Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Varios

Mi clienta favorita

~~Aquel viernes habia sido un dia bastante flojo de ventas. Nos acercabamos a final de mes y la gente no tenia excesiva pasta en los bolsillos como para comprar electrodomesticos. Faltaban diez minutos para cerrar y me encontraba en la habitacion interna de la tienda donde estaban los frigorificos y los congeladores. En la parte de afuera de la tienda teniamos las lavadoras, lavavajillas y microondas. El negocio lo compartiamos Luis y yo desde hacia tres años. Se trataba de un negocio de electrodomesticos de segunda mano el cual nos proporcionaba buenos dividendos. Aquella tarde Luis habia marchado a ver a unos de nuestros proveedores por lo cual me hallaba solo en el local. Me presentare para que me conozcais mejor.
 Me llamo Rafael y vivo en Santander. Tengo 39 años, estoy casado y tengo 3 hijos con Eugenia, mi mujer desde hace 12 años. Jamas le habia sido infiel a mi esposa aunque no por falta de ganas y de ocasiones. Alguna que otra vez habia podido tener la oportunidad de estar con alguna que otra mujer pero siempre habia podido aguantar la tentacion. Tengo el cabello castaño, corto, soy de complexion fuerte pues mido 1.83 y peso 85 kilos.
 Estaba revisando unos aparatos antes de cerrar cuando oi el chivato que tenemos colocado en la puerta para avisar la entrada de algun cliente. Sali a ver quien era y me encontre con la Sra. Campos. La Sra. Campos era una mujer que habia venido con su hija hacia un mes a mirar varios aparatos pues su hija se casaba seis meses mas tarde y queria regalarle los electrodomesticos de gama marron y blanca. Recuerdo que las atendi y que el presupuesto que les hice ascendia a una cifra bastante respetable de dinero. Se veia que eran gente de alto nivel adquisitivo pues la ropa asi lo reflejaba.
 Era una mujer de unos 50 años pero muy bien llevados, parecia que tuviera muchos menos y le gustaba arreglarse mucho pues su cara tenia menos arrugas de las que a su edad suelen tener otras mujeres. Mediria sobre 1.60 y tenia el cabello canoso pese a lo cual no parecia mayor. De cuerpo no estaba mal pues pesaria sobre 50 kilos aunque su pecho destacaba bastante pues le rondaria sobre la talla 100 que para su altura y delgadez no estaba nada mal. Por ultimo el conjunto se completaba con un culo respingon bastante apetecible el cual no deje de observar la ocasion anterior cuando vino con la hija.
 Recuerdo que Luis, mi socio, me comento al irse las dos que me habia quedado prendado de aquellas dos mujeres. La verdad es que tenia razon, las dos me gustaron bastante debido a su porte aunque debo decir que quiza me senti mas atraido por la madre que por la hija. Asi pues la visita de aquella mujer a la hora de cerrar me alegro el final del dia.
 La visita de la Sra. Campos se debia a que deseaba ver unos cambios nuevos que les comente que debiamos recibir asi como unas lavadoras de mayor centrifugado. Aquella tarde iba especialmente guapa y elegante. Vestia un traje chaqueta negro de mil rallas con una blusa blanca un tanto escotada que mostraba parte del canalillo de sus senos. La falda llegaba a medio muslo mostrando buena parte de sus piernas. El conjunto se cerraba con medias negras transparentes, zapatos de tacon alto de aguja y un bolso negro de charol a juego con los zapatos. Yo, por mi parte, llevaba una camisa azul celeste y pantalones gris marengo de vestir.
 Al ser casi la hora de cerrar y sabiendo que tardariamos un rato viendo las novedades que me habian llegado le comente que cerraria la puerta para que no entrase ningun otro cliente debido a la hora que era. La Sra. Campos me sonrio de manera encantadora diciendome que no tenia prisa pues su marido estaba fuera de casa por negocios y que fuese a cerrar mientras me esperaba fisgoneando los aparatos.
