Soy la diablita argentina, y esta es la sexta parte de mi relato donde les sigo confesando todas mis fantasías, experiencias y las cosas que hago para despertar mi lado mas erótico.

Hola, ¿como están mis amores?, ya saben que este es el sexto relato ya; y no me voy a presentar. Pero si no me conoces: busca por mi nombre de autora (diablitaargentina) o en la categoría "autosatisfacción" y lee los anteriores, así me entendes y me conoces lo suficiente como para disfrutar mas este relato.

Ahora si: ¿como están? ya empezaron las clases hace como dos meses y por el laburo ya saben que tardo mas en publicar mis relatos, tengo menos tiempo para mi, pero no por eso dejo de tener noches calientes, de experimentar buscando placer, y de pasarla bien sobre todo. Ahora me tengo que levantar bien tempranito y a la escuela, al mediodía paro para comer algo livianito como siempre y si tengo abierta la sala de maquinas me pongo a chatear con algunos de ustedes, o por lo menos con los que me escriben. Y como siempre hago la segunda jornada hasta la tardecita y me vuelvo a casa para acomodar un poco o voy a tomar algo con amigas.

Y a la noche, dependiendo del día, a bailar o a tomar algo a algún pub y si me quedo en casa y sola: sexo. Las vacaciones fueron fantásticas, el tiempo afuera y todo febrero acá metida la verdad es que me dejo mas agotada que trabajando: en lo personal para mejorar las relaciones con los que uno quiere, a veces olvidadas por no tener tiempo y en términos íntimos: sexualmente fue diez puntos, ahora voy a contarles algunas noches perdidas y de sexo desesperado, empezando en cualquier parte de casa y terminando en mi cama. Además algunos consejitos para sexo oral, que por lo menos conmigo funcionan. Y si me queda lugar para las fantasías de enfermera y para que tengamos sexo en clave de "tu"; las hacemos.

De los masajitos de febrero voy a contar algunos, no porque no me alcance el espacio, tampoco soy tan calentona. Pero ustedes vieron que a veces se hace un poco repetitivo, no digo menos placentero; pero muchas veces me puse boca arriba, adentro unos dedos, una colada de 20 minutos y eso no puedo escribirlo todo el tiempo porque pierde la gracia. Les voy a contar las que hicieron la diferencia. O las que me dieron un orgasmo tal que tenia que escribirla si o si. Una de esas fue en febrero y en casita. Cenaba sola en un típico día de semana que a la noche no salía y normalmente era para cenar algo así nomás, comida rápida en la cama mirando tele, pero preferí comer en la mesa, y el postre se me fue de las manos. Estaba con una musculosa blanca sola (hacia calor) y con un Jean gastadito.

Cene como siempre, mirando la tele del comedor, levante todo y lave los platos así a la mañana tengo menos para hacer y para comer una banana de postre me tire en el silloncito; además quería leer una revista mientras comía. Lo único que escuchaba, porque era entrada la noche, era en la radio una canción de Luismi que me pone cachonda mal. A la primer mordida y con las ganas de coger encima tire todo arriba de la mesita, cerré las persianas, cerré todo mientras me sacaba el pantalón y la bombacha de un tirón. Me fui volando al sillón a redondear la puntita mordida con los labios y a pelarla hasta el tamaño de un buen palo.

Me puse cómoda, recostándome y separando las piernas, con un dedito húmedo me empecé a hacer el agujero y después con la banana. Primero la puntita, después de a poco hasta que la cáscara me toca los labios y ya la tenga a tope. Como lo hice sin preservativo para lubricar bien tenia que sacármela, a la boca y con mi babita para adentro de nuevo, hasta que el calor de mi sexo lo empezó a mojar y a hacer la penetración cada vez mas placentera y profunda. Con la izquierda me daba unas buenas frotadas al clítoris y me separaba los labios abriendo el paso para que con la derecha me empujara el palo para adentro hasta el fondo. Y en lugar de entrar y sacármelo, con la presión de la concha la sacaba para afuera y la empujaba de nuevo. Me baje la musculosa para liberar un poco las tetas, las tenia en punta marcadas sobre la ropa y me pedían un poco de caricias también, así que envolví con toda la palma una mama y con dos dedos atrape el pezón para darle unos tironcitos hacia afuera... estaba hecha un gata total, me gozaba de punta a punta del cuerpo y habrán pasado que se yo: 10 minutos que me dieron ganas de irme a la cama y darme con toda ahí.

