Quiero contarles algo que me sucedió hace poco menos de dos años, aunque pasó hace algún tiempo todavía me parece que sucedió ayer. Trabajo en una repartición publica, esta historia me pasó en Enero, un día de muchísimo calor, yo me había quedado esos días trabajando para tomarme las vacaciones más adelante.

La cosa es que estaba en mi oficina trabajando un poco y charlando otro tanto, pasó que alrededor de las 10 de la mañana entró a la oficina una compañera llamada Susana, ella tiene como 39 años, con 1.68 de altura, un hemoso par de piernas, dos hermosas lolas y lo más lindo una boca maravillosa con dos carnosos labios, que no hace que piense otra cosa que no sea tener mi pija en su boca.

Nunca tuvimos mucha relación, solo saludarnos en los ascensores o en los pasillos, lo que sí siempre me preguntaba "...si seguía de novio...", a lo que siempre respondía lo mismo "...por ahora sí..."

Ella entró y se sentó enfrente de mí escritorio a charlar con una compañera, estaba más que insinuante, con esa minifalda azul, con una blusa blanca que dejaba transparentar su sostén de encaje, se sentó en frente de mi escritorio, cuando cruzó las piernas dejó ver su ropa interior negra, la verdad me perturbó un poco el hecho de que se diera cuenta que la estaba viendo y no cambió de actitud, es más abrió un poco más las piernas, yo estaba como loco... así que no me quedó otra que levantarme e irme para otra oficina. Estuve como 20 minutos cuando volví, obviamente se había ido. Todo bien pero no podía sacármela de la cabeza, me imaginaba estar entre esas piernas, pero no veía como, hasta que me decidí...

Entonces dije que me cruzaba a comprar una gaseosa y cigarrillos, lástima que marque 6 pisos para arriba, yo trabajaba en el 3º piso y ella en el 9º. Cuando llegué a su oficina estaba la puerta cerrada, entré sin golpear a una antesala, luego hay otra puerta que da a su oficina, también estaba cerrada, estaba prendido el aire acondicionado, así que no me escuchó. Al abrir la puerta ella estaba leyendo unos papeles con las piernas sobre el escritorio, con la pollera subida y sin los zapatos, esa imagen me mató aparte tenía la blusa con los tres primeros botones desprendidos, lo que dejaba asomar en parte sus hermosas tetas...

No se sorprendió mucho cuando me vio, yo me sonreí y me senté en un sofá que hay enfrente de su escritorio, ella se sentó derecha y se acomodó la blusa y la falda. Nos pusimos a hablar del calor y de otras cosas... No podía aguantarme y le dije que pensaba si la invitaba a salir una noche de estas...

La primera reacción fue tirarse para atrás en su sillón, yo me empecé a reír y le pregunté "... si nunca se le había ocurrido esa idea... "ella se acomodó el cabello y se paró dando la vuelta, quedándose enfrente de mí, cuando me paré pude sentir su perfume... le dije que siempre tenía perfume a "Free-shop", la cosa es que de repente se me colgó de los hombros y apretó sus caderas sobre mí, me dio vueltas así yo quedé apoyado sobre el escritorio, no entendía nada... en eso ella se separó diciendo que podía entrar alguien a lo que yo respondí que había cerrado con llave y aparte estaba prendido el aire acondicionado, por lo que sería difícil que nos escucharan...

En eso ella me abrazó y me besó con fuerza apretándome con fuerza, yo estaba como loco y mi pija estaba que no daba más, bajé mis manos y empecé a subirle la pollera hasta poder tocar su diminuta ropa interior, llevé mis manos por debajo de su bombachita hasta llegar hasta el final de su colita... entonces ella se separó se agachó y empezó a desabrochar el cinto, luego siguió besándome sobre mi pantalón, hasta que desabrochó el pantalón bajándolo junto a mi bóxer, y entonces apareció mi pija en todo su esplendor pegándole en la boca. ella agachada como estaba se sacó la blusa y desprendió su corpiño dejando al aire sus hermosas tetas... yo estaba a full, riéndose me pidió permiso y empezó a besar mi pija muy despacio de arriba abajo... hasta que se lo metió todo en su boca. de arriba abajo muy lentamente, era una sensanción inexplicable..no lo podía creer que hacía 10 minutos estaba trabajando y ahora estaba ahí, yo pensé que me moría de placer en cada chupada, cada vez que me mordía la punta de mi pija, en eso me paró se sacó la pollera dejándose su ropa interior me ayudó a desnudarme completamente, me pidió que me sentara en el sofá, y arrodillada siguió degustando mi pija, mirándome fijamente, casi hipnotizándome con esa mirada... Seguimos así hasta que no di más, estaba a punto de acabarle en la boca, yo creo que esperaba eso... pero decidí que ahora me tocaba a mí.