 Fui a cerrar la puerta de la tienda y a bajar las persianas pensando en el comentario de que su marido se encontraba fuera de la ciudad y que no tenia prisa. Aquellas palabras me pusieron alerta, sin saber que significado podrian guardar. Volvi a donde se encontraba y me quede de piedra viendola apoyada hacia delante en un arcon echando hacia atras sus nalgas las cuales se marcaban por debajo de la falda. Me encantaba ese culo tan apetitoso y poderoso. Ver ese culo en pompa hizo que mi verga se pusiera dura ante ese espectaculo que me estaba ofreciendo. Se volvio asustada hacia mi pues no me habia oido entrar pero enseguida su rostro volvio a su sonrisa habitual.
 Sra. Campos, disculpe que la haya asustado pero ya estoy aqui para enseñarle los nuevos modelos de frigorificos y de lavadoras que nos han llegado.
 No me trates de usted, por favor. Me hace sentir mayor y ademas no nos llevamos tantos años pues supongo que tu debes rondar los 40 mas o menos. Me equivoco?
 Tengo 39, lo que pasa es que no utilizo el tratamiento a no ser que me lo pidan.
 Pues te permito que me tutees, creo que nos resultara mas facil a ambos. Llamame Sofia, por favor.
 Asi pues me dirigi hacia los frigorificos para enseñarselos mas detenidamente. La mirada de aquella mujer me hipnotizaba, creo que deseaba provocarme con esos ojos grisaceos que poseia y que tanto me subyugaban. Me siguio contoneando sus caderas de manera provocativa. Aquella mujer me estaba seduciendo. Estaba apoyado en la puerta del frigorifico enseñandole el interior del mismo con sus balcones, etc cuando de pronto se acerco peligrosamente a mi y dirigio su mano hacia mi entrepierna acariciandola suavemente con esa mano. Tenia unas manos perfectamente cuidadas con la piel suave y las uñas pintadas de color rojo oscuro.
 Cariño, callate de una vez o te arrancare las pelotas. Ya tendremos tiempo de hablar de eso en otro momento, de acuerdo? Ahora solo deseo que me folles y follarte con pasion y desenfreno.
 De acuerdo Sofia. Dejaremos los negocios para otro momento.
 Sofia se elevo hacia mi sobre las puntas de sus pies para aproximar sus labios a los mios ofreciendome su tentadora lengua que no pude negarme a acoger dentro de la mia. Juntamos nuestras lenguas luchando en un beso apasionado. Sofia se apretaba contra mi haciendome sentir su pubis rotando contra mi polla. Esta crecio de manera escandalosa lo cual visto por Sofia hizo que esta sonriera triunfante.
 Rafael cariño, asi que no puedes negarte a mis encantos, eh? Eso me gusta, me gusta hacer que seas infiel a tu mujer, se que deseas follarme, lo supe desde el otro dia cuando vine con mi hija y vi el deseo reflejado en tus ojos mientras nos atendias.
 Sofia, eres una puta pero me encantas. Deseo follarte ese cuerpo fabuloso que tienes y que tanto me excita. Me gustan las mujeres maduras de buen ver como tu pero que en su interior esconden una calentorra.
 Cogi con fuerza a Sofia de los brazos y la hice colocarse de cara a la puerta del frigorifico y de espaldas a mi. Me abalance sobre ella haciendola sentir toda mi herramienta pegada a sus nalgas. Sofia suspiraba notando como me frotaba contra ella con mi polla en ristre solo cubierta por la tela de mis pantalones. Le agarre la americana de uno de sus brazos y se la quite de golpe y tras esto solte los botones de su blusa arrancandolos de cuajo y dejando sus pechos al aire.
 Menuda sorpresa me lleve al ver que no llevaba sujetador y ver como aparecian sus pechos en todo su esplendor coronados por unos pezones rosados que se elevaban hacia arriba. Le solte la falda haciendola resbalar sobre su grupa, sobre sus muslos, a lo largo de sus piernas, y amontonandose formando una col gigantesca alrededor de sus tobillos. Le baje las bragas que portaba y me arrodille tras ella dirigiendo mi lengua hacia su ano. Sofia gimio diciendome las siguientes palabras:
 Asi Rafael, lo estas haciendo muy bien. Sigue asi, chupame el agujero del ano que lo tengo muy sensible. Me encanta que me lo coman, has acertado de pleno en tu busqueda.