Deje todo así tirado, me agarre una toalla chica del baño y para la pieza a buscar mi amor, el símil pene que me tiene muerta de tanto sexo. Puse la toallita en la cama, y aceité toda la punta y el tronco del pene (la toalla es para no manchar las sabanas). Con ese palo erecto y todo empapado me tire en la cama: cuatro patitas y con el agujero ya hecho lo único que tuve que hacer fue pasarme el aparato por abajo, apoyármelo en la concha... pasearme ese glande por los labios y clavarlo en mi cuerpo. De lo empapada que estaba yo mas el aceite que era demasiado parecía que no terminaba de entrar nunca y cuando salía parecía que tenia como treinta centímetros. Me la estaba clavando hasta el fondo y en una de esas penetraciones, la deje bien adentro y en lugar de la concha lo único que tenia entre las piernas era la base del juguete. Entonces volqué mi cuerpo hacia adelante; para sacar mas cola, y con una mano por atrás le empecé a dar cachetadas y golpecitos para que me entre mas y mas. La calentura era insoportable, hasta tal punto que me daban ganas de colarme algún dedito por atrás con eso adentro. Pero antes que todo no quería dejar pasar ese orgasmo que se venia con ganas, así que me di vuelta, me abrí bien de gambas y a hacerme una penetración con cariño, un entra-sale suavecito, pero que me recorra toda la concha. La otra mano iba directo a mi fuente de placer, a asomar el botoncito y frotarle un dedo frenético hasta el final. Para esa altura ya había dejado de mirar lo que hacia; tenia la cabeza tirada para atrás y haciéndome la cabeza con hombres que me encantaría tener así: adentro mío y bombeando sexo.

Después de masturbarme como media hora me llego un orgasmo terrible. De los que me cortan la respiración por unos segundos, temblás, te mojas y después quedas toda agitada hasta recuperarte. No por el calor del clima sino por el sexo estaba toda transpirada; parecía salida de la guerra: toda despeinada y con el cuerpo flojito. Fue un orgasmo tan bueno que no busque otro; directamente a bañarme y a mirar un cacho de tele. Pero se merecía que se los cuente y por eso: espero que les haya gustado!!

En febrero me paso de todo un poco: una vez estaba también en clímax y me cortó la inspiración el teléfono!, no hay peor cosa que estar al borde del orgasmo y que suene justo ahí y no te queda otra que atender. Y lo que cuesta después volver a ese punto. También haciéndolo con la banana se me partió una y me quede con un pedazo en la mano y otro adentro. Para que no se crean que soy una pervertida total por lo de la banana, quiero aclarar algo: bananas comí siempre por el potasio; voy al gym y esta en mi dieta semanal, no es que salgo a comprarlas para algo zafado, ok?

Otra sesión que les iba a contar fue de anal la semana pasada; me prepare porque quería un fin de semana bien "hard", hacerme una doble o por lo menos algo mas fuerte que lo normal. Aunque los sábados y domingos siempre venia alguien a casa o salía a bailar pero caso contrario, me quedaba toda la noche del sábado para experimentar el placer intimo. Y este caso que les voy a contar fue diferente porque como buena chanchita (ustedes ya me conocen...) quería anal con lubricación natural, sin aceites, entonces era ponerme saliva en la mano y llevarla para atrás... ahora les cuento:

