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Categoría: Incestos

Mi madre se volvió mi amante

Mi nombre es Andrés, vivo en la ciudad de Medellín, Colombia.



Tengo 34 años y vivo con mi madre, ella es madre soltera, desde niño mi padre nos abandonó y mi madre nos crio sola a mi hermana y a mí, ella tuvo varias parejas, pero nunca formalizó nada con nadie, desde hace varios años está sola, actualmente ella tiene 54 años y la historia que les voy a contar sucedió el pasado diciembre.



Como todas las fechas especiales nos reunimos toda la familia en casa de mis abuelos, este diciembre para navidad no fue la excepción. 



La mañana del 24 de diciembre mi hermana llego temprano a nuestra casa junto con su esposo y la hija de ellos (en un próximo relato les contare de mis aventuras sexuales con mi hermana) pasamos la tarde juntos y ya entrada la noche fuimos a casa de mis abuelos; disfrutamos con toda la familia, bailamos, cenamos, mi madre tomó bastante licor, cosa que es inusual en ella, pero esta vez estaba muy contenta; ya de madrugada volvimos a la casa, mi madre se dirigió a su cuarto, el esposo de mi hermana hizo lo mismo junto con mi sobrina y yo me quedé conversando un poco más con mi hermana, ella y yo somos amantes, cuando vi que todos dormían, me puse de pie y le dije a mi hermana que viniera por su regalo de navidad, mientras le decía esto me tocaba mi pene por sobre el pantalón, ella se rio y se puso de pie, nos fuimos para la cocina y de inmediato ella me sacó la verga y la puso en su boca, me hizo un oral fabuloso, se tragó toda mi leche, me dio un beso y se fue a acostar.



Yo me dirigía a mi habitación, pero al pasar frente a la de mi madre pude ver que estaba tendida sobre la cama aun con el vestido puesto, entré y traté de despertarla para que se pusiera su pijama, pero ella entre ebria y dormida me dijo: “pónmela tú”, yo saqué su pijama del closet, le quité sus zapatos y comencé a quitarle el vestido, era bastante difícil, pues ella estaba como muerta y era difícil moverla, al quitarle el vestido quedó al descubierto su muy bien conservado cuerpo, no sé por qué, pero en ese instante sentí una leve erección, me levanté, cerré la puerta de la habitación y regresé al lado de mamá, me entró el morbo y muy suavemente levante su sostén y pude ver que sus pezones atisban erectos, eso me excitó más, me agaché y con delicadeza pasé mi lengua por uno de sus pezones, ella emitió un pequeño gemido y creí que había despertado, pero seguía dormida, me atreví más y le quité su sostén por completo y comencé a acariciarle y chuparle, ella puso su mano en su entrepierna y comenzó a tocarse, pero seguía profunda por la borrachera luego de un rato, bajé mi mano y le quité sus panties, su chocho peludo quedó al descubierto, al ver aquel monte de vellos negros sentí que mi verga se iba a salir del pantalón; comencé a acariciarla y suavemente metí mi dedo, de repente miré, ella me tenía los ojos clavados, había despertado y no me di cuenta, me quedé paralizado, pero cuando yo iba a ponerme de pie, me dijo suavemente: “sigue mi niño”, yo me agaché y metí mi lengua en ese monte de vellos que tenían un olor delicioso, ella se retorcía de placer, durante mucho rato le hice el sexo oral, luego me tomó y me acostó boca arriba y comenzó a desabrochar mi pantalón y me dijo, “ahora mi niño te voy a enseñar una cosa muy rica” y comenzó a chuparme la verga de manera deliciosa, se la metía hasta lo más profundo y no paró hasta que mi leche llenara su boca; luego sin decir nada se montó sobre mí y se sentó sobre mi verga, cabalgaba de una manera extraordinaria, yo estaba a punto de desmayar de placer, luego se puso en posición de perrito y me dijo, “meteme esa verga deliciosa mi niño, métemela toda”, obedecí de inmediato y me puse tras de ella, puse la cabeza de mi pene en la entrada de su agujero y de un solo golpe la penetré, me decía: “duro, más duro, dame así muy duro”, cuando sentí que estaba a punto de llegar, saqué mi verga, giré a mamá y derramé mi leche en sus tetas, ella la tomaba con sus dedos y se la chupaba, caí en la cama y mamá con su boca terminó de limpiar mi verga.



Nos quedamos un rato tendidos en la cama sin decir nada, luego me dijo: “vete a tu cuarto, no vaya a ser que nos descubran”, así lo hice, me fui y me dormí.



Me levanté como a medio día, mi hermana, su hija y su esposo estaban ya despiertos, mamá seguía dormida, mi hermana me dijo que, si quería comer algo, le agradecí y le dije que sí, ella estaba en la cocina, el esposo de mi hermana salió a comprarle dulces a mi sobrina y en ese instante mi hermana me llamó a la cocina, al llegar me dijo:



—eres un degenerado te cogiste a mamá, yo los sentí.



Me sonrojé y al ver esto ella me dijo:



—no te preocupes, me parece bien, mamá necesita de un macho y tú lo haces muy rico, yo también he tenido encuentros lésbicos con ella, pero siempre me decía que quería un macho y que bueno que seas tú, solo espero que no dejes de cogerme a mí, porque ahí si me daría rabia.



Le dije que estuviera tranquila, que había Andrés para las dos; me dio un beso en la boca y me acompaño mientras comía, luego llegó su esposo, despertó mi madre y ya entrada la noche se despidieron y de nuevo quedamos mamá y yo solos; yo estaba algo nervioso, pues esperaba la reacción de mamá después de la faena de sexo, yo estaba tranquilo en mi habitación cuando ella ingresó, traía un baby dooll que dejaba ver que no tenía nada debajo, me dijo:



—tenemos que hablar jovencito —y se sentó en mi cama, cuando me iba a sentar me detuvo y me dijo— lo de anoche estuvo muy mal, te aprovechaste de mi borrachera y te voy a castigar, quítate el pantalón —yo no entendía, pero obedecí, mamá me giró y comenzó a darme nalgadas y me tiró a la cama, ya en la cama me dijo— estuvo muy mal, pero a la vez delicioso y ahora quiero hacerlo en sano juicio.



Se quitó su baby dool y quedó completamente desnuda, se acostó, subió sus piernas y me dijo:



—ahora dame por detrás mi niño, quiero esa verga en mi trasero ya.



Yo me paré de inmediato, me quité el resto de ropa y puse mi pene en su ano, muy despacio comencé a meterlo y mi madre gemía y daba unos gritos muy duros, estaba muy excitada, le di por detrás mucho rato, cuando mi leche explotó en su culo, mamá se quería morir de placer, nos recostamos desnudos y me dijo que ella muchas veces me había espiado desnudo y me confesó que ella tenía relaciones con mi hermana y que sabía que yo la cogía, me pidió que pronto hiciéramos un trio, nos besamos, nos tocamos y lo hicimos de nuevo.



Desde ese día mi madre es mi amante, lo hacemos muy seguido y ya les contaré como fue lo de trio con mi hermana y otros relatos más.


Datos del Relato
  • Categoría: Incestos
  • Media: 3
  • Votos: 2
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