 Te gusta como lo hago?
 Como respuesta agarro mi cabeza con su mano y la llevo hacia sus nalgas para que siguiera comiendole el agujero oscuro y apetitoso realizandole un beso negro que la hizo llegar al extasis. Sofia gemia y temblaba recibiendo mi caricia lingual en los alrededores de su ano y en el interior del mismo. Al mismo tiempo dirigi una de mis manos hacia su coño y empece a acariciarle el clitoris haciendolo crecer de manera suave pero sin pausa. Los gemidos de aquella mujer se convirtieron, gracias a mis caricias, en autenticos gritos de placer. A pesar de su edad era una mujer terriblemente fogosa, me encantaba ver gozar a esa mujer, me hacia poner a tope pensando en lo que vendria despues. Se corrio tres veces sintiendo como le comia el agujero anal y como le acariciaba la vagina y sus labios vaginales.
 Tras recuperarse del ultimo orgasmo me alargo la mano haciendome levantar. Me llevo hacia un arcon de dos metros que tenemos y me apoyo en el mismo arrodillandose delante de mi observando minuciosamente mi entrepierna. Alargo sus manos hacia la misma acariciandola suavemente por encima de la tela del pantalon y haciendo crecer mi rabo de modo increible. Solto la hebilla sacandome el cinturon y despues arranco el boton bajando la cremallera y buscando ansiosamente mi bulto por encima del slip. Sofia se lanzo a lamer la tela del slip haciendome sentir un placer fenomenal viendo como acariciaba mi polla sin dejarla aun en libertad.
 De pronto se quedo mirandome a los ojos con una mirada de viciosa terrible y bajo la tela del slip haciendo saltar mi ariete hacia su boca. Se trago golosamente toda mi polla hasta el fondo sin dejar nada fuera pese al tamaño de la misma. Mi glande golpeaba su garganta haciendola atragantar pero no por ello la solto o la saco minimamente de su interior. Inicio un movimiento mas rapido con su boca ayudandose de su mano y me masturbo salvajemente mientras seguia mirandome a los ojos. Tras dos minutos de recibir ese tratamiento por parte de ella me corri en el interior de su boca lanzando gritos de placer y pidiendole mas y mas. Sofia se trago toda mi catarata liquida aunque parte de ella resbalo por la comisura de sus labios y cayo por su barbilla hasta depositarse en sus pechos. A los cinco minutos de aquella pequeña batalla, Sofia me coloco tumbado en el congelador y volvio a coger mi polla flacida con su mano derecha mientras me decia:
 Ahora Rafael voy a volver a chupartela para hacertela crecer de nuevo y que me des todo el placer que mi marido no me da en casa.
 Empezo a lamer mis testiculos con la punta de su lengua consiguiendo arrancarme suspiros de placer con sus caricias. Lamio con su lengua toda la longitud de mi verga hasta llegar al glande, momento en el cual abrio su boca y volvio a introducirse la polla en el interior de su boca volviendo a chuparla con ganas. Aquella mujer comia de maravilla, era un volcan en erupcion y deseaba tener un hombre en su interior con desesperacion.
 La hice levantar y la coloque tumbada boca arriba sobre el congelador. Agarre sus piernas con mis manos colocandolas sobre mis hombros y apunte mi verga hacia su vagina y empece a apretar con suavidad primero haciendo deslizar el glande en su interior. Sofia me apreto de las nalgas contra ella y me pidio mas. Me quede parado y de repente aprete de un golpe entrando hasta el fondo de aquella mujer. Ella grito fuertemente e inicio un movimiento de rotacion con su pelvis mientras me miraba a los ojos con cara de lujuria.
 Empezamos a follar como locos, mi polla entraba y salia sin parar de su agujero sin darle un solo segundo de respiro. Ambos boqueabamos buscando aire para continuar con aquella lucha que estabamos entablando. Sofia gritaba y gemia como un animal en celo pidiendome cada vez mas y mas:
 Venga Rafael cabron, sigue follandome hasta que revientes. Acariciame el agujero de mi culito mientras me jodes con esa verga maravillosa que tienes y que me vuelve loca de pasion.