El sábado vino una amiga que es de quedarse a dormir acá para que no este sola mucho tiempo; pero esta vez se fue antes y yo desde el viernes tenia la preparación para hacerme un anal bien completito. Ni bien se fue después de matear y charlar toda la tarde me puse bien cómoda, como si fuera a dormir. El pijama solo y una bombachita gris. Me acosté a leer una novela erótica que me prestaron ("Palabras para susurrar al oido") buscando levantar mi calor interior. Con una mano sobre la ropa, con el dedo mayor recorriéndome la raya de punta a punta, juntando las piernas y levantándolas para que se me forme un bultito en la entrepierna y tocándome por ahí sin parar... ya el libro ni me interesaba; estaba prendida a mi concha y se notaba en todo mi cuerpo. Un par más de caricias y cachetadas con la prendita corrida para un lado y después desnudándome toda: así empecé lo que terminaría siendo una cogida con todas las letras. Una doble. Toda desnuda y bien abierta de gambas puse una mano en forma de copa para echarme babita ahí y rápido a empaparme el sexo. Pero como ya estaba lista para el anal, hice lo mismo en la cola. Babita en tres dedos y al agujerito de atrás sin penetrarme; solo lubricando por fuera y resbalando hasta la raya. Me hice un poco de juego de manos hasta que me colé el primer dedo, hice un mete saca con dos (índice y mayor) y después los distribuí así: con el índice en la concha y la punta del mayor a hacerme la cola. Y cada vez que me sentía seca volvía a mojarme la mano para agrandarme los agujeros.

Así me abrí paso entre la carne caliente de la concha y el espacio suficiente en la cola para buscar el lapicito que vibra y darme por atrás. Lo prendí y me lo frote bien por toda la raya para mojarlo antes de levantar un poco la cadera y metérmelo despacito y prendido... tener ese juguete atrás que te sacuda es increíble porque me sale mas jugo intimo; la calentura me hace lubricar mal y si no me penetro por un rato y me doy por atrás así, dejo que se junte y me salga un poco en gotitas. Y con ese jugo me encanta masajearme el clítoris porque realmente es lubricante, hace que mis dedos se transformen en una lengua ardiente… Estuve solo con el anal un rato, de costado y con una gamba al aire que es una pose de anal que me gusta y también otro ratito en cuatro.

Hasta que puse el símil apoyado en una almohada doblada (una almohada que tengo para esto: para sentarme arriba). Lo chupe un poco para empezar la cogida y todo sin sacarme el de atrás; siempre dándole algún empujoncito porque se quería escapar. Me monte arriba y cuando me entro la cabeza lo solté y me agarre las tetas con ganas para sentarme pensando en el hombre que quería ahí abajo clavándome. (¡No les voy a decir quien es!). Pero mientras más me entraba mas lo veía ahí. Jugando con la doble penetración hice de todo: a los saltitos, solo con movimiento de cadera para abajo o clavarme adelante y cogerme atrás y al revés. Les voy a confesar algo que me va a hacer quedar más perra todavía; pero se los cuento igual. La excitación fue tal que a los saltos me pegaba cachetadas en la cola con ruido; para que vean que fue algo fuerte. No se cuanto tiempo paso entre orgasmo y orgasmo pero fueron dos bien seguiditos, uno sentada y para el segundo estaba dada vuelta, patitas para arriba y con el símil a full adelante. Y me di con ganas hasta que sentí la primera palpitación fuerte del orgasmo y me saque el aparato de un tirón... Terrible. Toda pegoteada con hilitos de mi sexo hasta ese pene. Fue tan desesperante como hermoso. ¿Les gusto?

Cuando termine me paso lo de siempre: me quede tirada en la cama (recuperándome) un buen rato y se me paso por la cabeza "esto lo tengo que escribir"; se los juro. Pero la verdad es que no se los iba a contar con tanto detalle. Lo que pasa es que después de tanto escribir y compartir mi vida y mi sexo con ustedes me siento más liberada, creo que aumento la confianza entre nosotros como para contarles mas cositas. Y ahora que los tengo bien calientes no me quiero olvidar de darles un beso en la boquita por la cantidad de chupones, lamidas y besitos que me mandan por todo el cuerpo en sus mails. Imagínense que me los ponen ustedes y listo, ¿si?

Ahora quiero que se acomoden bien, porque les quiero contar una fantasía que me encanta, aunque antes me gustaba más. Y de las veces que la hice voy a relatar la mejor. Así que prepárense para disfrutar del día que hice de enfermera a domicilio...