La puse de pie la levanté y la acosté sobre el escritorio sentándome en su sillón, ella se me ofreció con las piernas abiertas. Empecé a besarle el ombligo, corrí su ropa interior que estaba húmeda, y encontré su conchita toda depiladita... casi me muero de la emoción al ver esa dulzura...empecé a besarla lentamente, luego a morderle muy despacio los labios que rodean el clítoris...ella gemía, no podía ser como se movía, luego comencé a jugar con mi lengua dentro de su vagina, luego la penetré con uno de mis dedos, luego dos hasta que intenté poner otro, cuando explotó en un gemido que inundó con sus jugos mi boca, que delicia, le saqué la bombachita, y le dije que si quería que disfrutáramos los dos, sin pensarlo se dio corrió y me acosté sobre el escritorio, y ella se sentó sobre mi boca, haciéndo un hermoso 69, empezó a jugar con su boca en mi pija nuevamente, yo seguía con su conchita y empecé a besarle la colita al principió me pareció que la incomodó pero no dejó de chuparme la pija, así que yo seguí con su conchita y su colita que se dilataba cada vez más y más, ella chupaba cada vez con más fuerza... yo estaba que no daba más y quería penetrarla en su colita... me corrí un poco para poder pararme la apoyé boca abajo sobre el escritorio y empecé a jugar con mi pija en su conchita penetrándola despacio en la cochita y en su colita, luego un poco más fuerte cuado ella me pidió que lo hiciera en su colita... empecé a hacerlo muy despacio, la penetraba y ella gemía más y más hasta que entró toda, no lo podía creer, luego me fui reclinando en el sillón hasta sentarme y ella quedó sentada sobre mí dándome la espalda, subiendo y bajando, yo le acariciaba las tetas que estaban que explotaban de duras que las tenía...

Me dijo que terminara dentro de ella, con dos embestidas mi pija explotó dentro de ella llenando su colita de leche, ella se estremeció pegando un gritó y luego quedamos en silencio unos minutos, me dijo que no le gustaba dejar las cosas a medias así que se salió y se agachó llevándose mi pija a su boca, limpiando todos los restos de semen que quedaba, no se de donde saqué fuerzas pero mi pija volvió a ponerse dura como y le dije que quería cogerla de vuelta, pero esta vez quería tenerla encima de mí, me senté en el sofá y ella se sentó en mi pija muy despacio, casi me muero de placer, hasta que entró toda... ella gritó de placer y empezó a moverse con más fuerza, después se levantaba y volvía a sentarse, se paró y dándome la espalda se puso mi pija en su concha que estaba más que mojada, ardía, reclinando su espalda sobre mí, yo empecé a jugar con sus pezones, a pellizcarlos, ella tuvo un orgasmo que la hizo gritar, no imaginé que podría moverse así, estaba llena de placer...

Me dijo que ahora me tocaba a mí, que quería ver mi cara cuando acabara, y casi sin darme tiempo a nada puso toda mi pija en su boca y empezó a chuparla con fuerza, subiendo y bajando hasta que hizo que estallara llenándole de leche su boca, me miraba a los ojos mientras yo pensé que me moría, fue el mejor orgasmo que tuve en mi vida, como lo había hecho antes, se tomó todo, no dejó nada...

Nos quedamos un rato mirándonos a los ojos, la verdad no podía más, ella se paró se acostó sobre el escritorio abriendo las piernas, empezó a tocarse y me dijo "... ahora quiero el postre, quiero terminar en tu boca... "la di vuelta, y sentado en su sillón le di la mejor chupada de concha que había hecho en mi vida, hasta que me llenó la boca con sus jugos..., yo quería cogerla de nuevo, pero no tenía fuerzas para nada. Fuimos al baño, nos higienizamos, nos vestimos y la despedí con un beso en la frente.

No podía creer lo que me había pasado, mientras bajaba en el ascensor, como será que casi olvidé lo que iba a comprar ...Lo que fue difícil de explicar, porqué tarde como una hora y medía, si el quiosco queda enfrente de mi oficina.

Con Susana todo bien, solo estuvimos juntos un par de veces, una vez en un hotel cerca del laburo, y la otra fue una mamada que me hizo en mi auto una vez que llovía y la llevé a su casa. Después sin decirnos nada, ninguno propuso nada, será porque los dos teníamos un presentimiento, y eso se dió porque la mujer que más me hizo gozar, no es otra que la que hoy es mi JEFA.