 Alargue mi dedo corazon hacia su ano y empece a golpear en la puerta de su agujero haciendola suspirar de placer. A Sofia le encantaba el coito anal por lo que veia y a mi la verdad es que me fascina hacerlo por detras. Una vez folle a mi mujer por el ano en la ducha de casa y puedo jurar que fue la mejor sensacion jamas vivida por ambos en nuestra larga experiencia sexual. Evidentemente Sofia deseaba sentirme en su agujero anal y yo, por supuesto, no pensaba defraudarla. Introduje mi dedo hasta el fondo sin ninguna dificultad. Por su parte, la mano de Sofia tampoco se quedo quieta y se dirigio hacia mi ano introduciendo dos dedos en mi interior arrancandome un gemido de placer. Jamas habia tenido un dedo en mi culo y la verdad es que la sensacion me encanto.
 Asi cariño, lo estas haciendo muy bien. Sigue asi que luego meteras tu polla en mi culito. Quiero que me empales con ella hasta quemarme por dentro. Me encanta que me follen por el culo y tu polla es un bocado demasiado apetitoso como para dejarlo pasar sin aprovecharlo al maximo.
 Tras estas palabras no pude resistir por mas tiempo aquel tormento y levante a Sofia del arcon colocandola de espaldas a mi con su culo en pompa desafiandome. Me situe de puntillas tras ella apuntando mi verga hacia su ano. Aquella madurita era un encanto y un vicio al mismo tiempo, asi pues aprete mi glande entrando mi cabeza dentro de ella. Sofia se quedo sin respiracion sintiendo mi lanza. Yo quede unos instantes quieto notando la apretura de su carne alrededor de mi. La sensacion era genial. De repente aprete hasta el fondo haciendo golpear mis testiculos contra sus nalgas.
 Aaaahhhh!!! Asi cabronazo, no te pares ahora que esto es lo mejor. Destrozame sin compasion. Dios que bueno, es maravilloso. Me quemas con tu barra de carne pero solo puedo pedirte que sigas. No pares nunca tesoro.
 Sofia inicio un movimiento rotatorio con sus nalgas sobre mi polla haciendome sentir en la gloria. La verdad es que aquella mujer tenia una experiencia formidable en las elides amatorias. Follaba de maravilla. Dirigi mi mano derecha hacia su clitoris follandola por ambos lados. Sofia aullaba como una histerica mientras se movia copulando como una desesperada.
 Muevete mas deprisa, cabalgame como un potro salvaje. Quiero que te corras conmigo, quiero que alcancemos el orgasmo juntos. Estoy a punto de correrme y deseo que revientes y que llenes mi culo de leche.
 Los ojos de aquella mujer echaban chispas, jamas habia estado con una mujer que disfrutase de aquella manera del sexo. Era bestial. Los golpes que le daba con mi polla eran tremendos, mis huevos golpeaban contra su ano. Al menos estuvimos diez minutos jodiendo de aquel modo. Yo aguantaba de forma increible sin correrme con lo que el placer que sentia Sofia era aun mayor. Finalmente me quede parado y lance un grito desgarrado explotando dentro de ella y expulsando grandes cantidades de esperma en el interior de aquella mujer la cual se corrio de manera escandalosa. Me tumbe sobre su espalda recuperando el resuello tras aquel combate sexual. Bese el cuello de Sofia y me comi el lobulo de su oreja haciendola temblar de deseo.
 Que tal te encuentras, cariño?
 De fabula, me has dejado saciada. Lo repetiremos pronto, verdad?
 Claro pero me gustaria que la proxima vez participase tu hija.
 Eres un cabron, seguro que le encantara joder contigo, me sonrio cerrando los ojos.
 

Datos del Relato
  • Categoría: Varios
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1520
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.15.145.50

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 38.461
»Autores Activos: 2.273
»Total Comentarios: 11.905
»Total Votos: 512.062
»Total Envios 21.926
»Total Lecturas 105.323.149