Esta fantasía la hice tanto en mi casa como en la de mi pareja de entonces. Pero esta vez la hice en su casa por una razón que era obvia: tenía un cuarto que es para huéspedes (con una cama de una plaza); y como si fuera poco, pintada de blanco. Siempre me pedía entre las fantasías mas comunes la de enfermera y yo un día le dije: "vacia el cuarto y te la hago" porque da para un cuarto de enfermería. ¡Hasta las cortinas eran blancas! Y un viernes me llamo para avisarme que el domingo era el día de la enfermera si o si; que sacaba todo y dejaba la cama y los cuadros nada mas. El sábado me acomode el disfraz completito y lo separe en un bolsito: Levante el ruedo de un guardapolvo que no usaba hasta dejarlo un poco mas abajo de la cola, cosa que me agachara y se me viera todo.

Una vincha para el pelo, las medias, zapatitos, y tanga todo de color blanco. Y sin corpiño. Arriba el guardapolvo y nada mas. Mas que de fantasear tenia ganas de coger; el me pidió la fantasía pero se la hice sin mucha actuación aunque el lugar daba para mucho mas. Pero se conformo con la ropa y con mi sexo. Llegue a su casa casi como siempre, con el bolsito que se lo mostré como diciendo "esta noche quiero guerra" y seguimos la jornada como siempre. Muchos mimos, cositas románticas como darle de comer en la boca al otro. Cenamos y bajamos un poco la panza mirando tele. Hasta que ya era hora, le veía la cara de calentura a dos cuadras y no lo quería hacer desear. Entonces le pedí que me diera tiempo, que se vaya a acostar en la pieza lista y que apague las luces. Yo, corriendo al baño a cambiarme, a hacerme la enfermera. Desnuda, deje toda la ropa que tenia puesta ahí tirada y me lave en el bidet (lo que hacemos todas cuando vamos al baño antes de acostarnos). A medio vestir me mire en el espejo del baño y no lo podía creer; los que me conocen saben que tengo cara de enfermera, ¿o no? Me saque el corpiño, me puse el guardapolvo arriba y me fui a la pieza por sexo.

Entré y cuando prendí la luz el estaba desnudo y tapado hasta la mitad con una sabana. Percibí una pequeña erección sobre la tela; pero fuera de actuar lo primero que hizo cuando me vio fue reírse porque daba de enfermera; me lo dijo y todo. Le di unas vueltas a la cama para mostrarle como me quedaba y cuando me acerque a darle un beso me metió la mano por abajo de la ropa y me manoseo toda; ahí fue cuando lo corte y me puse a actuar mas, porque estaba desesperado el pobre. La orden que le di fue que se quede quietito porque lo iba a revisar. Me subí a la cama de frente a él y ahí si le di un beso que parte labios. Flor de chuponazo. Así de frente me abrí un par de botones, liberando un pecho le mostré que no tenía nada abajo, para calentarlo más todavía. Pero lo tenia quietito, y con las manos en los costados.

Me frote un poquito con su abdomen y después me baje en la misma posición para sentarme sobre su verga. La tenía... durísima y eso que me separaba las sabanas... Ahí me llegaron las ganas de comerlo un poquito, porque no tenía planeado lo que iba a hacer; cuando llega el momento hago lo que siento. Y me gire sobre él dándole la cola y metí la cabeza bajo las sabanas a buscar mi postre. Como era la sabana lo podía ver ahí abajo, estaba translucido. Me encontré ese glande enorme y sin las manos me lo puse en la boca a enjuagarlo, a llenarlo de mi jugo y a cabezazos comerla toda. Me dijo que me la quería chupar, tenia mi cola en su cara pero no lo dejaba tocarme y aunque daba para un 69 le dije que mire nada mas, porque la vista que le daba era mas que generosa. Igual después me iba a entregar mal; solo lo estaba jodiendo un poquito. Además no la pasaba nada mal porque me soplaba en la entrepierna y con ese vientito solo me hacia temblar.

