Mi Cuñado me hizo suya.

Era una tarde de Otoño, de esos días soleados pero corría un aire fresco, hacía días atrás que había tenido problemas con Raphael mi esposo: por que nunca estaba en casa, siempre corría a casa de su mami y tenía la presunción de los valores humanos que su hermano tenía hacia él eran invaluables; y la discusión con mi esposo era siempre que la familia era primero.- (esposa e hijos), pero el prefería siempre la compañía de su hermano.
Recuerdo esa tarde Raphael me invitaría a salir, cambiar la rutina, no importaba a donde, solo deseaba salir de casa con mi marido; solo que el destino jugaría de diferente circunstancias. Esa tarde vestia muy provocativa. Un vestido corto, unas tangas blancas de encaje y un brasier de media copa donde mis pechos asomaban en un gran escote y zapatillas. Pero llegó por mi y venía acompañado de su hermano Grrr que fastidió y coraje me dio. Nos salimos a un parque a tomar unas nieves vamos los tres y nos acompañaban nuestros hijos; dos angelicales criaturas que corrían alegremente por los juegos del parque.
Para variar comenzamos a discutir mi esposo y yo. Nos enfadamos tanto que desidió dejarme ahí e irse; le dijo a su hermano "vámonos carnal" pero Luis le dijo que lo vería luego que nos acompañaría a mi y a mis hijos. Ups!!! juro que jamás esperaba esa respuesta de mi cuñado; Luis me gustaba mucho desde que lo conocí era muy galante, recuerdo esa tarde me decía que me estaba poniendo muy buena y bonita, yo solo me sonroja y le sonreía. No se en que momento me atrajo hacia el y me beso, que rico beso pero me desconcertó mucho, me separé de inmediato en cuanto reaccione; bueno creo que no fue tan de inmediato por que si duramos tiempo basándonos, pero como mis hijos andaban lejos jugando? Pues me dejé seducir por el; nos volvimos a besar mientras acariciaba mis piernas y poco a poco fue acercando su mano a mi conchita que ya se encontraba húmeda y con su dedo sobre mi tanga restregaba jugueteando mi clitoris, le respondí con un gemido mientras tocaba su pene sobre su pantalón y que ya se sentía muy duro. En eso metió su mano bajo mi brasier estrujando mi seno, lo sacó y lo succiono a placer, yo ya no aguantaba más, pero estábamos en un parque y mis hijos andaban por ahí, en cualquier momento podrían aparecer.
Fue cuando mi cuñado me bajó mi tanga? Quitandomelas, las olió aspirando profundo y diciendo " que rico huele tu panochita", se las guardo y fue cuando mis hijos en ese momento aparecieron; ash que inoportunos dije, pero ya me estaba imaginando montarlo y sentir ese pene tan erecto y duro muy profundamente dentro de mi; me fui a mi casa y me masturbe en el baño recordando lo sucedido con mi cuñado y deseandolo para que me hiciese lo que se le diera su gana, ahh que rico me vine.
No dejaba de pensar en el y no me importaba q fuese el hermano de mi esposo. No pasó mucho tiempo cuando fue a casa de mis papás y nos invitó a mi y mis hijos a una comida en su casa, recuerdo q mis padres se molestaron mucho pero no podía más, quería sentirlo y al menos tenerlo cerca? Me inquietaba. Ya en su casa la fiesta estaba en su apogeo y la cerveza se había terminado, me pidió lo acompañara y ni mi esposo, ni mi concuña, sospechaba algo; así que fuimos pero antes de llegar al súper, se detuvo frente a una casa que aún no estaba habitada, entramos y comenzamos a besarnos tan apasionados, parecíamos adolecentes desesperados y cachondos; me quitó de inmediato mis ropas mientras yo intentaba quitarle las suyas, me besaba el cuello y estrujaba mis senos mientras los succionaba y mordisqueaba, mientras yo le sacaba el pene y la hacía una pagita, lo acariciaba, quise chuparcelo pero no me permitió, casi de inmediato me puso a gatas y me lo dejo ir poco a poco, me penetraba muy lento, abriendo mis labios vaginales, no lo tenía tan grande pero si grueso y vaya que lo sentía y lo disfrutaba, jadeaba, gemía me mordía los labios de tanto placer que estaba recibiendo; me estaba cogiendo rico cuando empezó a moverse más rápido y profundo, ohh que rica verga pensaba yo mientras me cogia rudo y salvaje; me sujetaba de mis caderas y me jalaba hacia el, lo sentía muy profundo.
Yo no pude venirme pero lo sentía y lo disfrutaba delicioso, hasta que sentí su chorro de semen cálido y viscoso, fue abundante por que senti que me llenaba toda mi panochita de leche. Que riiicooo, fuen una sensación tan rara, entre placer, lujuria y deseo prohibido.
Me limpié y nos arreglamos las ropas y nos fuimos por la cerveza; al llegar a su casa todo fue tranquilo pero cada que lo veía de reojo? Se me mojaba mi rajita al solo recordar su verga profanar mi panochita tan salvaje, tan erótico y llena de lujuria; también llegaba a mi mente las palabras de mi esposo cuando decía que su hermano era la única persona que jamás lo traicionaría; Si supiera que me dio un cogidon, pensaba yo. Jamás volvió a pasar nada ya que al poco tiempo me separé de Raphael y no lo volví a ver nunca más, aún que hay veces que de repente recuerdo esa aventura y me estremesco.
FIN.