida que tiene no habra ningún problema al respeto se ve que es muy bien portada y sigue extrictamente todas las ordenes y me cae simpatica espero que salgamos a cenar y tomar unas copas fuera del trabajo para conocernos un poco más en lo personal como social.
Se despide claro doctor acepto su invitación para cualquiera de estas tardes o noche sabe que soy jefa de registro me puede buscar o llamar a la misma universidad y estoy completamente a su disposición para lo que quiera conmigo hasta llevar a esos sitios de placeres y ocasionales para acostarnos y hacer el sexo divino como glorificante con su presencia sonriendole se retira quedando muy picado el doctor con lo que acabo de confesar de todo corazón, alma, cuerpo, sentimiento y cariñosamente por la boca de Blanc.