Como tenia su miembro a tal punto que me entraba solo la punta y un poco mas, no me quedo otra que agarrarlo con una mano para sacudírsela, y tirarme un poco para atrás apoyando la concha en su cara, para ahogarlo con mi sexo. Lo tuve así un ratito: pajeandolo y sentándome en su cara. Con una mano me corrí la tanga a un lado y le dije que me moje toda para sentarme en su sexo. Con unos lengüetazos terribles me recorrió toda y se paro en mi agujero para lubricarlo con una suavidad terrible. Haciendo girar la lengua como taladrando me fue abriendo los labios abajo y me metía una buena parte de la lengua adentro. Cuando me sentía mojada a full lo destape y me fui a sentar sobre esa verga. Me la frote por toda la raya primero, hice el choque de su glande con mi clítoris con una frotada brutal y para adentro. Me senté de a poco, costaba porque no había mucho espacio: quería que no me saque los zapatitos, entonces lo tenía que hacer arrodillada en la cama de una plaza. Pero una vez que lo tenia adentro y empecé los saltitos me olvide de todo; el con sus manos en mi cadera manejándome mientras yo lo agarraba de las piernas. Me daba vuelta de vez en cuando para verle la cara de goce: impresionante. Además para calentarlo me planchaba con su verga adentro y recostándome bien sacaba cola para afuera y me arrastraba para adelante; haciendo que se me marque bien la argolla alrededor de su palo. O lo cogía sacudiendo la cadera mostrándole todo.

Cuando me canse un poco le pedí que me agarre de los tacones de los zapatos así me ponía de cuclillas: una vez que lo hice empezó el a metérmela con sus movimientos de arriba hacia abajo. Estas dos poses las sugerí yo: de ahí en mas lo "desate" y le dije que me haga lo que quiera. Como me tenia agarrada de los tacones del zapato, hizo fuerza y con un tirón me puso en cuatro, se arrodillo atrás mío y me bajo la tanga. Y se vino lo mejor de la noche: cuando me clavo del todo empezó con unos choques brutales. Parecía que alguno iba a contramano y nos encontrábamos con un choque ruidoso y muy sentido. Le iba a decir que vaya mas despacio pero como no dolía... además pensaba en el y en como estaba disfrutando de su fantasía, porque no cerraba los ojos para nada, me daba y me daba. Fue así hasta que llego lo mejor. Me pidió que me agarre bien de la cama, me hizo abrir las piernas y agarrándome de los muslos me levanto en el aire (en carretilla). Le iba a decir que así no aguantaba mucho tiempo hasta que me la puso y me dio una flor de cogida. En el aire y sacudiéndome a tal punto que no me aguantaba sostenida con las manos, pero tampoco lo quería aflojar. Hasta ahí le gritaba "así, así" pero con esas sacudidas gritaba "aaaaahh" que con cada cogida subía el volumen y bajaba.

Fue algo escandaloso y de placer para que contarles... estaba en una nube. Hasta que mis bracitos dijeron basta y afloje acostándome toda despatarrada. Me dio vuelta y lo abrace con las piernas un ratito; yo estaba ahí de mi clímax, pero el llego a su fin y me acabo en la pancita. Me faltaba a mí el orgasmo, a pesar del placer. Nos bañamos juntos rapidito y a vestirme de nuevo pero sin nada abajo. Tenia algo pendiente así que seguimos con algo mas tradicional, de costado y cuando estaba llegando y tenia los brazos bien descansados le pedí carretilla de nuevo y ahí si: Me dio masa y llegue a mi orgasmo; uno de los que mas recuerdo de este ex, porque no me salio ni un grito. Me temblaban los brazos y tire la cabeza para adelante, calladita y tragándome todo mi placer, sintiendo para mi misma todo eso que me llena el alma. Él seguía con penetradas mas calmadas cuando se dio cuenta que tuve el orgasmo; porque al principio se asusto. Yo soy de las gritonas mal, pero esta vez me salio así. Cuando me di vuelta él me vio conmovido porque yo estaba riéndome y a la vez con lagrimitas en los ojos; porque fue muy fuerte. La cogida y la sensación de guardarme el orgasmo. Como había parado, me puse boca arriba y el se me subió. Así me siguió dando sexo y besos hasta su explosión en mi boca (estaba enamorada) que trague con amor y placer.

Cuando nos bañamos me contó que se había asustado un poco cuando me quede durita, pensó que me podía desmayar. Hubiera sido gracioso que me desmaye haciendo de enfermera... y después en la semana peleamos por eso (yo le decía agrandadito) y que si me desmayaba en serio, el en vez de ayudar me seguía dando... ustedes saben que me gusta pelear un poco. Esta fantasía la hice con distintos novios y como les dije, antes la hacia muy seguido. Pero elegí una que realmente me gusto por el momento que pase más que por la actuación. Y fue un momento realmente hermoso.

Para seguir el relato con consejos ayer la llame a Marucha y por teléfono le pedí tres cosas básicas que le guste para el sexo oral. A la Chechu no la veo hace tiempo porque esta muy ocupada; aprovecho para mandarle un beso. Así que van a tener el consejo de Maru y mío: cosas que me gustan y cosas que no para el sexo oral. Espero que aprendan un poco porque tienen a dos maestras (maestras en serio). Voy a ser más sencilla para escribir y voy a obviar cosas que caen de maduro, como el ambiente que tienen que generar de confianza y comodidad; y de aparentar que va a ser algo grande cuando ocurra.

Primero que todo les decimos las cosas que no se hacen: y empezamos por algo muy básico: la barba. Y peor cuando es cortita en los bigotes porque te pincha y pica muy fuerte. Acuérdense que van a la parte mas delicada del cuerpo femenino, así que bien afeitaditos. Segundo: los labios secos. Siempre mójense un poco los labios con la lengua o con un beso. Pero no junten labios de la boca con los vaginales secos porque la sensación es muy incomoda; no duele, pero es molesta y denota poca experiencia. Y otra muy importante: no desubicarse. Y con esto me refiero a algunos que se creen que están en una película y en verdad es un momento de relax y concentración. Así que tienen prohibido hablar de más, escupir para mojar, usar mucho los dedos, no buscar la cola y todas esas cosas que no hacen falta en ese momento.

Cuando la relación avance recién van a hacer ciertas cosas mas intimas y propia de los gustos que tengan. Ahora lo que si hay que hacer para arrancar placer: No voy a hablar mucho de como usar los dedos en el caso de parejas mas avanzadas, igual creo que en algún relato anterior hable contado como me gusta a mi, porque ahora prefiero aclararles cosas mas obvias cuando usen solo la boca. Como tienen las manos libres es bueno que separen las piernas y las mantengan en una posición cómoda para ustedes y para ella, que no tenga que hacer presión en las abdominales para mantener las piernas arriba. Para eso es mejor que se acuesten con la cabeza a la altura del pubis, agarren las piernas en la articulación de la rodilla y levanten apoyando los codos en la cama. Ahora: lo más importante es focalizarse en el clítoris y su capuchón. Si ella no lo hace; lo mejor es abrir y asomarlo con los dedos en "V" en el comienzo de los labios superiores. Y concentrarse en esa parte porque a muchos les gusta bajar y se pierden por ahí. ¿Me explico? Otra cosa que importa es no parar, mientras más tiempo se aguanten sumergidos ahí, mejor. A la hora de hacer, se hace de todo un poco: lamidas en circulo, envolver con los labios y dar tironcitos, chupar pero no fuerte, dar mordiditas, besitos con ruido... y si pueden mover la puntita de la lengua bien rápido, MUCHO mejor, si? si no saben hacerlo practíquenlo porque hace la diferencia.

Yo lo aprendí, no me sale muy rápido, pero bastante bien y en algún oral hago "lengüita" en la base del glande. Así que a practicar. Vamos a la parte de las personales porque hasta ahora fueron cosas que les gustan a todas; pero mejor vamos con cosas que me gustan a mí en particular: Primero: antes del oral me gusta la "amenaza buena" como decirme al oído: "te como cruda" y sinónimos que ustedes sabrán... seria calentar el ambiente. Y durante la chupada me gusta agarrar de los pelos y empujarle la cabeza contra mi sexo. Y guiarlo. Otra es que haga chupadas con mucho ruido. O que empiece con la lengua desde lo más abajo que llegue hasta el ombligo; mejor dicho: que me recorra. También unas cachetaditas con la palma entera, me abro bien de gambas y hay lugar... y ésta es la mejor: Al asomar el clítoris del capuchón queda así: "^" (con el clítoris abajo del arco, ¿si?). Bueno, ese espacio entre la capucha y el "botoncito" tiene un nombre que no me acuerdo ahora, pero es mi punto "G" por excelencia. Con la puntita de la lengua que me recorra todo ese arco bien rápido me hace tocar el cielo con las manos. Y que no pare ni un segundo, ni siquiera en las palpitaciones del orgasmo. Que siga y que siga... Esto mas o menos es lo básico para hacer el sexo oral; es muy difícil explicar con palabras porque en el fondo es un arte hacerlo bien; se trata de conocer mucho más a tu pareja, de darle el placer máximo de un orgasmo y sentirte el culpable, ¿no?

Iba a empezar a fantasear un poco, a darles sexo en clave de "tu"; pero si empiezo este relato va a ser muy largo para leerlo, así que me hago la difícil por ahora pero tenemos una cita para el relato que viene. Algunos me pidieron también sexo anal en clave de "tu" por eso vamos a ver si les cumplo el sueño a los que me quieren entrar por atrás (¿todavía no me probaron por adelante y ya quieren mas?) Como son, che!, igual quiero que se vayan bien calentitos después de leerme y por eso les voy a hacer un adelanto bien hot del próximo relato, así saben lo que se viene... porque me paso algo gracioso y caliente al mismo tiempo: Ante ayer me estaba haciendo flor de colada, y me había olvidado que iba a venir un vecino y amigo a casa para ver el partido y comer algo. Tiene 26 años y esta bueno, lindo cuerpo.

Y como me olvide completamente, estaba como colgada; me puse a limpiar y me olvide que era para que él venga y pasemos un rato. Entonces me fui a la cama y me puse a jugar con los dedos, me puse un poquitito de aceite nada mas y me colaba de a dos. A los diez minutos y yo hiper caliente sonó el timbre y me acorde al toque. Me quería morir. Me puse una falda así nomás y una remera y salí volando a atenderlo y le aparecí con las tetas que me rompían la remera; la respiración casi agitada, y con un olor a sexo que me moría de vergüenza; sobre todo porque nos tenemos confianza y lo hice pasar, todo bien. Pero se sentó en el sillón y como yo estaba parada al lado de él sentí que me podía oler; porque estaba mojada mal y desnuda, y la baranda a sexo la sentía yo que estaba parada... Y tampoco me quería sentar porque me manchaba la falda. Imagínense si me levanto y me queda toda la raya dibujada, me muero.

Así que charlábamos y yo con los brazos cruzados y juntando las piernas.... terrible. Después le dije que me iba al baño y a secarme porque estaba que no daba más. Sobre todo porque la calentura no me había bajado para nada; si en ese momento se me tiraba encima, me dejaba llevar a full. Le contaba esto a mi mejor amiga hoy a la mañana y lo primero que me decía (además de taparse la boca) "sos una boluda". Pero también con este chico me paso algo gracioso; porque una mañana salí a las apuradas, me cambie en el living y deje la bombacha ahí tirada sobre la mesita. Y cuando volvía a la tarde me lo encontré en el pasillo y no me acordaba que deje la casa hecha un desastre; y como le tenía que alcanzar unas revistas que me había prestado lo hice entrar y le dije "están en la mesita ratona". Y tenía la pila de revistas y la bombacha súper usada arriba. Primero pase para la cocina y cuando voy al living lo veo hipnotizado mirándome la ropita... ahí si pase vergüenza: le dije "perdoname, salí a las apuradas" y el todo colorado "esta bien, esta bien"... dios mío. Y no lo hice a propósito, pero en el fondo fue seducción mal. Por eso para la próxima también tengo un poco de seducción e histeriqueo típico mío, ¿no? También los tengo que poner al tanto porque hoy a la noche me voy a desahogar por las semanitas de reuniones de padres en el laburo y me parece que va a estar bastante lindo, como para escribir. Mis amantes: Les juro que no tardo mucho en escribir el próximo, espero que de acá saquen algo positivo, que hayan pasado un buen rato leyendo y para los que me confiaron su intimidad: que lo disfruten como mas les guste (pero traten de no adelgazar mucho, ¿si?).

Para terminar: gracias a Maru por colaborar poquito pero colaborar y a Chechi que la amo. Y a mis lectores que entraron mas de 12000 veces a mis relatos (¿no será mucho muchachos?), a los que me escriben casi a diario y me tratan con la mejor onda por msn: los súper quiero, ¿si? gracias por todas las lamidas en la cola, en el cuello, en la orejita y en mi sexo; los besos que me mandan también por todo el cuerpo y por hacer que esto sea una experiencia única. Les escribo de nuevo mi mail así no tienen que ir al primer relato